—Isa, Isa, despierta hermosa
—Mmm
—Despierta, princesa
—Mmmm
—Por favor no hagas esos sonidos que te voy a volver a tomar en este momento aunque estés durmiendo.
—Mmm ¿Qué pasa?
Dijo Isa con voz pastosa por estar durmiendo, ya eran las nueve de la mañana, pero ella apenas llevaba unas dos horas y media durmiendo.
—Vamos a trabajar princesa.
—No quiero.
Dijo cómo niña pequeña haciendo berrinche.
—Nena vamos, tu apenas entras a trabajar y ya quieres descansar.
—Es tu culpa, no me dejaste dormir en toda la noche
—Oye no seas así, no me culpes, porque bien que me pedías que ....
—Shhhh cállate, auchh
Dijo Isa levantándose como resorte de la cama, pero un dolor en su entrepierna la hizo acostarse de nuevo.
—¿Qué pasa?
Dijo Roberto entre divertido y preocupado.
—Ayyy me duele
