— Cálmese querida, quizás en otra ocasión tenemos el desagrado mutuo de encontrarnos y está vez logra ganarme aunque sinceramente lo dudo, carece de materia gris y de audición. Wow cerró con broche de oro, levantó del suelo la bolsa con hielo y me la colocó en el puente de la nariz para luego marcharse. Esa parte de Lucía no la conocía en absoluto y definitivamente me gustaba. — Quita esa sonrisa de idiota que tienes — me dijo Aimee molesta — ¿Quién es esa mujer corriente y vulgar? — Esa mujer corriente y vulgar a como tú le dices en ardor a que te dejo callada, se llama Lucía y no es mi conquista, Adriel me pidió que la fuera a traer y la llevara a alguna de sus propiedades entonces la traje para acá. — ¿Adriel? ¿De dónde conoce a esa tipa y porque la trajo a esta casa? — No sé de dó

