Después de más de veinte minutos de caricias y besos por parte de ambos, decidieron entrar a la casa y esforzarse por fingir que todo estaba exactamente como hace un año atrás.
— ¿Prepararas la cena? -Preguntó (tn) mientras observaba a su mejor amigo colocarse un delantal morado.-
— En realidad recalentaré el almuerzo -Jinyoung sonrió y eso le trajo paz a la adolescente-
— ¿Para qué el delantal, entonces?
— Quedaron platos para lavar. Ven, ayúdame.
— Es un poco aburrido estar solos, ¿no? Nana siempre propone algo divertido.
Jinyoung terminó de lavar un plato y se lo pasó a (tn) para que lo secara.
— Me sorprende que tus padres hayan tenido otra reunión. Creí que últimamente estaban más en casa.
— Tal vez hay problemas en la empresa, mi madre actúa extraño...
(Tn) recordó lo que ella le había comentado hace un tiempo, algo sobre un plan a futuro con los padres se su mejor amigo. Pensó en que al final, no había tenido tiempo para hablarlo con Jinyoung, así que aprovechó el hilo.
— Oye, ¿sabes sobre algún negocio o acuerdo entre nuestros padres?
— No me cuentan nada. ¿De qué tipo de acuerdo hablas?
— Mi madre insinuó que en un futuro nosotros deberíamos... Estar juntos. -(tn) bajó la mirada. La imagen de los dos besándose hace unos minutos atrás la puso nerviosa y casi deja caer un plato-
— Oh... Esa estupidez...
— ¿Lo sabías?
— No lo creí necesario. Mamá odiaba a JiEun así que empezó a hacer comentarios como que deberíamos estar juntos, que ya nos conocíamos desde niños, nuestras familias se llevaban bien y, lo más importante... -Jinyoung sacó las manos del agua, mostró los guantes rosas- Ambos tenemos dinero.
— Tal vez no era tan serio, pero tenías que verle su rostro... Estaba tan segura, como si no fuese sólo un deseo.
— ¿Por qué te preocupas? Nunca estaremos juntos.
Jinyoung se quitó el delantal y los guantes. Dejó a su mejor amiga sin la posibilidad de responder, y caminó hacia el baño.
— Más tarde termino, necesito ducharme. —Mencionó Jinyoung.
(Tn) suspiró. Jinyoung evitaba los problemas sólo alejándose. En el momento que su amigo afirmó que ellos dos nunca estarían juntos, se sintió decepcionada, y estaba bastante asustada con esa sensación... Pero más temía que Jinyoung terminara alejándose de ella por completo.
Por otra parte, ella no era así. Prefería ir de frente, y aunque últimamente le estaba costando mucho, la comunicación era lo único que podía salvar esa amistad.
(Tn) se dirigió a su habitación y revisó el móvil. Yugyeom le había enviado un mensaje.
Gyeom :
¿Qué hace mi hermosa novia?
De nuevo la culpa, la vergüenza y ansiedad invadió su cuerpo. No tenia idea de cómo le explicaría lo sucedido con Jinyoung.
(Tn):
Sólo estoy acostada. ¿Cómo estás?
Gyeom :
Estoy bien. ¿Tú? ¿Sobre qué querías hablar?
(Tn):
Hablaremos cuando llegues. No te preocupes.
Gyeom :
No insistiré porque he tenido que caminar mucho para conseguir buena señal y ya debo irme.
(Tn):
De acuerdo, descansa.
Gyeom :
Te amo, dulces sueños.
(Tn) no solía decir "te amo" muy a menudo, pero aunque quisiera no podría haberlo hecho en ese momento. De alguna forma, comenzaba a caer nuevamente en la dura realidad; engañó a su novio y no había vuelta atrás.
El reloj de su móvil marcaba las 20:30hs. Aún no tenía hambre para preparar la cena ni demasiado sueño para irse a dormir, así que volvió al living para intentar distraerse con una película.
El timbre de la casa sonó haciéndola saltar en su lugar. Había conseguido meterse en la historia de terror que veía en la pantalla frente a ella.
Aún quejándose, se acercó dispuesta a abrir la puerta y enojarse con quién se presentase en su entrada a esa hora de la noche.
— ¿Jaebum? ¿Qué haces aquí?
— Lo siento, te llamé pero no respondiste y como estaba por aquí quise aprovechar para traerte el nuevo guión de la obra.
(Tn) miró a su compañero de teatro fijamente por un momento. Se veía nervioso y su explicación para justificar su visita era extraña, por empezar porque había tenido el móvil consigo todo el tiempo y él no la había llamado.
La adolescente tomó el cuadernillo que le presentó Jaebum.
— Gracias, realmente no tenías que traerlo hasta aquí.
— Está bien, visité a un amigo que vive cerca. Además, no hablamos hace algunas semanas...
— Lo sé... ¿Cómo pasaste tus vacaciones? Entra, vamos.
(Tn) abrió un poco más la puerta y le permitió el paso. Jaebum caminó despacio hasta el sofá.
— Aburridas. Sólo fui a la escuela, lo único que hago emocionante es teatro. ¿Qué tal las tuyas?
— Han sido... Intensas. Estoy ansiosa de volver a empezar.
— Si quieres podemos revisar la obra juntos.
— De hecho prefiero conversar
Jaebum se sentó junto a su compañera y le sonrió. Disfrutaba esa atención.
— ¿Hola?
Jinyoung entró a la sala abotonando su camisa, con una expresión seria y fría en su rostro.
Jaebum se puso de pie y lo saludó amablemente pero Jinyoung continuó con una actitud oscura.
— ¿Quién eres tú? — Jinyoung cuestionó a Jaebum, pero su mirada se posó en los ojos de (tn)—
— Im Jaebum, soy amigo de (tn). ¿Cuál es tu nombre?
— ¿Estuviste casi dos horas en el baño y aún sigues arreglándote? —(tn) interrumpió cualquier diálogo que sus dos amigos pudiesen tener. Primero, porque el rostro de Jinyoung daba miedo, y segundo, porque realmente no entendía que hizo tanto tiempo en el baño—
— Soy Jinyoung, y... Es un poco tarde para llegar a la casa de una chica, ¿no crees? —Jinyoung ignoró por completo a (tn) puesto a que su objetivo era aquel pelinegro junto a ella—
— ¿Disculpa? Que yo sepa, (tn) no tiene hermanos, tú no podrías ser su padre y definitivamente no eres su novio. Ni siquiera sabes porqué estoy aquí.
(Tn) intentó escabullirse hacia su habitación, pero Jinyoung la detuvo en el camino sujetándola del brazo.
— Chicos... ¿Qué están haciendo? Yo solo...
— Soy su mejor amigo, y sus padres me dejaron a cargo de esta casa hasta que regresen. —Jinyoung mintió. (Tn) se estaba cansando de la fuerza que su amigo estaba poniendo en el agarre a su brazo-
— Ella no es una niña y yo también soy su amigo. Pudiste al menos dejarme presentar correctamente antes de interrumpirme.
Jaebum se dirigió a la puerta y le hizo gestos a (tn) dejándole en claro que la llamaría.
— ¡Oye, espera! ¡Lo siento! —(tn) intentó detener a Jaebum decidió irse antes de que la situación se pusiera más incómoda-
(Tn) caminó indignada hacia su habitación, donde Jinyoung se había metido después de oír a Jaebum irse.
— ¿Qué demonios te ocurre? Cuando tú me abandonaste, cuando me dejaste sola y me rompiste el corazón, Jaebum fue el amigo que necesitaba.
(Tn) comenzaba a entender porqué aún sentía un enorme peso en su corazón. Aún guardaba reproches que ni siquiera sabía que estaban allí.
Jinyoung suspiró. Estaba demasiado irritado para sentirse culpable, apenado o conmovido.
Caminó hacia ella y la acorraló contra la puerta.
— ¿Yugyeom sabe sobre ese chico? —Preguntó manteniendo la calma. Quería hacer muchas preguntas.-
— Veo que no te importa en absoluto lo que sentí en ese momento. .
— ¿Realmente él ocupó mi lugar? ¿Fue mejor amigo que yo?
— Te estás comportando como un idiota, Jinyoung.
— Lo he arruinado. Traicioné a mi mejor amigo para hacer por un momento lo que verdaderamente quería. Te besé por última vez para no seguir confundiéndote porque sólo quiero que estés con la persona que amas...
— No te entiendo, ¿este drama es por Jaebum?
— Es porque ya es suficientemente difícil para mi que estés con Yugyeom como para que aparezca otro hombre a intentar algo contigo.
— Somos amigos, él sabe que tengo novio. ¿De qué hablas?
— Pues solo me bastaron unos segundos para notar que tiene otras intenciones.
— Aunque eso fuese así, tú y yo...
— Ya lo sé, (tn). Cumpliré mi promesa, pero debo advertirte, lo haré a mi manera.
Jinyoung se acercó un poco más y apretó la cintura de su amiga con ambas manos.
— Vamos a dormir.
— No lo haremos juntos.
— Lo haremos. Sólo así vamos a superarlo. No lograremos nada poniendo incomodas las cosas cambiando por completo nuestros comportamientos.
— Jinyoung... ¿Qué te sucede?
(Tn) comenzaba a preocuparse. Inevitablemente postergó su enojo, Jinyoung no se veía bien.
Él no respondió. (Tn) se quitó las zapatillas y se acostó en su cama. Jinyoung la siguió. Ella le dio la espalda, pero su amigo la abrazó.
— Déjame creer que eres mía, al menos por un momento.
-