POV Ian Farah. Llegamos a Dubái después de un vuelo muy largo, había hecho las reservas en el hotel de mi hermano, y cuando llegué me recibieron como si fuera él, pero muchas mujeres de arrimadas, eso sí, me gustaba, pero en ese momento no tanto. Veía a Aitana, estaba medió, acalorada, quizás el cambio de clima no le sentaba tan bien, parecía un tomate. —¿Estás bien? —Pregunté no tan preocupado, haciéndome el indiferente. —SÍ, el calor aquí es un infierno —No sabía lo que significaba esa expresión, solo contemplaba que se estaba ventilando con las manos y lo sexy que se veía. La chica acudió con nuestras llaves y un ayudante para llevar nuestras cosas. La habitación de todos estaba en el mismo pasillo, una tras la otra. El hotel era hermoso, había una vista increíble y una alberca de m

