Parte5

1408 Palabras
La mañana siguiente Carla me presta su celular para llamar al número que está en la tarjeta - Buenos días, señor Christopher. Soy Nicolás, el chico de ayer, no sé si me recuerde, quería decirle que tengo lo que me pidió. - Hola Nicolás, claro que recuerdo. ¿Podrías venir a la empresa en una hora? - Claro que sí señor, pero no sé cómo llegar allí. - No te preocupes, cualquier taxista debe saber dónde queda. El hombre cuelga sin decir más. - ¿Que te dijo? - Carla estaba observándome con ojos de lince. - Que vaya a su empresa en una hora. - ¿Una hora? Entonces debemos darnos prisa – Carla busca dentro de la gaveta de su ropa interior y saca una venda elástica. - ¿Para qué es eso? - Para tus bubis, con esto podemos disimular tu pecho muchacho. Enrollamos la venda alrededor de mi pecho para aplanarlo un poco y luego seguimos con las prendas para que ayudarán a Nicolás el día de hoy;  me visto con unos jeans sueltos, una sudadera negra, tenis y el gorro de lana. Es increíble el efecto de la venda en mi pecho, no se nota nada. - ¿Qué tal luzco? - Más que bien, eres un lindo, delgado y tierno muchacho. Aunque muy delicado para mí gusto. - ¿Te parece que me veo delicada? - Corrección, delicado. Estas bien, logramos lo que queríamos, luces como un hombre. Ahora date prisa.  - Si, ya es hora de irme. - Nicolle, espera. Quiero darte algo - Mi amiga se dirige a su cuarto y regresa con algo en su mano - Toma esto, creo que puede ser muy necesario, está un poco viejo y feo pero te será útil. No dudes en llamarme si necesitas mi ayuda Era un teléfono celular algo desgastado. - Gracias, no sé cómo pagarte lo que has hecho por mi. - No tienes que agradecer. Anda, se te hace tarde; te deseo mucha suerte y que Dios nos perdone. - Amén. Salgo del edifico y tomé el primer taxi que vi. - Buenos días, ¿podría llevarme a la empresa Golden Wine? - Disculpe, ¿dijo Godsend? - ¿Qué? Ah sí. El hombre me observa por el espejo retrovisor y me sonríe, luego de 15 min el taxi se detiene, miro por la ventana y no veo ningún edificio elegante ni nada de lo que tenía en mi cabeza, le pago al conductor y salgo del auto. - Muchas gracias. - Te cuidado con las calles de Godsend, son muy transitadas El auto se enciende y se pone en marcha, esperen ¿dijo Godsend? - Señor espere, es ¡GOLDEN! El taxi va tan lejos que no me escucha, ¡carajo! que se supone que haga, saco mi pequeño móvil y le marco a Carla un par de veces, pero no responde. Busco en mis bolsillos la tarjeta que Christopher me entregó y tampoco la encuentro. ¡Mierda y más mierda! Que hago, piensa Nicolle, Piensa. Unas señoras salen de una tienda y me acerco a ellas rápidamente. - Buenos días, ¿usted puede ayudarme a encontrar un lugar que se llama Golden Wine? - ¿La empresa Golden Wine? Oh si, por supuesto. Espero que me den más información pero sólo están calladas viéndome - ¿Saben dónde queda? - Oh si claro, ¿ves esa calle? - Me giro para mirar la dirección a la que apunta su dedo - Si vas por ahí puedes llegar a Golden Wine, sólo debes caminar unas 6 o quizás 10 cuadras, te encontrarás con un edificio enorme. ¡Qué! ¿diez cuadras? - Muchas gracias, ¿le puedo preguntar una última cosa? - Claro, no hay problema - ¿Qué hora es? - Faltan 5 minutos para las 10:00am ¡Carajos, es muy tarde! - Gracias Empiezo a correr más rápido que Forest, el hombre de la película; siento que estoy hiperventilando pero no importa, corro tan fuerte que siento como el viento golpea mi cara, no sé cuánto llevo corriendo pero sé que ya estoy sudando como un puerco. A pocos metros logro ver el gran edificio del que me hablaban las señoras y vaya que si es lujoso, paro en frente de dos grandes puertas de cristal y con mi mano en el pecho trato de controlar mi respiración agitada. Al entrar veo a Christopher caminar en dirección a la salida, lleva un elegante traje n***o y un maletín, se ve tan fantástico que parece que camina en cámara lenta. - ¿Nicolás? - Si, ¿dígame? Oh, perdón buenos días señor Christopher, disculpe por llegar a esta hora corrí casi todo el camino para llegar aquí. - No te preocupes. Ven, acompáñame. El hombre sale y otros chicos siguen sus pasos - ¿A dónde vamos? - Uno de los muchachos toma la palabra - Vamos al club, nuestro jefe nos mostrará el lugar. Al salir aparece una minivans de color n***o, muy lujosa para decir verdad. - Chicos, por favor entren, de ahora en adelante este será su transporte. Todos nos miramos y entramos, más de uno se emocionó con tan elegante vans. El chico de mi lado me observa y me brinda una sonrisa de oreja a oreja. - Soy Rubén Me extiende su mano y yo la aceptó - Soy Nicolás, un placer. Sellamos la presentación con un apretón de manos, le devuelvo la sonrisa a aquel muchacho Pero este se queda escaneando mi rostro ¡Rayos! ¿Será que me descubrió? - ¿Cuántos años tienes? te ves muy joven. - Tengo 23 años - Oh, eres algo pequeño Nicolás. - Ah sí, mis padres son de baja estatura, es algo hereditario - trato de sonar segura, tranquila y convincente. Minutos después el auto se detiene. Narra Christopher La reacción de los chicos al ver el club es magnífica, todos lucen felices por su lugar de trabajo. - Muchachos, sean bienvenidos a su nuevo hogar, espero que todos se sientan a gusto. - Muchas gracias jefe Entramos y todos detallan los espacios a su alrededor. - Quise traerlos aquí para que se familiaricen un poco con el lugar, para que se conozcan entre ustedes. También para hablar un poco de las funciones de cada uno en el club. Alguien abre la puerta y entra, es Sebastián, mi mejor amigo. - Buenos días, Christopher disculpa tuve un par de problemas por eso no pude llegar antes. Le brindó una sonrisa y este se acerca para saludarme con un abrazo y unas palmadas en la espalda - No hay problema. Muchachos conozcan a Sebastián, el será el encargado de dirigir todos los cargos que ustedes deben cumplir. Adelante Sebastián puedes presentarte. - Hola muchachos, como ya saben mi nombre es Sebastián y estaré dirigiéndolos durante todo este proceso, soy un hombre muy exigente por lo tanto espero que ustedes sepan acatar órdenes y realicen las funciones asignadas lo mejor posible. Aquí, nuestro amigo Christopher me envió sus hojas de vida y según lo visto es que les daré los roles que les corresponden. ¿Queda claro? - Si – respondemos es coro. - Okey, siendo así demos inicio; para la sección de lavado de cristales, Robert, Charlie, Thomas y Diego serán los encargados, tengo claro que ustedes tienen experiencia lavando cristalería fina. - Si señor - responden los antes nombrados - Para el servicio, pedidos y recomendación de vinos; Ricardo, Jhon, Ben y Mauricio. Ustedes serán los encargados de pedir y llevar las órdenes para nuestros clientes, algunas personas les pedirán recomendaciones acerca de qué tipo de vino deberían probar o acerca de un vino en específico, más tarde los llevaré a las bodegas para que se familiaricen con nuestros vinos. - Disculpa que te interrumpa Sebastián, anexa a ese grupo a este joven - toco el hombro de Nicolás y parece tensionarse - él chico tiene experiencia y sabe mucho de vinos. - Claro amigo, tu eres el jefe ¿Nicolás podrías darme tu hoja de vida? necesito revisar que esté todo en regla. - Si, aquí está señor. Sebastián revisa cada documento cautelosamente y observa a Nicolás, el chico parece algo nervioso o quizás ansioso. Sebastián vuelve a dirigir su mirada a Nicolás y dice... ---------- Bienvenido a esta nueva aventura No te olvides de dar corazoncito y comentar, como autor me interesa saber tu opinión. sígueme en i********: como: @susan.nicol.diaz 
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