18.

947 Palabras

18. Era al fin lunes, el primer maldito día de clases. Simón y yo esperábamos dentro del coche de mi padre, él se había adelantado para realizar todo el papeleo. Simón se arreglaba de forma repetitiva la corbata, aunque estaba impecable. —Oyeeee… Simón… No lo hagas más… —le dije algo impaciente y ansioso—. Luces bien y no te hace falta que le pongas tanto esmero… la mayoría de las veces te ves perfecto… Simón me escuchó y dejó caer sus manos a sus costados. —Ok, solo no quiero dar una mal impresión. Esbocé una sonrisa. —Eres imposible de conseguir eso, te lo juro. Ninguno de los dos abríamos las ventanillas a pesar del calor que hacía adentro. Afuera todo se veía tan normal, para el resto la vida transcurría como de costumbre, sin novedades. Para Simón y para mí la cosa era dife

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR