- ¿Ahora que deseas Lucia? –le pregunto apenas pongo el auricular en mi oído-. - Hola Mauricio, hijo, buenas tardes –hace una pausa- ¿Quería saber por qué no fuiste a la cena el sábado? - ¿Para eso me quitas tiempo? –le pregunto fastidiado-. - Sabías que la cena era en tu honor, porque quiero que reconciliemos nuestras diferencias pero veo que será un tanto difícil lograr hacerte recapacitar –me responde sin reparo alguno del contenido de sus palabras cuando ella misma fue la que me orilló a ser quien soy hoy en día-. - De verdad que eres digna de admiración –le digo sonriéndome en voz alta- Te queda perfecto la faceta para ser actriz ¿a cuántos no tendrás engañado con esta clase de actuaciones? Sabes que pierdes el tiempo conmigo y ni siquiera por saberl

