El suave sonido de una respiración tranquila era lo único que invadía la habitación del alfa Dominic en ese momento, y el hombre lobo no podría estar más satisfecho y en paz con ello. Aquel dulce ruidito, significaba que su compañero de vida estaba descansando como debía, lo cual era algo bueno considerando la horrible tarde que tuvo.
Casi ser arrestado por un par de idiotas, perder su trabajo y ser echado del departamento en el cual se había estado quedando, fue demasiado de manejar para Timoteo, quien finalmente estalló por la presión llorando y liberando toda su frustración. En la mente de Dominic, el lamentable sonidito de llanto contenido persistía, así como los lamentos de su chico, quien no lograba comprender por qué ese tipo de cosas le ocurrían a él.
Tales dudas eran comprensibl
