Con todo mi corazón (Jinyoung y tú)

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Narración: Jinyoung. 

— ¡(Tn)! Baja a comer algo, ya son las tres. ¿Piensas dormir todo el día? 

(Tn) y yo fuimos de compras en mañana, regresamos alrededor de las 10 AM y ella volvió a dormirse. 

Yo había tenido que arreglar la casa, ya que estábamos en feriado y por supuesto, las empleadas de la casa tenían día libre. 

— Último aviso, iré a tirarte agua helada. —Le grité con la irritación que me había provocado haberme quemado con la cocina minutos antes-  De acuerdo, ya voy. 

Tomé un vaso, lo llené con agua y le puse hielos. 

No intenté ser cuidadoso, por más que hiciera ruido, ella parecía estar muerta. 

La puerta de su habitación estaba cerrada con llave. Pensé que había ido demasiado lejos, las cosas se habían puesto algo incómodas entre nosotros pero no para que llegara a ese extremo. ¿Me veía como a un pervertido?

Por supuesto, sabía dónde la familia guardaba las copias así que busqué la de la habitación para asustarla. Podía fingir ser un fantasma o apagarle y prenderle las luces mientras unos sonidos extraños inundan el cuarto, pero todos mis planes de fueron al demonio cuando abrí esa puerta. 

Entré a la habitación de mi mejor amiga y dejé caer el vaso con agua helada apenas mi cerebro pudo asimilar lo que estaba viendo. 

Cubrí mis ojos porque ella comenzó a gritar y tirarme con almohadones, pero era demasiado tarde. Corrí, y realmente creí que ella no me seguiría porque se tardó en salir de la habitación, pero estaba equivocado. 

— ¡Pervertido! ¡Estaba cerrado con llave! —Gritó (tn) mientras me perseguía por toda la casa tirando golpes al aire - 

— ¿¡Quién te crees que soy!? ¡He pasado mi vida contigo! ¿Cómo puedes pensar así de tu mejor amigo? 

— ¡Debes respetar mi privacidad, imbécil! 

(Tn) se cansó de golpearme y gritarme, pero eso le llevó al menos, diez minutos. Ambos nos echamos en un sofá, necesitábamos respirar. 

— Ni siquiera fue para tanto —Solté. Ella abrió ojos como huevos y volvió a golpear mi hombro- 

— ¿Qué viste? Y más te vale decirme la verdad 

¿La verdad? Estaba loca. No iba a aguantarme más sus gritos y golpes.

— Sólo te vi acostada, pero te tapate demasiado rápido. —Mentí. Estaba escuchando música, boca abajo, en ropa interior- 

— Park Jinyoung, estás mintiendo. 

— ¡No estoy mintiendo! —Grité. No debí hacerlo, mi desesperación sólo me dejó más expuesto- 

— ¿Por qué estás tan nervioso entonces? 

— Porque me acusas de verte del trasero cuando eso no es cierto. 

— Entonces viste que estaba en ropa interior. 

— No he visto nada. Ahora, déjame en paz. 

Me levanté del sofá y traté de irme. Sí seguía cuestionándome no podría seguir mintiendo. 

— ¡Cariño! ¡regresé! 

Ambos nos separamos del espanto al oír la voz de Yugyeom y verlo exactamente frente a nosotros. 

— ¿En qué momento apareciste? —Pregunté en un hilo de voz. Yugyeom río a carcajadas- 

— Woah, estás pálido. ¿Qué estaban haciendo? Está algo desordenado aquí. —Dijo, mientras observaba el living. Por supuesto, habíamos estado corriendo y arrojándonos cosas- 

— Estábamos peleando. —Soltó ella- ¿Cuando llevaste? ¿Hace cuando?

— Recién. Ni siquiera he ido a casa aún, ¿por qué?

Yugyeom caminó hacia (tn) y la tomó de los hombros para pegarla a su cuerpo y abrazarla. Mi mejor amiga le devolvió el abrazo con ganas, y yo me sentí de más. 

— Te extrañé. —Yugyeom sonó ridículamente aniñado y cursi, pero ella sonrió. Una vez me sentí de más- 

— Creo que deberías descansar un poco, luego hablaremos sobre lo que te dije. 

— ¿Tan importante es? 

— De hecho sí.

Hicimos un trato. Yo no volvería a besarla, ni a intentar nada con ella. ¿Igualmente iba a contarle la verdad a Yugyeom? No podía permitirlo. Arruinaría su relación. 

— Déjalo descansar, (tn). Deberían divertirse. ¿Qué puede ser tan importante? 

(Tn) me miró confundida. La conocía perfectamente, y no podría convencerla de hacer algo tan inmoral y cruel. Ella necesitaba decirle la verdad.

— Sí, amor. Hablemos en otro momento, quiero disfrutarte un rato más. En cuánto llegue a casa debo hacer tareas atrasadas. 

Yugyeom tomó el rostro de (tn) y besó los labios que yo había besado con tanto deseo el día anterior. Había sido suficiente para mí. 

Tomé el móvil y salí a dar una vuelta. No dejaba de repetirme una y otra vez, "lo haces por ella" . 

Me dejé caer en el césped de una plaza y cerré los ojos para traer el recuerdo de nuestro primer beso, y el último. 

No necesitaba pensar demasiado, lo sentía todo muy claro. Las cosas no cambiarían. Ella no me daría una oportunidad ni siquiera estando soltera. Y no la culpaba, después de todo, crecimos juntos, como verdaderos hermanos. Yo cometí el error y lo eché a perder todo, no podía esperar más de ella. 

Cuando cayó la noche, regresé a casa de mi mejor amiga. Su madre estaba en la puerta cargando unas bolsas, así que me apresuré por ayudarlas. 

— Gracias Jinyoung, creí que habías vuelto a tu casa. 

— De nada señora Song. De hecho regresé a buscar mis cosas. 

— ¿Dónde estuviste todo el día? Esta haciendo frío, entra. 

— Me aburrí de (tn) y Yugyeom. —Solté sin pensar. Ella río y me tranquilizó, creí estar hablando de más. Luego recordé que (tn) tenía el permitido invitar a su novio.- 

— Yugyeom es un lindo chico, pero definitivamente no se casará con mi hija. 

— De... ¿De qué habla Señora Song?

La madre de tn se sirvió un vaso con agua y me invitó a sentarme junto a ella. 

— Al principio, tn parecía muy entusiasmada, pero últimamente los veo distantes. Ella cree que apenas recuerdo el nombre de ese chico, pero su padre y yo nos hemos encargado de averiguar lo necesario. Así como sé de él, se sobre la relación. 

— Disculpe mi atrevimiento, pero, ¿Por qué lo investigaron? Él no es más que un simple chico como nosotros. 

— Lo sé, pero quería saber qué tan lejos llegarían. 

— No entiendo... 

— Lo entenderán cuando llegue el momento. 

Decidí no hacer ninguna pregunta más porque no podía comprender en absoluto su punto. 

Tn llegó a la casa una hora después. La había esperado para saludarla antes de volver a mi casa, pero ella regresó de lo que supongo, un día con Yugyeom, algo extraña. 

— Debemos hablar, por favor. -Me pidió con los ojos llenos de lágrimas en cuanto abrí la puerta.- 

— ¿Aquí o en mi casa? —Pregunté. Ella tomó mi mano para indicarme que iría conmigo-. 

Llegamos a la casa de mis padres, nos metimos en mi habitación, y ella rompió en llanto. 

Todo me había tomado por sorpresa este día, sin embargo, esa acción fue la más dura y desconcertante para mí. 

— ¿Le dijiste a Yugyeom que nos besamos? —Pregunté con suavidad y me senté en mi cama. Ella seguía parada frente a mi puerta con sus manos entrelazadas y cabeza gacha. No tenia el valor de abrazarla. - 

(Tn) negó con la cabeza. 

— ¿Qué sucede? 

Mi mejor amiga me abrazó. Me quedé inmóvil. 

— Jinyoung...

La miré. Ella tomó mi rostro y depositó un beso en mi mejilla.

Se tomó un momento y volvió a besarme, esta vez, en la comisura de mis labios. 

— ¿Qué sucede, (tn)? 

— No lo sé. 

Tn se sentó en mi regazo y escondió su rostro en mi cuello.