- No lo sé, Emiliano- dije poniéndome de pie- lo tengo que pensar- me crucé de brazos nuevamente. - Nena,¿ me harás rogarte?- rodeó mi cintura con sus brazos y me habló en el oído- vamos al departamento y verás como te pido que me perdones y tú rogarás que me detenga. 'Si, vamos y muéstrame cuán arrepentido estás, hazme rogar a mi también, mientras estas dentro de mi' 'Espera, pero que estoy diciendo, este pepe grillo no ayuda en nada' - Cariño, en un futuro no vamos a arreglar las cosas con sexo- dije tratando de sonar seria, ya que mis nervios me querian traicionar - Oh! pero claro que así lo arreglaremos- se separó de mí un poco solo para girarme, ahora lo tenia de frente y con su respiración tan cerca de mi cara mi piel se erizo y no pude evitar suspirar. - Esta noche la que ro