Era muy frustrante. Las horas pasaban y sólo teníamos fotografías parciales del rostro del tipo sin detalle alguno, la placa del vehículo que ahora mismo estaba siendo buscado y nada más. Ya iban 10 horas y aún nada. Malor estaba despeinado, imagino que había revuelto su cabello unas mil veces debido a la frustración. Suponíamos, hasta el momento, que el hombre con el que se comunicaba June fingiendo ser un chico adolescente debía de tener un espacio amplio y conocimiento previo, es decir: era un experto. No nos enfrentabamos a un principiante. Su IP estaba encriptada y aunque Marco y yo pudimos triangular la señal hasta una zona comercial de la ciudad, no sirvió de nada, barrieron la zona sin encontrarla. -No me salgan con eso, Rollon, 10 malditas horas en las que ha t

