Capítulo 1
En oeste del país V , en un pueblo de 2000 habitantes encontramos a Yeli Pier, una chica de 17 años, con una gran inteligencia solo se sentía estancada en por no poder mostrar sus capacidades.
Aunque sus padres querían que mantuviera una vida normal en el pueblo, el sueño de Yeli era ir a la gran ciudad, estudiar y tener su propia empresa.
Tenía sueños grandes y habían comenzado desde muy pequeña, pero cuando tenía 12 años, fue a la capital a un torneo de ajedrez y ganó el primer lugar de la competencia nacional, esto la llenó de esperanza.
A pesar de haber ganado el primer lugar y tener la posibilidad de ir al campeonato mundial, no fue posible debido a que enviaron una nota a su casa diciendo que el puntaje estaba mal y el primer lugar no era de ella.
El corazón de Yeli estaba destrozado en ese momento, pero con su actitud positiva rápidamente le levantó el ánimo y no le dió más importancia al tema.
Yeli creció y se convirtió en una chica hermosa, su piel blanca, mejillas rosadas, ojos cafés, cabello castaño y largo, le daban apariencia encantadora, en cuanto a su cuerpo, era delgada, su pecho era pequeño y su trasero tenía un tamaño regular.
Pero el trabajo en el campo, la había convertido en una chica masculina, en el pueblo le habían colocado muchos sobrenombres pero el que más destacado era, "Maléfica", sus peleas siempre eran con Chicos más grandes que ellas y gracias a las peleas, se había ganado el respeto de algunos y el miedo de otros.
A pesar del historial agresivo de Yeli también era la mejor estudiante en su escuela y con ganas de poder realizar sus sueños, envió una solicitud a la universidad central del país V.
Unos meses pasaron y Yeli finalmente recibió la respuesta por correo.
– ¡ Mamá , mamá aprobaron mi solicitud! – expresó emocionada.
Camila, la mamá de Yeli miró a su hija con ojos apagados – hija se que estás emocionada, pero tu papá y yo no tenemos dinero para pagar una universidad.
– mamá voy a aplicar a una beca, estoy segura que la voy a conseguir.
– Yeli, tu papá y yo estamos en una situación difícil aquí en el campo y necesitamos tu ayuda, ¡mira la casa se está cayendo a pedazos !.
– Mamá lo sé y créeme que haré todo lo posible por ayudarlos cuando esté en la capital, voy a trabajar duró para ayudar a mejorar las condiciones de la casa.
Además termine la escuela a los 15 no puedo seguir perdiendo el tiempo.
La madre de Yeli no creía que su hija pudiera resolver los problemas familiares, estudiando y trabajando en la capital.
La vida en la capital no era fácil, la vida era costosa y Yeli estaría sola todo el tiempo; para Camila, su hija era un tesoro que debía quedarse en casa.
El padre de Yeli entró a la casa y vio a su hija tratando de convencer a su madre de algo, pero como nadie lo tomó en cuenta, hizo un ruido para que las dos mujeres lo notarán.
Las mujeres que seguían hablando no voltearon a mirarlo, luego colocó un vaso sobre la mesa con mucha fuerza y un sonido fuerte de " plofff " se escuchó, la mujeres miraron al hombre al mismo tiempo y luego siguieron hablando como si nadie más estuviera en casa.
James estaba enojado por ser ignorado por su esposa y su hija – quiero preguntarles algo. – dijo James.
Las dos mujeres miraron al hombre al mismo tiempo, para escuchar la pregunta.
– ¿Cuando me convertí en el papel tapiz de esta casa?.
Las mujeres miraron al hombre un poco extrañadas por la pregunta pero pronto las carcajadas se escucharon en toda la casa.
James mantenía su rostro serio sin traicionar sus emociones, pero las burlas de las mujeres lo hicieron enojarse aún más.
– Si continúan burlándose de mí, tendrán que arar la tierra para el próximo cultivo.
Las dos mujeres dejaron de reír en cuanto escucharon las palabras del hombre.
Arar la tierra papá debe estar loco pensó, Yeli.
– Ya no son tan valientes ¿No? – dijo el hombre alardeando de su poder.
Las dos mujeres seguían calladas, sin presionar la paciencia del hombre.
– ¿De qué hablan? – preguntó, mientras tomaba asiento.
– Papá, es que aprobaron mi cupo en la universidad.
El rostro de James cambió drásticamente, de malo a muy malo.
– La respuesta es no – dijo James totalmente decidido.
– te lo dije – Camila saltó alegre.
– Mamá no te alegres de mi desgracia – Yeli fingió llorar y lanzó unos cuantos sollozos para hacer más dramático su sufrimiento.
– Esas lágrimas de cocodrilo no te van a funcionar – dijo James enterado de las tácticas de su hija.
– ¡Papaaa! Es una oportunidad única, voy a estudiar finanzas, voy a crear mi propia empresa y vamos a salir adelante, tienes que estar agradecido de que deje a un lado la carrera de medicina y no tendrás que preocuparte por la muerte de mis pacientes.
– Papá nada, te dije que no, la capital es un lugar de perversión y no voy a aceptar que vayas a ese lugar.
– papá yo sé cómo cuidarme, tu me has enseñado a no dejarme pisotear por nadie y no voy a dejar que nadie me humille.
– Yeli, no hay dinero para la universidad, en este momento la familia está atravesando una crisis y no podremos ayudarte.
– Lo se papá y te prometo que no les voy a pedir dinero, voy a aplicar a un beca y voy a conseguir un trabajo para ayudarlos, además he ahorrado todo el dinero que he ganado desde que tenía 12 años, ¡Porfa porfa porfa! – dijo poniendo ojitos de perrito.
– Yeli no me pongas tus ojos de perro muerto, que no te va a servir.
– Papa los ojos de perrito son lindos, además prometo que voy a regresar cada vez que tenga vacaciones y si las cosas no salen de acuerdo a mis planes, voy a regresar a casa.
Con esa promesa James se sintió mejor y aunque ya le había dado la aprobación en su corazón, no quería parecer un hombre fácil ante su hija.
– Lo voy a consultar con la almohada.
– gracias papi eres el mejor – dijo como una niña pequeña, mientras abrazaba a su papá.
James le dio unas palmadas en la mano a su hija – cálmate, que todavía no he aceptado, la almohada también me puede decir que no.
– Papá la almohada y yo somos las mejores amigas, yo sé que me va a dar su apoyo.
Camila y James negaron con la cabeza ante la astucia de su hija.
Yeli subió a su habitación y comenzó a tramitar la solicitud para la beca como si la respuesta de sus padres se hubiese dado desde hace un largo tiempo.
Las clases presenciales comenzarían en marzo, pero tenía que hacer un curso previo antes de comenzar las clases presenciales.
las calificaciones del curso le daban la posibilidad a los estudiantes de estar con profesores prestigiosos, o con profesores poco reconocidos.
Así que debía enviar la solicitud lo antes posible, solo tenía una mes para recibir la aprobación de la beca y salir del pueblo, para poder realizar el curso introductorio.
Quince días después de enviar la solicitud para la beca, la respuesta fue recibida,
" señorita Yeli Pier, la universidad central del país V, se complace en informarle que su solicitud para acceder a la beca completa ha sido aceptada, también le recordamos que la beca tendrá vigencia a partir del 2 de febrero, del año en curso, sin más que agregar nos despedimos de usted deseándole éxitos".