
Ser hijo del narcotraficante más poderoso de su país puede traer: protección, respeto, riquezas. Buena vida. Nahil, nunca ha visto que su vida sea un error. Lo tiene todo y mucho más. El error, fue haberse enamorado de la persona equivocada. Un círculo vicioso para complacer a todos quedando de último; haciendo que dude sobre la tanta protección de sus escoltas y tanto respeto por la población, para terminar siendo el juguete de un nefasto error. Enmendar sus errores puede causarle una ida directa al infierno, sino es que ya lo está viviendo.

