Capítulo treinta y tres Pov Neythan Observo los rayos de sol que se cuelan por mis ventanas mal cerradas y poso uno de mis brazos sobre la cara. No he podido dormir en toda la noche y eso tiene solo una maldita explicación. Recojo el celular de encima de mi pecho y lo desbloqueo comprobando que aún no tengo ni un solo mensaje de ella. —¿La cena habrá estado bien? —ruedo mis ojos molesto y tiro el teléfono en la cama para levantarme y hacer mis cosas de rutina antes de que se aparezca Gabriela e intente hacer algo que no quiero. En la ducha dejo que el agua enfríe mi cuerpo y cierro los ojos intentando no pensar en lo que sucedió hace un día y en como mis sentimientos por ella se volvieron más fuertes con ese simple acto. ¿Será que me habrá hecho algún hechizo o algo así para q

