NARRA VALENTINA. –No usamos carritos – respondí viendo como su corazón se rompía. –¿Qué? –pregunto soltándolo y caminando a mi lado mientras entrábamos a las góndolas –¿Acaso llevaremos las cosas en la mano? –preguntó curiosa. –No llevaremos nada – comenté sacando una lista. –¿Solo vinimos a pasear por el supermercado? – comentó bastante extrañada y haciéndome reír por aquello. –No vamos a llevar nada al menos, no por ahora – respondí mientras leía la lista. –Cuanto misterio, me gusta –afirmó uniendo ambas manos y sonriendo. –En realidad lo que hacemos es encargar los vivieres necesarios en gran cantidad, le llevó el inventario a la cajera y ella luego manda un transporte con nuestras cosas encargadas – respondí mientras anotaba la marca del arroz que debían llevar. –¿Y podemos lle

