CAPITULO 12
Me dirijo al despacho de Ray, noté que recién llegó; lo vi caminar un poco agitado por el pasillo de las oficinas.
Paso justo después que el y noto su olor, pareciera que viene recién bañado; es un poema su aroma. Cierro los ojos e intento respirar lo más profundo la estela que el dejó, como me gustaría estar más cerca para tener su esencia de forma ilimitada.
Voy soñando mientras camino, de pronto noto que acabo de llegar frente a la puerta de su despacho, bajo mi brazo llevo la carpeta con los resultados dispuesta a presentárselos.
Doy 3 suaves golpes a la puerta.
-Entre- escucho decir
Giro la manilla y ahí lo veo, impecablemente vestido con su traje caro; me llama la atención que no es el mismo que traía cuando me dio el “aventón”.
Pero no le doy mucha importancia, e
