**DEBBIE**
Me sentí tan vulnerable. Tan humana. Tan real. Tan perfectamente manipuladora.
—No es tan simple —murmuró él, pasándose una mano por el cabello en ese gesto de frustración que yo había llegado a conocer bien—. Tú… tú me haces sentir cosas que no esperaba sentir, Debbie.
¡¡Bingo!!
—Pero ella sigue en tu corazón —dije suavemente, como si estuviera siendo noble, como si estuviera poniéndolo a él primero—. Y yo lo respeto. De verdad. Solo… olvida que esto pasó, ¿sí? No quiero que las cosas sean raras entre nosotros.
Me acerqué a él, coloqué mi mano suavemente en su brazo, lo miré con esos ojos que había perfeccionado para transmitir comprensión sin juicio, deseo sin presión, amor sin condiciones.
—Eres demasiado importante para mí como para perder tu amistad por mi estupide
