Destino un viaje al infierno

Capitulo 4

—¡Ay! Ele, mira allá están los chicos—

Dice mi entusiasmada amiga, estamos en clase de educación física con el profesor Thomas, no me gusta esta clase, sudar como un cerdo no es lo mío; mientras tanto Lucy trata de llamar la atención de su querido Jack

—Mira nena ya volteo y creo que Ian también te está mirando—

—Ya te dije que no me interesa—

—Ay no seas así, anímate—

—Señoritas dejen de chismorrear y den dos vueltas al gimnasio—

Interrumpe el profesor, Lucy rodó los ojos, pero obedecimos.

Ahí en una de las gradas de arriba estaba sentado Richard, se veía bastante sexy con unos vaqueros algo deslavados y ajustados, una camiseta verde militar y chaqueta negra todo un chico malo, creo que esa ropa lo hace ver atractivamente peligroso, ¿será que me haré adicta al peligro?, de pronto el me mira y sonríe haciéndome una seña de saludo, yo le correspondo.

Al terminar las dos vueltas el profesor nos cambia la rutina

—Bueno muchachos necesito ver su resistencia, así que hoy toca subir la cuerda—

¡Demonios le temo a las alturas! Esto no me puede estar pasando ¿que podría ser peor?

—Empezaremos a asar así que la primera será usted señorita Williams—

Vaya esto sí que es peor, miro la dichosa cuerda sujeta al techo, no sé cuantos metros son, pero es altísimo

—Vamos nena tú puedes—

Me grita para animarme Lucy mientras que yo tiemblo como gelatina en ropa deportiva, empiezo mi desafío y subo la cuerda lentamente

—Vamos Williams no tenemos todo el día— 

Me llama la atención el profesor, frunzo el ceño, pero trata de avanzar más rápido, de pronto todo se vuelve borroso y empiezo a escuchar que me llaman, esa voz hueca, ya la oí antes es la de mi pesadilla

— ¿Qué sucede Elena? ¿Tienes miedo? —

Volteo hacia arriba y en el techo veo la imagen demoniaca, me asusto mientras tanto el profesor me sigue llamando la atención

—Apresúrate Williams anda solo es un poco de altura—

¿Acaso soy la única que lo ve?, ese ser se está riendo de forma espantosa, no puedo seguir, un escalofrío me recorre por completo y me paralizo en la cuerda mientras susurro oraciones

— ¿Acaso crees que con tus rezos me detendrás? —  

Dice el demonio yo cierro los ojos y los aprieto escucho los gritos de mis compañeros entre ellos los de Lucy

—Vamos Elena tú puedes, solo un poco más— 

No puedo seguir, mi corazón se acelera, estoy aterrada y mareada, no puedo ni debo seguir, es entonces cuando siento un ardor en las palmas de mis manos, la cuerda me quema

—Te caerás Elena, serás mía—

Escucho a la voz y caigo directo a las colchonetas llevándome un fuerte golpe

— ¡Elena! —

Grita Lucy con expresión angustiada mientras corre hacia mí,

—Nena, ¿te encuentras bien? —

—Eso creo—

— ¿Qué te sucedió Williams? —

Pregunta el profesor Thomas y en eso escucho

—En vez de hacer esa clase de preguntas debería llevarla a la enfermería profesor— 

Ahí parado justo a un lado esta él, Richard, con una voz bastante masculina que me toma por sorpresa; el profesor se nota molesto el comentario, mientras tanto yo trato de levantarme, pero me duele bastante la pierna, caí apoyada en ella

—Espera nena te lastimarás, ahora te llevare a la enfermería y.…—

 —Yo la cargare hasta halla— 

Dice Richard con cara preocupada

—No es necesario que me cargues, en verdad es solo un poco de dolor en la pierna—

—Elena, te cargaré y no hay más salida, puedes tener un daño mayor y no permitiré que te lastimes más—

¡Oh por dios! Esto debe ser un lindo sueño, él está preocupado por mí, el sexy chico malo

—E—esta b—bien—

Contesto nerviosa, el me acomoda unos mechones de cabello detrás de la oreja y me carga, toda la clase incluyendo a Susan, nos observan, pero trato de no poner atención, este es nuestro momento o por lo menos el mío, es tan perfecto, sus ojos son bellos y sus facciones finas, pero sin perder lo masculino, puedo sentir su cuerpo bien formado

—Vas a estar bien Elena, lo prometo—

—No te preocupes y gracias por llevarme—

—No tienes que agradecer nada, en verdad esa caída fue bastante fuerte es sorprendente que solo te lastimaras la pierna, deberían prohibir esa clase de prácticas, o por lo menos para las chicas—

—Te llamas Richard ¿cierto? —

—Sí, pero solo tú puedes llamarme Rick—

Dijo dedicándome una sonrisa que derretiría los polos, me siento en las nubes, me siento tan bien estando cerca de él, llegamos a la enfermería y entra para depositarme en una de las camillas

—Listo ya estarás mejor—

—Gracias Rick—

—No agradezcas bombón—

— ¿Bombón? —

—Sí, tu cabello es esponjado como un dulce bombón, aunque si quieres te digo de otra forma—

Dijo llevándose una mano a su barbilla como si estuviera pensando

—No sé, ¿qué te parece borreguita? —

—Creo que prefiero bombón—

Me sonríe y me sonrojo

—Me alegra que te guste bombón, tu amiga ya no tarda en llegar así que yo me retiro—

Asiento y de pronto se acerca y me da un suave, tierno y muy lindo beso en la mejilla para susurrarme en el oído

—Nos vemos bombón—

—a—adiós Rick—

Atiné a contestar nerviosa y sonrojada, sale de la enfermería y de pronto llega Lucy

—Hey ¿aun no viene la enfermera? —

Niego con la cabeza

—Te vi, estabas en las nubes con Richard—

—No empieces Lucy—

—Ah no Señorita, tú y yo tenemos que hablar de chicos, tenemos que alistarnos para la graduación—

—Sí, pero eso será en otro momento aquí no hablemos—

—Está bien, oye ¿acaso te hiciste un tatuaje? —

Dice apuntando a mi vientre

—No tonta, es una marca de nacimiento—

—Wow, parece un tatuaje, me gusta, me encantaría tener una marca así solo que en forma de estrella y en la espalda baja—

—Lucy no te vayas a tatuar—

—No aun—

Soltamos la risotada y en ese instante entra la enfermera y detrás de ella el profesor Simmons, me mira mi marca y rápido me cubro con mi blusa

—Es marca de nacimiento profesor, no tatuaje así que no la vaya a reportar—

Aclara Lucy

—No se preocupes Señorita. James, por cierto, Señorita Williams, supe de su caída en la clase de educación física, ¿se encuentra bien? —

—Si profesor—

Su semblante estaba algo cambiado, como si tratara de contener una risa, era perturbador, fruncí el ceño y el dice

—Está bien me retiro solo quería saber su estado—

—Gracias profesor—

Asiente y se retira casi corriendo, la enfermera me revisa, Lucy me acompaña, fue muy extraña la forma en que vio mi marca el profesor y mas su actitud, ¿que estará pasando?