Errores Fatales

Capitulo 9

He disfrutado ver la cara de enojo de Damian, se la lleva de cabrón entonces que resuelva su chingadera el mismo.

Mientras tanto busco que ponerme, es el cumpleaños del amigo de Diego y recibí la invitación y pues claro que voy a ir.

Me visto con un vestido rojo un maquillaje natural, pero siempre los labios rojos amo ese color, me pongo unos tacones y mi cabello lo dejo suelto.

Llego al lugar, aquí es donde esta de ambiente, ni acostumbro mucho estos lugares, o mas bien no tengo tiempo para divertirme, ahora si llego haré con todo, esta noche planeo pasarla de lo mejor.

A lo que vengo, me acerco a la barra a pedir un trago

—Hola guapo, me sirves un coctel –Le digo al Bartender, el chico cabello rubio con el brazo cubierto de tatuajes me da una linda sonrisa y me prepara mi bebida.

—Hola Emma, que bella te ves.

—Hola Simón, no creí que vendrías

—La fiesta es de Lucas y él me invito –Observa mi bebida —Te vas a emborrachar muy pronto

—Yo me llevo muy bien con la bebida, asi que no te preocupes por mi

—Quieres bailar

—Espero que seas bueno bailando

—Del uno al diez me considero un siete –No es mucho pero me arriesgo y tomo su mano para bailar, suena a todo volumen "Give It Up To Me", muevo mis caderas sensual, siento una mirada intensa, busco de donde proviene pero no logro ver a la persona, o pueden ser solo imaginaciones mías.

Al terminar la canción vuelvo a mi lugar, Simón se va a responder una llamada

—Emma que bueno que si veniste

—Hola Lucas, claro que si gracias por la invitación –Saco un sobre donde esta mi regalo —Ten esto es para ti

—Gracias Emma

Pido otro trago al bartender, mientras le doy una mirada coqueta, esta guapo el chico

—Me invitas un trago –Esa voz tan varonil y ese olor que invade mis fosas nasales me hacen suspirar

—Pide un trago tu, aquí eres invitado como yo

—Yo quiero del tuyo

—No nene de este no se va a poder porque es mio –Le doy otro trago mas a mi bebida

—Si me lo haces probar de boca a boca es mejor –Trago grueso, un calor me invade, debe ser por la vergüenza de lo que me dice.

—Ven a bailar conmigo

—No... quiero –Digo pero ya me lleva al centro de la pista, suena la cancion de "Bishop Briggs", coloca las manos en mi cintura y su toque me hace estremecerme, muevo mis caderas muy sensual, cada movimiento que hago y con la letra de la canción lo que hace es calentarme más, por que quiero que me recorra como un río, sigo meneando mi trasero sensual doy la vuelta y mierdas siento su dureza en mi trasero, esto se salio de control.

Termina la canción y voy al baño, agradezco que no hay personas y aprovecho para refrescarme el cuello, me veo las mejillas rojas, que fue eso que acaba de pasar bailando.

Se abren las puertas entrando Diego

—Que haces aquí? esto es un baño de chicas –No responde y se acerca a mi besándome con desespero, sus manos aprietan mi trasero haciéndome gemir, me sienta en el lavamanos , va acariciando mis piernas hasta llegar a la tira de mi tanga, no voy a coger aquí, aunque es lo que deseo.

—Para –digo con la respiración entrecortada —esto no esta bien

—Quiero hacerte mía –Vuelve a besarme, si es que yo quiero tan bien estar con él.

—Dije que aquí no –Se muerde el labio inferior

—Entonces vamos a otro lugar –Es una idea genial además solo Será un polvo y allí queda, que malo puede pasar

—Voy por mi bolsa nos vemos en el estacionamiento –Me besa dándome una suave mordida

—Te espero afuera –Sale del baño, me arreglo un poco en cabello y voy a la barra donde deje mi bolsa, no me despido de nadie solo salgo, espero no arrepentirme de esto luego.

Me subo a su auto, maneja rápido no quiero preguntar a donde va solo espero y no sea a un motel de muerte.

Llegamos a un complejo de apartamentos, le da las llaves al encargado, subimos al ascensor y marca el numero de piso.

Entramos a su apartamento, muy acogedor con colores grises y blancos, me ofrece una bebida

—¿Me quieres emborrachar? –Niega con la cabeza

—Te quiero lo mas sobria posible

—¿Es tuyo? —Pregunto señalando el lugar

—Si –dice restándole importancia.

Tomo mi bebida, y camino por el lugar hasta unas ventanas, muevo las cortinas para ver la ciudad, unas manos me rodean, unos labios besan mi cuello

—Me encanta tu aroma –Este chico me hace perder la cordura, me volteo para quedar frente a frente

—En unos minutos no te va a gustar solo eso –Digo con picardía.

Me vuelve a besar esta vez me levanta del suelo, camina conmigo hasta la habitación, donde seguimos besándonos con deseo, con pasión, si que sabe cómo besarme para volverme una gelatina en sus brazos

—Maldita sea quiero cogerte –Dice

—Que esperas –Baja mi vestido y mis senos se quedan a la vista por qué no use sujetador

—Tal como me las imaginé

—Eres un pervertido –Sonrie, se mete una a la boca juega el pezón erecto con la punta de su lengua, en mis bragas hay un charco estoy empapada, se quita la camisa y deja ver ese abdomen bien marcado, estoy babeando el muy cabron esta guapo esta bien dotado. Quita mis bragas dejándome expuesta, juega con mi botón hinchado llevándome al paraíso se mueve de una forma que me hace enloquecer

—Ahmm –Saca los dedos y los lleva a la boca descaradamente

—Deliciosa –Maldicion me encanta, si que sabe cómo hacerme enloquecer

—Quiero más

—Te daré mucho más, tanto que mañana no podrás caminar –Eso suena a una noche muy movida, solo espero que si lo cumpla porque soy difícil de complacer

—Deja de hablar mejor y muéstrame lo que tienes para mí – Sonríe y se baja el boxer dejando ver su v***a gruesa y rosada con la punta brillosa por el liquido que sale, se pone un preservativo ante todo la seguridad

—Lista princesa

—Yo nací lis..ta –No puedo hablar, voy sintiendo lo grueso y caliente que va abriendo pasó en el laberinto reducido, me siento completa

—Princesa puedes con más

—Me vas a romper el útero

—Te voy a follar como nadie te lo ha hecho –Soy valiente siempre puedo con todo y voy a poder con la v***a de él.

Con mis tacones en su trasero lo empujó para que siga entrando, llega a lo mas profundo, deja que me acomode a su gran tamaño, siento dolor pero a la vez sensacion de placer, empieza el Vaivén en sus caderas

—Estas rica princesa –No puedo hablar, gemidos son los que salen de mi boca, estoy sintiendo demasiado bien, alza una pierna a la altura de su hombro para profundizar mas las embestidas, estoy llegando al límite de éxtasis, sigue los movimientos más rápidos que mi cuerpo tiembla por los espasmos del orgasmo avasallador dónde me hizo correrme a chorros sacar todo.

—Aun no he terminado princesa –Hace girar mi cuerpo dejándome en cuatro, se mueve rápido, entierro el rostro en la cama intentando ahogar los gritos escandalosos que salen de mi boca, embiste con fuerza y sus dedos juegan con el clítoris hinchado que pide atención, no puedo contenerme y me vuelvo a correr a chorros, está vez él lo hace conmigo, dejando todo su semen En el latex, luego lo quita y lo tira en la basura, mi cuerpo queda sin fuerzas. "Esto fue mejor de lo que pensaba".