En silencio, Timoteo miraba sin ver realmente a través de la ventanilla del auto. Su mente se encontraba en un caos nervioso ante el reciente sucedo con su tío Erick, donde no solamente intentó llevarlo arrestado utilizando sus influencias familiares para ello, sino que a su vez, perdió su trabajo en la cafetería. Una parte dentro de él quería sentirse molesto con su jefa, ya que ni siquiera le dio oportunidad alguna de explicarle realmente la situación, pero otra parte, entendía que no era culpa suya. La señora White conocía a su familia, ya que no era la primera vez que alguno de ellos había aparecido en la cafetería haciendo una de las suyas, y por más que entendiera que no era su culpa, a su vez, no podía mantenerlo más cuando los problemas le estaban persiguiendo. Emitiendo un suave

