1. "A ti, desde la distancia del tiempo"

469 Words
Querido tú: Cuando nos encontramos por primera vez, fue algo completamente normal. No hubo nada especial, ni una señal que anunciara lo que vendría después. O eso quiero creer. La verdad es que no lo recuerdo con claridad; era muy pequeña, y tú apenas hablabas. Pero sí recuerdo la emoción: una nueva familia se mudaba frente a casa, y eso solo podía significar una cosa… un nuevo amigo. Es curioso cómo, de niño, siempre terminabas acercándote a mí. Querías jugar conmigo y con mi hermana; supongo que era porque a menudo jugabas solo, y nosotros vivíamos justo frente a ti, tan cerca y tan lejos a la vez. Recuerdo que tu papá te observaba desde la ventana y me decía que fuera a la entrada de tu casa para jugar contigo. A veces lo hacía, y tú, emocionado, sacabas casi todos tus juguetes, como si quisieras mostrarme tu mundo entero. Al rato, tu mamá salía, recogía todo con gesto molesto y te hacía entrar. Cerraba la puerta, y tú, desde dentro, me mirabas con los ojos húmedos, a punto de llorar. Supongo que temía que una niña tres años mayor jugara contigo… Eras tan pequeño, tan tierno. Me cuesta creer que ahora seas más grande que yo. El tiempo pasa, y a veces lo hace tan rápido que parece burlarse de nosotros. Hoy escribo esto solo para mí. Pero si algún día llegas a leerlo, no pienses mal. Lo que estás leyendo es solo mi versión de la historia, la única que conozco, la única que puedo contar. No quiero que sientas culpa, ni pena, ni ninguna clase de obligación. Fui yo quien decidió amarte, y aun sabiendo que no sentías lo mismo, te atesoré. Me quedé cerca, incluso cuando dolía. No me arrepiento. No creo que haya perdido el tiempo, ni que debí buscar “a alguien mejor”. No. Para mí eras tú, o no era nadie. Cada momento contigo fue especial. Cada recuerdo me arranca una sonrisa, aunque duela un poco. Y sí, sé que me diste señales, muchas, de que no debía enamorarme. Pero las vi y las ignoré, como quien decide caminar bajo la lluvia sabiendo que va a mojarse… y aun así lo hace, feliz. No me importó lo que viniera después. Solo quería vivir nuestro capítulo, y si era posible, extenderlo un poco más. Nunca me cansaré de amarte, ni de decirlo. Te amo. Y aunque no soy buena con las palabras, escribir me permite decir todo lo que nunca me atreví a pronunciar. Te amo, incluso si ya han pasado más de diez años sin hablarnos. Sigues en mí, como una canción que nunca termina de apagarse. Esta es mi parte de la historia. La que se escribió desde mis ojos, con el corazón lleno de ti. Con cariño, N.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD