**KEVIN** Salí del hotel sin mirar atrás, subiendo al auto sin siquiera ver al guardia de seguridad. El aire acondicionado se sintió como una bofetada helada en el rostro. Le pedí a mi secretario que buscara una casa de alquiler. El plan ha cambiado. No me iré del país aún, ni me quedaré en ese hotel. En lugar de eso, mi estancia se alargaría. No me iría de este lugar hasta encontrar a esa mujer. Ahora sé que trabajas aquí, Tiffany Stewart. Solo tengo que ponerle rostro a ese nombre y las cosas me serán más fáciles. Mi secretario, eficiente como siempre, me llamó a los pocos minutos y me dio una dirección. Le ordené al chofer que me llevara hasta allí. Al llegar, vi una mini mansión frente a mí, con los lujos que esperaba. Al entrar, me di cuenta de que estaba completamente amueblada

