Margaret Hamilton es presentada en sociedad más tarde de lo que suele ser habitual, y todo a causa de su padre, quien perdió a su mujer y teme también perder a su hija. Ella está segura de que no lo va a abandonar jamás, hasta que William Lowell aparece en sus vidas. Desde el momento en que Margaret acepte una invitación por parte del conde de Norfolk, su vida va a estar más que controlada por su padre y un posible pretendiente, el marqués de Ruttland, todo debido a la dudosa reputación del conde. William guarda un secreto; no puede enamorarse. Su mayor error será besar a la recatada e inocente Margaret, a la que no podrá olvidar de ninguna de las formas y cada segundo le va a resultar más difícil alejarse de ella. ¿Será más fuerte la atracción hacia ella que el oscuro pasado que no para de perseguirlo?

Chastity es una joven provinciana que vive por y para sus tres hermanos pequeños, que dependen de ella desde que el cabeza de familia falleciera meses atrás. Deciden abandonar el campo e instalarse en una pequeña casa en la ciudad, dónde comienzan una nueva vida que, en un principio, les depara buenas expectativas. Pero nada más allá de la realidad, ya que a raíz de un incidente la joven va a tener que enfrentarse a sus propios principios e internarse en el ambiente más lúgubre de Londres. Jordan siempre ha sido un tipo discreto, sabe como mantener su vida en la más estricta intimidad y entre la sociedad no paran de circular toda clase de rumores, lo que alimenta el halo de misterio que lo rodea en todo acto público al que asiste. Para terminar con todo ello, ha decidido casarse, y su esposa tiene que cumplir un requisito muy importante para él: que no se entrometa en su vida. La vida de Chastity y Jordan se cruzará en el momento en que ambos lo necesitan, aunque el destino no tiene previsto un camino fácil. *Portada: Shiuika.