22

1088 Palabras

El malhumor de Grayson no mejoró con el paso del tiempo, despidió a Lizbeth de forma mezquina y se negó rotundamente a darle una segunda oportunidad, por eso me sentí bastante culpable. Yo era la que había tenido la pésima idea y ella pagaba las consecuencias. Por suerte pude hablar con mi papá y le consiguieron un puesto de trabajo en otra empresa sino jamás me lo habría perdonado. Ahora no le veía tanto sentido a mis acciones, si: había enfadado a mi esposo pero ¿y qué más? El desastre se limpió, las cosas rotas se restauraron y la casa se ordenó. Aunque él parecía seguir molesto por lo sucedido no hacía nada al respecto, dejo que los otros resolvieran el problema y continuó trabajando como un desquiciado... Acrecentando su fortuna mientras yo me secaba como una planta marchita. La m

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR