Papá se quitó la camisa y los pantalones cortos antes de desnudarse por completo y recostarse en el sofá. Nos miró a las dos y nos acarició los labios con los dedos: «Chicas, suban y siéntense conmigo». Papá palmeó los cojines del sofá a ambos lados. Autumn y yo nos levantamos y nos subimos al regazo de papá; nos sentamos a cada lado, inclinándonos hacia él mientras nos abrazaba. Nos rodeó con las manos y nos ahuecó los pechos mientras Autumn y yo nos acurrucábamos contra papá. Me encantaba ser tan sucia para papá; Autumn y yo frotamos nuestras piernas desnudas contra sus muslos mientras nos sentábamos a cada lado. "Erika... eres una hija tan buena", gimió papá mirándome. "Y Autumn, eres una sobrina tan buena". Papá le dedicó a mi prima tetona una sonrisa pícara. "No puedo creer que est

