mi vida y los vicios

Hola soy josé, quiero contarte un pedazito de mi vida de cuando era pequeño, hasta donde recuerdo y tengo uso de razon fue a los 5 años, mi padre trabajaba como policia, su vida era ser un alcolico y drogadicto, el tomaba todos lo dias, aun recuerdo como el llegaba a la casa bien tomado, mi madre tenia esperanza de que el trajera algo para que comieramos pero el nunca traia nada, cuando cobraba todo se lo gastaba en sus cosas, pero nunca en nosotros, por otro lado mi madre, una mujer de la que me siento muy orgulloso, al ver que mi padre no traia nada, ella iba ver las señoras que vivian cerca de donde nosotros y lavava ropa ajena, eso se volvio una rutina para mi pobre madre ya que mi papá nunca le daba nada, alcontrario siempre la golpeaba, la golpeaba tanto hasta el grado de dejarla sangrando tirado en el piso, aun recuerdo sus ojitos llenas de lagrimas, me sentia muy mal por yo no poder hacer nada para ayudarla, yo salia gritandole a mi padre haciendome el valiente para que ya no golpeara mas a mama, pues bien sabia que me iba pegar a mi y a mama la dejaria en paz en ese momento, eso era de todos los dias y yo sin poder hacer nada, a veces no habia nada de comer en la casa y me iba a la calle a visitar a mis amiguitos, a segun jugar con ellos pero lo que en realidad me movia era el hambre, cuando ibán a comer yo me alejaba y me sentaba en una esquina mirando para el cielo y pensando porque ellos tenian un papa bueno y que siempre les llevaba comida, me sentia el niño mas vil de todo el mundo, mis hermanos los mas pequeños, tan solo tenian 2 y 3 años, en total somos 3 hermanos varones, me sentia tan mal al ver como ellos tambien sufrian lo mismo que yo, cuando mi papa les iba pegar a ellos yo me metia y los golpes me llegaban a mí, no me importaba nada en ese momento mas que ellos, justo cuando estaba dandome por vencido vi que era el momento en que mas tenia que luchar, por ellos, decidi entonces vagar por la calle pasando a la casa de mis amiguitos y con la verguenza en la cara les pedia una tortilla, ellos cuando tenian me la daban y cuando no pues seguia pasando a sus casas, la idea era llevar aunque sea unas tortillas para mis hermanos y mama, yo con tan solo 5 años, cuando regresaba a casa mis hermanitos se ponian muy contentos, miraba como sus sonrisa resplandecian, pues ellos sabian que ya les llebaba un taco como deciamos cuando pequeño, mi madre lloraba al ver lo que hacia por ellos, porque a veces ella no lavava y no habia dinero, nosotros eramos pobres y viviamos en una zona muy pobre, mi padre, me dolia mucho ver el estado en el que siempre se encontraba, mi corazon se entristecia al ver otros papás jugando con sus hijos y mis hermanos y yo solo recibiamos golpes... No te pierdas el siguiente capitulo.