capítulo 3

1443 Words
Alejandro sube a su habitación antes de ser visto por su abuela Nora, una vez dentro empieza a planear cada paso a seguir, Sofía es una chiquilla ingenua le será fácil manipularla a su antojo y una vez obtenga lo que quiere simplemente la mandaría lejos de él y sus abuelos. Sus abuelos bastante tenían con cargar con Sofía cuando fue él que le prometió a su madre cuidar de ella. En la tarde noche llega don Alberto a la mansión y en la sala se encuentra con su adorado nieto y su esposa conversando muy tranquilos. ----- ¿Alejandro cuando llegaste?,--- pregunta don Alberto ---- abuelo, hoy en la mañana quería darles una sorpresa, ---- dice Alejandro, abrazando a su abuelo Los empiezan con una charla muy amena cuando Martín el mayordomo les avisa que la cena está pronta, los tres van al comedor, se sientan en sus lugares, cenan mientras se ponen al día. Alejandro mira con cuidado al igual que en el almuerzo Sofía no esta presente para servirles, solo están Martín y Blanca, una vez cenan los tres van a tomar un café a la sala y Alejandro le avisa a su abuelo que irá con el a la empresa es hora de tomar las riendas del negocio familiar. Una vez terminan de hablar cada uno va a su habitación para descansar, mientras que Sofía limpia y deja todo en orden para el día siguiente, va a su habitación, ahí tiene un pequeño baño con lo básico, es tan pequeño, pero al menos cuenta con lo básico para poder mantenerse limpia. Una vez se baña, se viste con su pijama, va a su cama, como todas las noches trata de imaginar el rostro de su madre para poder dormir, cada día es más difícil mantener en su mente el recuerdo del rostro de su madre y eso la asusta, ya que es lo único que la mantiene viva, el recuerdo de que un día fue amada por alguien. La noche se empieza a poner fría el otoño se aproxima y esa pequeña habitación húmeda será como cada invierno muy frío, Sofía piensa en que tendrá que remendar su viejo cobertor antes de que el frío empiece a ser peor, aún no se acostumbra a esa noche de invierno en esa habitación. Como todas las mañanas Sofía se levanta a las seis de la mañana para empezar con los preparativos del desayuno, cuando Blanca ingresa a la cocina Sofía está terminando de organizar todo, la mesa del comedor está puesta, solo falta llevar todo para que los miembros de la familia disfruten de su desayuno. ---- gracias Sofía que haría yo sin tu ayuda, ---- dice Blanca Martín la mira con pena y preocupación la joven tiene un destino incierto gracias a su padre, la familia Torres se ha encargado de que ella no pueda disfrutar de su niñez, adolescencia y próxima adultez, pero también admira su perseverancia para continuar adelante. Una vez bajan a desayunar Alberto, Nora y Alejandro, desayunan entre risas y charlas, para después irse a la empresa, el auto va en dirección a la empresa, Alejandro mira por la ventana del auto y ve a Sofía, que venía en una bicicleta, su mirada fría sin emoción alguna no deja de ver el rumbo que tomó. — ¿abuelo te molesta si pasamos por la vieja secundaria?, se que necesita una reforma, — dice Alejandro — Jaime ve a la secundaria, sabes Alejandro me agrada que seas así como lo fueron tus padres, —- dice don Alberto Al llegar solo baja Alejandro, mira y ve a Sofía. Sofía llega a la escuela secundaria donde estudia, baja de su bicicleta y va a dejarla, donde están las otras bicicletas, dos jóvenes la miran. ---- Sofi,--- dice su amiga Gisele ---- hola Gisele, --- saluda Sofía ---- y para mí no hay saludo,--- protesta Bruno ---- hola Bruno, ---' saluda tímidamente Sofía Los ojos de Bruno se iluminan con simplemente escuchar el saludo de Sofía, eso no pasa desapercibido para Gisele. Alejandro va hacia la dirección de la secundaria al pasar por delante de dos chicos escucha. — Bruno debes confesar tus sentimientos a Sofía, es muy linda, puede llegar alguien y te gana de mano, piénsalo, — dice Gisele Alejandro detiene sus pasos al escuchar eso, su aura es fría da miedo, sus ojos negros se oscurecen, mira donde van los jóvenes y ve a ese chico, muy sonriente con Sofía, aprieta sus puños fuertes sus nudillos quedan blancos, gira y regresa al auto sin decir nada, solo ordena al chófer seguir a la empresa. Los tres jóvenes entran al edificio y van a sus salones, Bruno está en un salón diferente a las chicas, ellas se sientan juntas desde que se conocieron en la escuela secundaria, Sofía entró por una beca, ya que no tiene dinero para pagar la matrícula, por eso siempre se esfuerza en sacar buenas notas su futuro depende de eso y poder verse libre de las deudas de la familia Torres. Ella tiene en su habitación un cuaderno donde anota todo lo que ya ha pagado con su trabajo en esa mansión más el dinero de la venta del apartamento, todo lo que poseía había sido vendido por don Alberto para cubrir algo de la deuda. En la empresa baja del auto don Alberto y va acompañado de un joven muy apuesto, su rostro es muy atractivo, su físico atlético acompañado por su gran altura, un porte elegante, su cabello n***o, sus ojos negros, todo en él destila clase, elegancia. Pablo Gutiérrez venía entrando a la empresa no puede negar que su sobrino es el calco de su padre Maximiliano un hombre muy elegante. ---- sobrino cuando regresaste,---- pregunto Pablo ---- hola tío, regresé ayer, --- el saludo frío de Alejandro, no pasa desapercibido para su abuelo ---- vamos Alejandro tenemos mucho trabajo, --- dice don Alberto Alejandro entra con su abuelo al ascensor para ir a la oficina de presidencia. Mientras que en la mente de Pablo, tan arrogante y presumido como su padre, ja estos caen muy fuerte. Pablo Gutiérrez es hermano mayor de la madre de Alejandro, siempre detesto a su hermana, aunque fingía muy bien, estudio administración y trabaja en la empresa gracias a que su difunto padre lo hizo entrar en un puesto administrativo cuando era joven. Trabajo como ayudante del contador de la empresa que era Felipe Palacios, el difunto padre de Sofía. Ahora trabaja como secretario de recursos humanos, puesto que le fue dado por don Alberto, no le agrada ese hombre al anciano y lo dejo cerca para tenerlo vigilado, aunque jamás le dijo nada a nadie. En la oficina de presidencia don Alberto le enseña a, Alejandro todo el manejo de la empresa, es un joven muy inteligente y aprende rápidamente. Alejandro le cuenta a su abuelo sobre sus nuevas ideas, eso le agrada al anciano, su nieto le recuerda tanto a su hijo. No puede evitar dejar de pensar en cómo sería su vida de estar con vida, él, su esposa e hija menor, suspira ya que solo son simples ideas. Don Alberto pasa su mañana junto a Alejandro para que el joven adquiera los conocimientos básicos de la empresa y poco a poco se pueda hacer cargo de todo y él así podrá descansar, aunque no le ha dicho a nadie su corazón está dando problemas y eso lo tiene preocupado. Mientras tanto en la secundaria Sofía finaliza su horario y va a la mansión de la familia Torres, deja sus pertenencias en su habitación y va a empezar con sus labores diarias que consiste en la limpieza de cada habitación, y lugar de la mansión, eso hace que termine agotada y sin ganas de nada, pero sabe que su día aún no finaliza. Ayuda a Blanca con la cena, pone la mesa del comedor para luego sentarse a terminar sus trabajos escolares, ella quiere ir a la universidad y estudiar literatura como su madre. Sofía se parece mucho a su difunta madre, solo no tiene su hermosa sonrisa, esa desapareció el día del accidente donde su padre mató a los padres y hermana de Alejandro, donde él también perdió la vida dejándola completamente sola y desamparada, con todas las deudas que él ocasionó. Las personas en la ciudad, siempre han pensado que Alberto y Nora Torres son almas muy bondadosas en dar un lugar donde viví a la hija del causante de la muerte de su único hijo Maximiliano. En la ciudad todos admiraban al matrimonio Maximiliano y Valeria eran personas muy buenas que siempre ayudaron a los más necesitados.
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