Molly El avión despegó, y mi corazón parecía querer salir corriendo antes de que yo pudiera enfrentar todo lo que me esperaba en Seattle. ¿Qué tal si me arrepentía al llegar? ¿Y si no lograba encontrar el equilibrio entre mi pasado y el ambiente familiar que me esperaba? No era la misma, no me encontraba en ese punto donde ellos me podrían reconocerme fácilmente. Me perdí, tanto, que ahora no sabía cuáles eran mis tintes. Mi caos personal estaba a un paso de suceder. No era la Molly de mi madrina, ya no daba besos desinteresados y reía a todo momento. Mis labios permanecían en una fina línea constante y mi vida social era nula. No tenía amigos. Solo algunos conocidos que deje atrás. Nadie quería una persona adicta en su círculo. En mi casa no había alcohol, mi madre ya no tomaba sus cop

