Veintiuno

1159 Words

Danna y yo nos miramos al mismo tiempo y pude imaginarme el poema que era mi cara. Sin necesidad de hablar, supimos de inmediato que teníamos que inventar una excusa. —Eh, Jayden, ¿Cómo te va? —intenté disimular, pero no soné para nada relajada. Él nos miró a las dos detenidamente y recordé nuestra vestimenta de acosadoras, lo había olvidado. ¿Cómo iba a explicarle que salí nuevamente a escondidas de la casa después de habermen dado un sermón y ahora nos encontrábamos varadas en medio de la carretera por ir a espiarlo a él? — ¿Qué haces a éstas horas por la calle? Recuerda lo de... —Sí, lo sé, solo salí un momento con mi amiga a... —lo interrumpí y no supe que decir. Miré a Danna en busca de su ayuda. —Me estaba acompañando a partirle los vidrios del carro a mi novio —dijo como si fue

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD