En la cima
Barbara Altaír Spencer
Estoy terminando una sección de fotos de mi nuevo perfume " Miracle" cuando veo a Lisa haciéndome señas.
-¿Qué pasa? nunca te había visto así- pregunto en medio de risas
-Querida, tengo algo que decirte, pero vamos al camerino- me respondió ella con molestia
-Ok, lo que digas, dame un momento y voy enseguida- le digo preocupada
-Te espero- dice marchándose hacia el camerino sin darme tiempo de decir algo más
Miro las fotos que me tomaron, pues tengo que reconocer que soy perfeccionista en mi trabajo y me gusta supervisarlo todo, yo misma, observando detenidamente mis fotos, mis ojos se ven vacíos como sin vida, son azules claro casi llegando a blanco, pero se ven como un azul sucio.
Mi abuela decía que soy igualita a la muñeca Barbie, solo que más bonita, tengo que cabello rubio muy claro y piel es blanca casi de porcelana, mi nariz es pequeña y respingada, mis labios son gruesos, a pesar de que no se me nota estoy sumamente agotada no he parado de trabajar. Soy actriz, modelo, bailarina y cantante principalmente, casi siempre estoy aquí en Los Ángeles o dando un show en Las Vegas, Nevada; amo mi trabajo tanto que me he ido diversificando, en ser diseñadora, tener mi marca de perfumes y maquillaje, también escribo mis propias canciones y últimamente como productora y directora.
Me recojo el cabello y me dirijo a mi camerino con mi mejor amiga Lisa, ella es abogada somos amigas desde que teníamos 16 años, ella es la que se encarga de que todo se haga legalmente. Salgo de mis pensamientos hasta que entro al camerino, veo a Lisa sumida en la computadora con una mirada que fulminaría al que se atraviese, es una mujer muy guapa es un poco más pequeña que yo, delgada, con unos hermosos ojos cafés y cabello n***o, ella siempre ha sido muy seria, pero esta vez está muy seria y enojada.
-¿Qué pasa Lisa?-
-Por donde empezamos, Altaír-
-No te entiendo nada-
-Hoy recibí una llamada de tu padre-
-¿Y qué con eso?- pregunte extrañada
Me entrega una hoja y cuando la leo siento que el mundo se me vino encima, es un pagaré de hace 16 años, firmado por mi madre y que en caso tal que ella no pudiera responder sería su heredera Barbara Altaír Spencer Clark quien pagaría la deuda a Michael Xenres McKenna
-Esto tiene que ser un error-
-No, no lo es tiene la firma de tu madre y la tuya, como estabas emancipada es válido, tienes esta deuda desde hace 16 años más los intereses y yo no lo sabía-
-Pero Lisa, yo no lo sabía y ¿Esto es legal? -
-¿Qué firmaste cuando te fuiste de la casa de tu padre?-
Me quede haciendo memoria de que paso ese día
-Si cuando murió mi mamá, el me hizo firmar un papel que no lo demandaría, ni le diría nada a nadie de que realmente hizo conmigo y ...
Viene a mi mente que justo después del funeral de mi madre, solo el amargo recuerdo que yo sólo era un estorbo para mi padre y su nueva familia, como me exilio a un internado de señoritas, hasta que mi abuela intervino y me salvo. Me pongo de pie aun mareada, yo había enterrado mi pasado con mi primer trabajo
-¿Qué ocultas?- pregunta Lisa enojada
-Algo aquí no me cuadra, no me acuerdo de haber firmado nada como esto-
-Altaír estas a punto de firmar, el contrato más ambicioso de tu carrera en 8 meses-
-Ya lo sé-
-Tienes que ir a enfrentar a tu padre-
-No te preocupes, lo haré-
-Lo haremos, sabes que no me agrada ese señor-
Salimos las dos con mucha prisa hacia el estacionamiento, nos subimos al carro y llamo a mi mánager -
¡Hola Altaír! - contesta Milton alegre
-Milton, tenemos que hablar con urgencia-
-Estoy en el estudio, negociando tu próximo concierto-
- ¿Puedo ir? -
-Claro, querida-
Lisa maneja por unos minutos hasta llegar al estudio de grabación, allí nos recibe el asistente de Milton
- ¡Buenos días, chicas! - dice Dallas con su característica alegría que casi parece irreal
-Milton, nos espera- le digo para que ni siquiera nos anuncie apenas nos ve se levanta con 2 vasos de té frio de limón
-Querida, sé que eres increíblemente blanca, pero ahora eres casi transparente- dice él espantando al ver mi estado actual
Saco la hoja de papel y se la muestro, él se sienta y comienza a leer, en ese momento lo quedaba de su negra cabellera se fue al trasto
Milton es lo más parecido que tenido a un padre en la vida, desde que mi abuela me saco del internado y éramos vecinos, fue mi primer maestro, soy la hija que nunca tuvo además de Lisa.
Es hombre muy guapo a pesar de su edad, tiene el cabello con unas cuantas canas, ojos verdes divinos, tiene mucha personalidad y siempre anda impecable, pero lo que más me gusta de él es su sinceridad él es tan transparente.
- ¿Altaír esto fue cuando murió tu madre? -
-Sí-
- ¿No me digas que Gerald Spencer haciendo de las suyas? que por cierto no me agrada-
-No me lo recuerdes-
- ¿Cómo descubriste esto? -
-Mi papá contacto a Lisa-
Él puso los ojos en blanco, pues en todos estos años mi padre no ha mostrado ningún interés en mi existencia, es más casi nadie sabe que soy su hija
-Tienes que ir a Nueva York a enfrentar a tu padre- me dice Milton mirando fijamente la hoja de papel
- Pero tengo que grabar dos videos, sin contar otro montón de compromisos- replico yo, no me hacia ninguna gracia ir para allá
-Se hará lo necesario para que grabes en tu estado natal, me imagino que puedes arreglar todo en 2 semanas-
-Es cierto Altaír, arreglare todo para tu llegada, mientras tanto averiguare todo sobre Michael McKenna- dice Lisa marchándose del estudio
-Ahora sí, Milton necesito que me digas ¿Cuánto han generado mis filiales? -
-Empezamos por tu línea de maquillaje “Mercurial Beauty” esta generando por año 620 millones junto con la línea de cuidado de la piel “Mercurial Skin” genera anualmente 220 millones, línea de ropa “Mercury” 320 millones, con tu gira “Reaction Tour” te convertiste en la dueña de la gira más rentable de la última década con 40 conciertos recaudaste 420 millones; también estas en el top 10 de las artistas que más gana por concierto con 15 millones y la que gana al año por su imagen con 138 millones, además de que eres la actriz mejor pagada de Hollywood con 100 millones. Eres una mina de oro, niña-
-Eso es bueno saberlo, al parecer lo he hecho todo bien- digo complacida
-Todo esto porque eres constante ya has estado un mundial, olimpiada, Copa Davis, solo te falta el Superbowl-
- Que pronto lo haremos, tenlo por seguro-
- ¿Y el concierto de Fornite? – pregunto
- El Próximo mes 25 de enero a las 8 de la noche-
- Ok entiendo, me imagino que tienes algo planeado-
- Sí, pero no me desvíes el tema. No confió en tu padre-
- ¿Y quién lo haría? –
- Mira yo te apoyado aún con Lisa de ocultarle al mundo que eres una Spencer Vandebilt por parte de padre y Clark Rockefeller por parte de tu madre, pero ya es hora de asumir tu lugar y eso que tu madre tenia deudas los dudo mucho-
Sabía que mis abuelos no habrían permitido eso, pues eran muy buenos administradores de lo poco que mi abuela salvo fue que pude iniciar mi carrera
-Lo sé, solo dame tiempo. Recuerda que yo decidí hacer mi vida, sin la sombra de mis apellidos además sabemos que en menos de un día nuestra querida Lisa Monroe sabrá hasta que papel higiénico usa ese Michael-
-Claro, como si esos apellidos te dieran de comer- dice él en medio de risas
-Bueno, nos vemos después Milton, quiero ir a casa a descansar un poco- le digo esperando que me entendiera
Tome unos de los carros que siempre tenía en el estudio por si acaso, maneje hasta mi casa en Calabasas, era acogedora y reservada, nada parecido a la Mansión Spencer, era una mansión sencilla de 7 habitaciones y 5 baños, que tenia una terraza y piscina, lo único extravagante era un helipuerto, solo porque a veces tenía que estar en muchos lugares a la vez.
Llegue a mi casa tan grande y vacía en realidad paso muy poco tiempo aquí, aun pensando que llevaba años sin ver a mi padre o de tan siquiera acordarme de él, ni siquiera usaba mi nombre real para el mundo Barbara Spencer Clark se la trago la tierra o se volvió monja, ni me acuerdo de que mentira dijo mi padre.
Me fui a mi estudio a dibujar varios bocetos de joyas porque me asocié con las joyerías Ferretti para la nueva colección Galaxy, eran juegos de anillos, collares y pulseras, estaba inspirada; hasta que oí una llamada en mi teléfono, era Lisa.
- ¿Alo? –
- ¡Hola Altaír!, averigüe todo sobre el ingeniero Michael Xenres McKenna-
- Cuéntamelo todo –
- Es el rey midas de la construcción y de los negocios, se ha adueñado de todo Manhattan con 42 años y no va a ser nada fácil dar con él, pues no concede entrevistas –
- Pero como te conozco tienes un plan ¿Cierto? –
- Claro, querida. Hable con su abogado y juro que yo estaba bromeando, pero le saque que esta noche hay una gala de beneficencia en la Universidad de Nueva York, que él va a asistir como alumno exitoso-
- Excelente y yo ¿Qué tengo que ver en eso? –
- Que llamé a la universidad y ofrecí como abogada de Altaír Mercury aportar también una donación a la misma y un concierto junto con la Sinfónica de Nueva York para incentivar a más donaciones –
- ¿Y qué te dijeron? – pregunte aterrada de lo que podía hacer esta mujer si se le descuidaba un momento
- Claro que yes, yes, yes-
- Genial y ¿A qué hora inicia? –
- Mmm, tienes que montarte en un avión ya, para llegar a tiempo y tienes que cantar la melodía del “El Triste” fue la que eligieron-
- Joder, dime que tienes todo arreglado-
-Eficiencia y Eficacia, cariño solo falta que empaques lo básico que allá te esta esperando tu atuendo y tu habitación del hotel, por cierto te quedaras en el Waldorf Astoria-
- Me está esperando un avión, cierto- digo con resignación cuando escucho las aspas de un helicóptero corro a mi armario a tomar lo necesario, lo demás lo compraría allá, no me gusta cargar con muchas cosas
-Feliz viaje, amiga- me dijo Lisa por el teléfono y yo colgué
Al final solo tenia una pequeña maleta de mano y mi bolso, subí al helicóptero sin decir media palabra, el piloto me miraba de reojo, hasta que le dije
-Perdone, ¿Le ocurre algo? –
- No disculpe señorita, es que mis compañeros dicen que usted es muy sociable y ha estado muy callada en el trayecto –
-Ah sí, discúlpeme, muchas gracias por estar disponible –
- Señorita, ¿Le puedo pedir un favor? –
- Sí me dice ¿Cuál es? Con muchísimo gusto –
- Es que mi hija la admira y hoy me tocaba verla, me gustaría darle una sorpresa ¿Me puedo tomar una foto con usted? –
Sonrió y le digo – Sí claro y haremos algo mucho mejor –
Cuando aterrizamos él saco su teléfono y nos tomamos la foto juntos diciéndome -Gracias, señorita-
- Llama a tu hija por videollamada por favor y de coincidencia tienes un papel-
Él busco en sus pertenecías y me paso una bolsa de regalo que adentro tenia una paleta de maquillaje de mi marca
- ¿Esto le sirve? – pregunto él con pena aun buscando un papel
- Tranquilo, esto es excelente- respondí y busque en mi bolso por suerte siempre cargaba pilotos de colores y busque el color dorado - ¿Cómo se llama su hija? –
-Mi pequeña Victoria- responde todo risueño mientras marca el teléfono de su hija
Escribo en el envase de la sombra
“Para mi amiga Victoria, con amor Altair Mercury XOXO”
Y se lo entrego, siempre he sido muy agradecida con mis fans
“-Hola papá, vienes tarde como siempre-
-Mi amor, alguien quiere hablar contigo-
Él me pasa el teléfono y miro que es una adolescente como de 16 años muy parecida a él, ella grita de la emoción al verme
- ¡Hola Victoria! Esta vez tu papa llega tarde por mi culpa en verdad lo siento, pero para compensarte- le enseño la paleta firmada por mí
- ¡Oh my God! ¡Que emoción es Altaír Mercury! -
- ¿Podrías perdonar esta vez a tu padre? -
- ¡Claro que sí, gracias, gracias! -
Le pasé nuevamente el teléfono a su padre y me fui hacia el avión charter con una sonrisa en el rostro, en vuelo comercial el viaje de Los Ángeles- Nueva York es de 5 horas y media, pero en privado se reduce en 4, las suficiente para yo poder dormir aunque sea un poco.
-Señorita, señorita, ya hemos llegado a la ciudad de Nueva York- me dice la azafata del vuelo
-Ok, muchas gracias- conteste despertándome del todo, abajo vi la ciudad que hace años dejé atrás y que no tenía planeado volver
En la pista me esperaba un limosín color negra, definitivamente Lisa había pensado en todo lo que necesitaba, que me llevo al hotel y allí tenía la Suite Waldorf Towers 30 A, allí estaba una caja color blanco encima de la cama y supuse que era mi vestido del día de hoy.
Tenía una hora para arreglarme e ir a la Universidad, me di un baño y empecé a desempacar mis cosas, abrí la caja y era un vestido largo drapeado de terciopelo azul marino, con escote estilo bardot de hombros descubiertos y corte de sirena, junto con unos guantes a juego, me lo puse mirándome al espejo decidí usar mi cabello suelto y ondulado, junto con el collar de mi madre “La Peregrina” (es una perla de tamaño y forma inusual, considerada una de las gemas más valiosas y legendarias de la historia de Europa. Descubierta en aguas del archipiélago de las Perlas en Panamá en el siglo XVI) junto con un maquillaje sencillo que resaltara mis ojos celestes y un clutsh azul.
Llegue justo a tiempo a Universidad afuera había varios periodistas, que me acaparaban con abejas a la miel, casi me dejan ciega con tanto flash, pero me dejaron pasar, les dedique la mejor sonrisa ensayada y entre al recinto.
Al verme el presidente de la junta directiva de Universidad, se me acerco diciéndome
-Es un gran honor tenerla con nosotros, señorita Mercury-
-El honor es mío por haberme recibido tan precipitadamente-
-Es que no podemos dejar pasar su generosidad con nosotros-
-Cierto, permítame un momento- dije buscando en mi clutsh la chequera, porque entendí enseguida la insinuación
-No se preocupe, recuerde que tiene que ser a nombre de la universidad-
-Está bien, aquí esta, gracias por su paciencia- le dije entregándole un cheque de 70 millones, que pronto veré que hacer para compensarlo
-Oh señorita, muchas gracias, me avisa cuando esta lista para deleitarnos con su hermosa voz-
-De nada, me gustaría que fuera inmediatamente y también quisiera pedirle una pequeña concesión de grabar un video musical en el campus, si no es mucha molestia-
-Deseos concedidos, venga la guio detrás del escenario-
Caminamos detrás del escenario y me dejo en medio del mismo junto con la sinfónica, -Espere aquí mientras la presento-
-Ok, esta bien-
-¡Buenas noches, damas y caballeros tengo el gran honor de presentar a Altaír Mercury junto la Orquesta Filarmónica de Nueva York!
Entro al escenario con la introducción que me hacen y empiezo a cantar...
"Qué triste fue decirnos adiós
Cuando nos adorábamos más
Hasta la golondrina emigró
Presagiando el final
Qué triste luce todo sin ti
Lo mares de las playas se van
Se tiñen los colores de gris
Hoy todo es soledad
No sé si vuelva a verte después
No sé qué de mi vida será (Qué de mi vida será)
Sin el lucero azul de tu ser
Que no me alumbra ya
Hoy quiero saborear mi dolor
No pido compasión ni piedad
La historia de este amor se escribió
Para la eternidad
Qué triste todos dicen que soy
Que siempre estoy hablando de ti
No saben, no saben que pensando en tu amor, en tu amor
He podido ayudarme a vivir
He podido ayudarme a vivir
Ooh ooh ooh"
Haciendo gala de mi gran capacidad vocal en este clásico de la balada en español, en medio de la presentación escucho aplausos y me lanzan flores, que sepa Dios de donde las sacaron y con varios rostros atónitos, estoy haciendo una de mis mejores presentaciones en vivo, sin siquiera bailar, al final de presentación recibo una ovación de pie hasta de la orquesta, el único que no lo hace es mi padre; Simplemente hago una reverencia a mi publico y me retiro, esperando que también motivar a otros a donar.
Cuando bajo del escenario me esperaba el rector de la Universidad junto con un hombre de blanco de cabellos negros que usaba lentes y me dijo -Magnifico, señorita Mercury, ahora permítame presentarle a nuestro más grande benefactor el Ingeniero Michael McKenna-
-Un placer conocerlo, ingeniero- dije, observando que tenia los ojos color café, pero con brillo digno de un diamante
-El gusto es mio, señorita Mercury- me responde con una sonrisa