—Dime que no te iras, Gayla. —No me iré. Lamento lo que te he dicho, pero es que me siento insegura con todo esto pero sobre todo con esa mujer metida en la casa. —¿Sabes? Es un alivio el escucharte decir que te quedaras —Sonríe pero ella no puede verlo—Prometo que las cosas irán mejor. Se separan lo suficiente como para verse a los ojos justamente en ese momento de extrema conexión algunas gotas de agua cayeron sobre los rostros de la pareja… pero aquello no les importo en lo más mínimo. Sus labios se unieron volviéndose uno solo, mientras más profundo hacían el beso las gotas de agua se volvían más grandes las cuales mojaban sus cuerpos rápidamente. Dalton y Gayla se abrazaron vigorosamente en medio de ambos terrenos. Sin darle valor al aguacero que se desataba sobre ellos. Completa

