Mariana, quedó por un momento en una especie de "trance", en donde en un lapso de 5 segundos en su mente parecía haber pasado una hora en la que su mento solo podía escuchar esas palabras "¿te gustaría bailar?", no podía creerlo, él por fin ¿la vió? ¿es enserio?, estaba absorta en medio de incredulidad y emoción contenida por una reacción que estaba esperando desde hace mucho tiempo. El ofrecimiento flotó en el aire como un desafío silencioso. Pero **Vale**, que hasta entonces había estado sumergida en una conversación animada con las modelos, captó las palabras al instante. Con la gracia de un torbellino y el brillo del alcohol en los ojos, se interpuso entre ellos antes de que Mariana pudiera responder. —*¡Esa es la mejor idea que has tenido en semanas!* —exclamó, enredando sus dedos

