Prólogo
Leia era una chica más del montón, llena de sueños y esperanza en el mundo, recién graduada en lo que había sido la carrera soñada de su vida.
Con mucho esfuerzo, años y constancia se había sacado el título en periodismo, teniendo el mejor promedio de toda su clase.
Era hermosa a simple vista, tanto que era inevitable no desviar la mirada hasta ella cada que pasaba; pero aunque su belleza fuese notable, Leia era reservada en todos los aspectos, no se le había conocido relación alguna u algo más atrevido que llegar tarde a la universidad.
Darren era un narcotraficante nato, había sido un hombre malo desde que tenía uso de razón, ladrón, asesino y delincuente naturalmente hablando. Su primer asalto fue a los trece años, y poco después, no hizo más que huir de la justicia.
A los dieciocho un gran mafioso vio potencial en él, enseñándole su negocio, convirtiéndolo en su mano derecha y terminando por heredar su gran afortuna al ser adoptado como un hijo legítimo.
A sus 26 años, llevaba toda una vida huyendo sin lograr ser atrapado, y ante la presión del mundo entero, Darren salió a la luz, prometiendo entregarse siempre y cuando fuese entrevistado por Leia, con la única condición de contar su versión y su realidad a todos los medios.
Un encuentro, muchos sentimientos y un par de mentiras pondría a ambos en una posición complicada, donde una decisión, un movimiento u alguna palabra puede cambiar el presente y futuro por completo para ambos.