Tomó el resto del armamento y lo colocó en la plataforma trasera del camión. Luego colocó el pesado baúl dentro del círculo. Lo último que hizo fue inflar el colchón, la almohada inflable, las sábanas y una manta encima, dentro del círculo. Si esto era una prisión, Alan quería entrar. Claro, sería genial que Susan estuviera con él.
Era hora de despertar a la Bella Durmiente. Alan le quitó las esposas y la venda de los ojos. Lo siguiente dolería, pero tenía que quitarse la cinta adhesiva de la boca. Lo hizo rápidamente para acabar con la agonía, rápido.
Los ojos de Stephano se abrieron de par en par cuando el dolor despertó su cerebro.
Alan dijo: "No intentes moverte. Déjame ayudarte a incorporarte y te daré un poco de Gatorade para equilibrar tus electrolitos. Después, podrás evaluar tu
