DEVON Devon sonrió mientras seguía a Kaz a la sala de juegos. "¿Crees que estás listo para esto, chico?", preguntó con tono burlón. "Supongo que lo descubriremos", respondió Kaz sin mirar atrás. "Supongo que lo haremos." La había retado a una partida de billar. Empezaban a jugar dos o tres veces por semana después de que Ethan se acostara. Su juego estaba mejorando, pero ella había ocultado que se lo estaba tomando con calma. No lo dejaba ganar a propósito, pero sí estaba haciendo tiros más difíciles de lo necesario o golpeando la bola blanca con demasiada fuerza para que no se detuviera en un lugar ventajoso. Como se ponía en desventaja intencionada, él podía mantener las partidas reñidas, e incluso, en ocasiones, ganarle. "Esta noche vas a bajar, Kazsloski", gruñó juguetonamente mie

