KAIRA Entré en el pub y miré a mi alrededor. —Por aquí —llamó Gina, y sonreí y saludé antes de acercarme a la mesa. Gina y Cat, dos de las mujeres que trabajaban conmigo en la oficina, me habían invitado a salir a tomar algo. Al principio no quería unirme, no las conocía bien, pero estaban haciendo un esfuerzo y, desde que Siena se fue, había estado en un limbo en cuanto a amistades. Quizás podría encontrar a alguien nuevo con quien salir. No sería lo mismo que con Siena, pero valía la pena intentarlo, ¿no? —Trabajaste hasta tarde esta noche —dijo Gina cuando me senté. Se quitó la goma del cabello de la muñeca y se recogió el pelo rizado y oscuro en un moño. —Sí, tuve que ocuparme de un par de cosas. —Eres muy dedicada —dijo —. No creo que alguna vez me comprometa tanto con mi traba

