Capitulo 1
A lo largo de mi corta vida, escuche a muchas niñas decir que su sueño era ser una princesa. Pero imagino que es por lo que las películas y cuentos infantiles suelen mostrar.
Por supuesto que eso estaba lejos de la realidad. Porque la vida Real, apestaba.
¿Cómo lo se? porque yo era una.
Mis padres Margaret y Jacobo Jernigan, eran los actuales reyes de Gales. Y por ende yo era la princesa, única heredera al trono de Gales. Ya que mi madre después de mi, no pudo volver a concebir.
Heredar el trono no era algo que me entusiasmaba, prefería tener cualquier otra vocación. Pero como siempre me decía mi padre.
Tu destino ya esta predestinado.
Volviendo a la actualidad, me encontraba sentada a la derecha de mi padre mientras escuchaba una larga lista de pedidos. Todos los sábados, las personas podían acudir al palacio para hacerle algún pedido especifico.
- Siguiente - dijo uno de los militares sacándome de los pensamientos.
Una vez finalizado, camine hacia mi cuarto y comencé a sacarme el vestido con ayuda de Elin, una de mis ayudantes.
- ¿Se encuentra bien alteza? - la observe por el espejo y nuestras miradas se encontraron.
- Si Eli, solo estoy un poco agotada - tape mi boca mientras soltaba un bostezo.
- Bueno, tienes tiempo para descansar así estés bien en la cena de esta noche - ella sonrió, en cambio, yo fruncí el ceño.
- ¿Cena? no sabia que habría una cena esta noche - dije confusa.
- Bueno, esa fue la orden que hemos recibido hace unos minutos. Muy pronto le traerán el vestido que usaras esta noche.
Asentí pero realmente no me encontraba con las ganas suficientes de estar presente. La puerta del cuarto se abrió y Sophie entro apresurada.
- Su alteza - hizo reverencia - madre, lamento la tardanza. Es solo que mi despertador no sonó.
Sophie era hija de Elin, pero además era una de mis mejores amigas. Había recibido el permiso de venir siempre que quisiera a nuestro palacio ya que cuando yo estuve a punto de nacer, mi madre tuvo unos inconvenientes en los que Elin fue de mucha ayuda. Y se podría decir Sophie y yo prácticamente nos hemos criado juntas.
- No te preocupes - le sonreí - ¿Podrías ayudarme con esta tiara? se quedo enganchada en mi cabello - dije haciendo un esfuerzo enorme para no frustrarme.
- Claro - ella se puso frente a mi y delicadamente comenzó a sacar mi tiara. Pronto la puso en una cajita.
- Elin ¿podrías dejarme un momento a solas con Sophie?
- Si su majestad, con permiso - hizo reverencia y luego miro a Sophie - Luego hablare seriamente contigo.
- Si madre - ella hizo una mueca y luego de que Elin se fue, me miro con diversión.
- Ahora si cuéntame que hiciste anoche - ambas nos acostamos en mi cama - mírate esas ojeras que traes - reí.
- Bueno, con mis amigos fuimos a una discoteca - sonrió - y estaba Nathan - mordió sus labios.
Nathan era un amigo suyo del cual estaba profundamente enamorada.
- ¿Y que paso? - me emocione por ella - ¿Se besaron?
- No - suspiro - pero si estuvimos muy cerca.
- Oh - la mire apenada - no importa, la próxima será - la anime.
- Supongo - ella se encogió de hombros - ¿Qué hay de ti?
- Lo mismo de siempre - rodé los ojos - a veces me gustaría salir a los lugares donde vas, suenan interesantes.
- Me encantaría, siempre digo que me gustaría que conozcas a mis amigos. Es mas, ahora traje mi móvil ¿quieres verlos por fotos?
- Por supuesto - dije ansiosa.
Sophie comenzó a mostrarme varias fotos y diciendo los nombres de cada uno de ellos. Pero hubo una persona en especial que llamo totalmente mi atención.
- ¿Cómo se llama el? - señale a un muchacho de cabello n***o semi-ondulado.
- Matt - ella sonrió - le decimos Matt pero se llama Matthew Couch.
- Es... lindo - confesé.
- No me digas que Matt logro llamar la atención de la princesa de Gales - hablo con una voz rara que me hizo reír.
- No, solo pienso que es lindo - me encogí de hombros.
Pase toda la tarde con Sophie hablando de su chico, contándome algunas anécdotas graciosas que vio en la discoteca. Debía admitirlo, me encantaba escucharla.
Luego su madre pidió hablar con ella, supongo que para regañarla por venir tarde. Sophie se habia comprometido en ayudarla con todo lo que fuera necesario para esta noche.
Finalmente la cena habia terminado, en ella estuvieron presentes varios duques de muchos paises. Estaba sentada en una hamaca que se encontraba en la parte trasera del palacio mirando las estrellas.
- ¿Aburrida? - dijo Sophie llegando a mi lado.
- Demasiado - suspire - le imploraba a Dios que todo pasara rápido.
- ¿Ningún duque apuesto? - bromeo y la mire como si hubiera perdido la cabeza.
- No, todos adultos - arrugue mi nariz. Ella hizo una mueca de desagrado.
- Ojala llegara uno como esos de las películas. El príncipe apuesto del cual te enamoras.
- Si tan solo fuera así, todo seria menos tedioso - rodé los ojos - ¿No saldrás esta noche?
- No, mi madre esta totalmente enfadada conmigo. Pero quizás mañana sí nos reunamos con los chicos ¿por que?
Me quede pensando por unos minutos y sonreí.
- Oh no, conozco esa sonrisa ¿Qué travesuras tienes en mente? - ella puso una cara de susto.
- ¿Y si mañana me escapo y voy contigo?