Promesa de amor

CAPITULO 4

—Hola Raúl ¿Cómo estás?—Le pregunto mientras lo saludo con un beso y un abrazo. Huele a hombre, el le gusta colocarse colonia y a mi me encanta olerlo 

—Hola princesa, estoy mejor ahora que te veo—Me comenta y me acaricia la mano.

—Vamos afuera, aquí me da calor y me siento incómoda—Le confiezo q

Salimos de la casa, nos sentamos afuera a platicar. Me gusta sentarme allí y hablar con Raúl siempre nos hemos reunido aquí y pasamos rato juntos con unos novios adolescentes.

—Sabes te extrañe mucho y cunado te vi no me contuve en cruzar la calle para verte —Me dice

—La verdad me sorprendiste pero fue una agradable sorpresa—Le comento

Mientras hablamos veo que llega un automóvil blanco, me quedo mirando pues no sé quién es. Se abre la puerta y es Rodrigo pero este no es el mismo Rodrigo que vi en trabajando en el restaurante.

Esta vestido con un traje hecho a medida se acerca a la entrada y no puedo dejar de mirarlo. Esta recién afeitado y se ve guapísimo.

—Buenas noches, ¿Maite?—Pregunta aún con duda pues aún no nos diferencia

—Rebeca está dentro, supongo que ya está lista. Pasa—Le comentó

El pasa y no sé por qué no puedo dejar de mirarlo y Raúl gruñe

—¿El novio de tú hermana?

—Si, es su novio —Le afirmó

—Por fin tiene un novio, crei que que era de hambiente pues no le conosco novio—Me réplica

—¿Que dices? No, no lo es. Solamente es que es muy exigente para el amor y además es algo tímida—Le replicó

Y mientras termino de decirle eso salen de la casa Rebeca y Rodrigo. Al verlos Raúl queda con la boca abierta al verla y luego que se van me dice

—Rebeca se ve muy guapa y vestida así yo juraría que eres tú y no ella—Me réplica y sonríe

—Pues somos iguales solo que nos vestimos diferente —Le afirmó 

—Si, tu eres más sexy—Me responde y debo decir que ese comentario me causo risa e hizo que me sonrojara.

—¿Vamos cuando te dejará querés por mi? ¿No crees que ya espere lo suficiente?—Me pregunta

—Mmmm—Solo lo miro y no se que decirle, se que me gusta pero siento que solo es algo carnal.

—Dime—Me susurra en los labios y casi me besa

Cundo estamos así tan cerca llega Margoth y saluda

—Buenas noches, perdón no quise interrumpir—Saluda y se disculpa

—Mierda ¿De verdad tuvo que aparecer y vernos así?—Me digo mientras pongo los ojos en blanco pues a ella le gusta Raúl y es una de las razones por la cual no le he dicho que si a él.

El la mira y no con buena cara pues nos interrumpe

—Hola amiga, tranquila—Le digo y Raúl me dice

—Me tengo que ir, voy a ayudar a buscar a mi padre. Porfavor piensa y dame una respuesta—Me dice mientras se despide. Me da un beso y un abrazo añadiendo—Hasta luego Margoth

 El se va y se que está molesto pero ¿Qué puedo hacer?—Me pregunto interiormente mientras lo veo marcharse

—Perdon por la interrupción amiga—Me dice Margoth sacando de mis pensamientos

—Tranquila, gracias a ti por sacarme de ese incómodo momento—Le digo mientras ella se sienta a mi lado

—¿Porque no le das una oportunidad?—Me pregunta

—Por que siento que no lo quiero, osea no siento amor sino solo atracción. Quizás solo sea algo s****l porque el es guapo pero hasta allí. Yo quiero sentir eso que llaman mariposas al verlo o ese susto que describen las personas, quiero eso y con el no es así—Me desahogo con ella

—Hay amiga, te entiendo. Pero deberías intentarlo quizás con el tiempo llegues a quererlo, además mira a tu hermana no puede ser que ella consiga eso y tú no—Me recuerda que hasta Rebeca tiene novio y yo no

Me alegro por ella pero entristesco por mí.

—Sabes Rebeca salió con Rodrigo y me quedé asombrada al verlo, pues no es el mismo que ví en la cocina—Le confiezo

—¿A qué te refieres?—Me pregunta y arquea una ceja

—Bueno hace un momento lo ví, llegó en un su auto y cunado bajo estaba l averdad muy guapo. Tenía un traje n***o y hecho a medida. Además estaba recién afeitado y su cabello estaba arreglado—Le describo como ví a Rodrigo

—Oye ten cuidado y según como lo cuentas parece que te llamo mucho la atención. Recuerda que es el novio de tú hermana —Me repite

—Si, lo sé pero oye estaría ciega para no ver a un chico así, sabes que me derrito por un hombre que use un buen traje—Le recuerdo y ella sonríe

Han pasado cuatro meses desde que conosco a Rodrigo y la verdad cada día me agrada más. Pero casi siempre evitó pasar tiempo con él.

Hoy estoy en mi oficina y cuando se llega la hora del almuerzo salgo a comer al comer general que tiene el restaurante para los empleados. Allí comen y disfrutan su hora libre de trabajo.

Cuando me acerco a ver qué de almorzar Rodrigo se acerca a mí

—Hola ¿Vas almorzar?—Me pregunta

—Si, tengonhambre la verdad—Le informo, hoy amaneci con mucha hambre y aunque desayuné tarde ya tengo hambre

—Sientate que yo te traigo algo, también almorzare así que podemos comer juntos ¿Si quieres?—Me pregunta y sonríe

Me voy a la mesa y lo espero. Dejo mi teléfono en modo avión para no que nadie me moleste.

Solo pasan unos minutos y Rodrigo trae consigo una bandeja con comida nuestro almuerzo, me sirve y se sienta.

Mientras comemos le hago unos preguntas

—Oye a veces creo que tienes dos personalidades—Le digo

El me mira extrañado sonríe y me pregunta

—¿Porque?

—Pues aquí eres un hombre relajado, sencillo, detallista con la comida. Me pareces un chico normal y de pronto en la noche vas a casa muy diferente pues vas en traje o en ropa un poco más elegante, muy arreglado, afeitado y con perfume muy varonil—Le respondo y sonrío

—Wao creo que ni Rebeca me ha detallado así—Me dice y eso comentario no me gustó

—Mierda controlate ya —Me regaño a mi misma

—Disculpa creo que hable de más—Me digo y comienzo a recoger mis cosas para levantarme de la mesa pues siento que se me fue la mano con lo que dije 

El me mira, me toma el brazo con el que recojo el plato y me dice

—Disculpa, no lo dije para que te fueras. Solo quiero hablar contigo un rato—Me dice

—No hay problema, además tengo cosas pendientes por hacer. Gracias por la comida—Me dice

—Regala unos minutos más ¿Si?—Me pide

Lo miro unos segundos y le digo

—Esta bien

—Bueno ¿Entonces tengo dos personalidades?—Me réplica

—Si, es que a veces te ves como una persona sencilla y después te ves como todo un hombre de negocios. ¿Cuál eres?—Le pregunto

El sonríe y me dice

—Eres la primera que me hace esa pregunta, pero bueno en la cocina me siento con libertar de hacer lo que quiero, cocinando me siento libre, relajado y estoy tranquilo. Después de salir de aquí regreso a mi vida—Me cuenta 

—¿A tu vida? ¿Entonces tienes dos trabajos?—Le pregunta 

—Se podría decir que sí, mi padre tiene una empresa de cosméticos muy popular y de seguro la has escuchado se llama Exótica—Me dice

—¿Qué?—Replico pues eso no me lo esperaba, es una empresa grande y tiene unos excelentes productos yo los uso

—Si, allí soy en el gerente general y mi padre el presidente asi que siempre debo estar bien vestido, bueno siempre que no esté en la cocina—Me confíeza

Esto es sorprendente pues nunca me habría imaginado eso. Si pensé que tenía una doble personalidad pero no una doble vida.

—Que interesante tu vida—Le confiezo

—Hago dos cosas que me gustan y trato de hacerlas cada una por separado. Ambas las disfruto mucho —Añade mientras me mira

Me gusta que pueda ser así de sincero conmigo y que tenga la confianza de contarme algo de su vida.

Creo que mi hermana se sacó la lotería con Rodrígo pues cada día me queda más claro que es un buen hombre, espero algún día encontrar a alguien así para mí.