Capitulo 1. Conocerte Duele

1380 Words
Al parecer mi destino siempre será el fracaso, de una u otra forma siempre termino herida en mis relaciones sentimentales, por alguna extraña razón siempre me dicen que es mi culpa, que no me empeño en amarlos, pero en realidad-¿los he amado de verdad?- Siempre al terminar lloro, me emborrachó y en medio de mi resaca siempre es la misma pregunta, quizás por que al fin y al cabo busco una razón para que duela menos. Como siempre inició mi día dando gracias a el universo y a Dios ese que dice mi mamá que hay que agradecer siempre, por amanecer y no tomar la decisión de dejar esta miserable vida que tengo y creo que es el pago por los pecados de mi padre. Mi madre habla poco de él pero, con el pasar de los años entendí el daño tan enorme que le hizo a la familia, maltrato, alcohol, drogas y miles de visitas a la cárcel hasta que se hartó y ella misma lo puso donde está, en una -cárcel de máxima seguridad-, el busco su fin al convertirse en la mano derecha de un narcotraficante ruso. Seguí mi día viendo el periódico, terminé mi preparatoria en una escuela pública, siempre supe las limitaciones que habían así que apliques una beca, me esforcé en sacar buenas notas, en estudiar mucho pero no fue suficiente, no lo logré y me odio por eso, sabia la ilusión que tenía mamá, que su única hija estudiara en la universidad, pero como siempre lo arruine, así que decidí que debía trabajar así fuera limpiando pisos o atendiendo mesas en un restaurante, pero algo tenía que hacer, no podía darme el lujo de ser una carga. Había ido a muchos sitios a llevar mi currículum pero no recibía respuesta, hasta que mi mejor amiga me llamó y me dijo que en el negocio de aseo y limpieza de su papá necesitaban a alguien que hiciera labores domésticas, y yo acudí de inmediato. Su padre me hizo una entrevista lo más chistosa que había visto, solo me dijo tu madre es hermosa y pregunto cosas como -¿qué le gusta a tu madre?- fue en realidad algo muy chistoso. Mi jefe y posiblemente mi padrastro, me envió a unas oficinas que quedan en el área más comercial y de alta gama de la ciudad, en esta área se encuentran los mejores centros comerciales, joyerías, centros de convenciones y como olvidarlo la torre WM, en esta torre están desde centros de eventos hasta múltiples oficinas administrativas. Quede boquiabierta cuando el señor Pedro mencionó que debía dirigirme a la torre WM al piso 54 a realizar labores de limpieza en las oficinas, pero me recalco que debía ir después de 9 de la noche, es extraño pero necesito el dinero y además el señor Pedro no me engañara y menos si trata de querer conquistar a mi mamá. Cuando llegue a la puerta principal de la torre, la recepcionista dijo que debía entrar por la parte trasera así que rodee el edificio hasta llegar a la puerta indicada, mencione tal cual dijo el señor Pedro que debía decir – Soy del área de limpieza me dirijo al piso 54 para hacer del espacio un lugar desinfectado y agradable- Se los juro traté de no reír mientras lo decía parecía un robot, la persona encargada de la puerta solo sonrió dando espacio para que pudiera ingresar, solo dijo usa el ascensor de servicio y llega hasta el piso 54, solo conteste Ok, El solo dijo -Luego que salgas del ascensor verá una puerta en el fondo, ahí es la oficina. Lo que no pensé es que ese día empezaría una nueva historia para mi. Cuando salí del ascensor, observé que solo había una puerta, deduje que era la oficina de la persona que debía limpiar. Y no supuse mal estaba abierta y no había nadie en su interior, me limité a limpiar, entre al baño para lavarlo y mientras lo hacía pude sentir que alguien estaba ingresando en la oficina, solo dije en voz alta -Tenga cuidado el piso esta mojado aun- pero lo último que escuché fue un fuerte estruendo. Salí del baño lo más rápido que pude, pero lo único que conseguí fue caer sobre la persona que ya estaba tendida en el suelo, pedí disculpas miles de disculpas pero tenía pánico de abrir los ojos, quería que la tierra me tragara, pero la persona se levantó y de pronto sentí sus manos sobre mi rostro, abrí los ojos poco a poco y vi un Ángel, es un hombre salido de una historia de w*****d, alto, con buen cuerpo, sus hombros anchos se veían fuertes y sus grandes manos cubrían los lados de mi cara, sentía su respiración, y de pronto dice con su voz gruesa y sexy -¿No te lastimaste?- yo solo dije -No- prácticamente quede hipnotizada sus ojos azules viéndome hicieron que me quedara muda. Soltó mi rostro, y tomó su teléfono y marcó un numero desconocido para mi, después solo escuché -Despídela-, a los segundo llego un mensaje a mi teléfono era el señor Pedro -Lo siento debo despedirte- solo levante la mirada y el estaba ahí sentado en la silla mirando documentos, bajé la mirada entre al baño terminé de limpiar y recogí todo. Me senté en el excusado para sacar mi ira y lo hice llorando, di gritos internos, ahogados, comprendí que había sido tonta al creer que este tipo dejaría pasar lo sucedido pero debía ser respetuosa y acatar las órdenes del señor Pedro, me cambié quité el overol, lo guardé en la maleta y mientras recogía mi teléfono Angie me llamo. ¿ Quién es Angie?, es la amiga mala influencia, aparece siempre cuando tengo deseos de desaparecer, son momentos en los que tengo impulsos que seguramente no tendría estando de buen ánimo, solo dijo en la llamada -Estoy en Monckybar, si quieres puedes llegar- Estaba tan enojada que decidí ir pero no tendría tiempo para arreglarme así que lo hice en el baño de igual forma estaba despedida no podía hacerlo dos veces. Solte mi cabello me maquille de forma agresiva ojos oscuros y labios rosa fuerte, subí un poco más la falda que tenía puesta, salí del baño y no dije absolutamente nada, que podía decir-Muchas gracias señor sin nombre acaba de arruinar mi vida- ó -Muchas gracias que pase buena noche- ja ojalá y se rompa la pierna este idiota. Cuando salí de la oficina vi que el señor Pedro estaba afuera, me miró y me dijo -A donde vas?- pero era tal mi enojo que le respondí -No tengo por qué decirte a donde voy- baje el maletín donde se guardan los productos de limpieza y el uniforme, le di las gracias y le dije que lo sentía que aún no comprendía mi error pero que no le mencionara nada a mamá, cuando caminé un par de pasos hacia el ascensor vi que el hombre apuesto sin nombre estaba en la puerta hablando con el señor Pedro. Baje y para mi sorpresa Erick mi ex-novio estaba afuera, no dijo nada solo extendió su brazo sosteniendo un casco y dijo -se que necesitas aire fresco- me subí y me llevo al puente donde siempre iba cuando me carcomia la ira, grité, grite mucho pero entendí que debía seguir adelante, me llevo al bar y lo último que recuerdo es que alguien me dijo no te vas a arrepentir. Cuando desperté estaba en una gran cama un gran cuarto olía delicioso pero no era mi cuarto, me vi vestida solo me hacían falta los zapatos, así que me imaginé que no había echo nada, camine y salí de la habitación, había un hombre sin camisa en la sala de espaldas cuando giró no lo podía creer, las piernas me temblaban y lo único en lo que pude pensar es como carajos llegue hasta aquí. Sumado a todo esto, no recordaba nada solo que Erick me dio una bebida y hasta ahí recuerdo, este hombre me miró y me dijo -sabes que casi eres violada, si no es por mis hombres y yo estarías muerta- mi cerebro estaba procesando lo que decía pero era casi imposible, mi cuerpo falló y me desmaye.

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