Ni tu princesa. Ni tu príncipe.

UN SUEÑO PROFUNDO vs UN TERRIBLE DESPERTAR

En este punto de la historia llevo una semana entera en mi habitación con un par de meriendas al día y mucha agua, no me muevo de mi cama y la realidad comienza a abrumar. 

Extrañamente no siento rabia por M.A,  mi corazón no lo odia por que lo único que constantemente repito es ese momento en que él le pronuncio un “Te amo” a su extraoficial pareja. Jamás me atrevería a juzgar un amor por diferente que pareciera, aunque el amor, es amor, sin diferencias.  Es más, siempre dije que cada persona puede hacer con su vida lo que le plazca; sin embargo, marco no pensó en la mía, no pensó en mis sueños o en lo mal que me dejaría ante la sociedad y la familia todo esto.

En el fondo si lo odio un poco.

Odio que en este momento él sea feliz porque pudo anunciarle al mundo sus deseos íntimos y pudo presentarse ante su familia como verdaderamente es, solo que a costa de mi felicidad y destruir mis sueños.

Me cuestiono constantemente si de verdad lo amaba, siento que sí, lo sé, pero todo esto fue tan rápido y definitivo que no me dio tiempo para el desamor, solo para la desilusión y la terrible realidad, tan terrible, como tener que desarmar un matrimonio, sin haberlo formado. 

Por fin, luego de 10 largos días, me obligará a ir a la oficina, mil cosas se acumulan en mi escritorio y mi, muy eficaz asistente, ya no puede más sola, me lo hizo saber cuando recibí su mensaje de texto:

>De_ Andrea Asist

Tany, te entiendo desde el fondo de mi corazón, sin embargo ni los constructores, ni los propietarios creen una mentira mas de las mil que he dicho estos largos días, te juro que tendré que confesarme de rodillas y con azotes para que mi alma no pague las malas decisiones del desgraciado de M.A.... ¿Por favor ven mañana si? anda chiquita no juegues así conmigo...

De_ Andrea Asist

Te amo, ¿lo sabías?

Eres más fuerte que todo esto.. ¡Ánimo!

Me duermo con la compañía de mi duo favorito  de Jessy y joy y su tan conveniente y sincera, “Dueles”

Al día siguiente.

Pase por alto cualquier espejo que pudiera evidenciar mi cansado rostro, mis re marcadas ojeras y mis ojos hinchados, simplemente sujete mi cabello y me dispongo de la mejor manera que encuentro, total este día será largo. 

Andrea me saluda en el hall de lo más efusiva y solidaria, pero en sus ojos puedo ver la lastima con la que me mira y eso sencillamente me derrota, en su abrazo sincero, lloro, no tanto como en casa, pero es mi primer llanto en hombros de otra persona, todo mi dolor,  lo pase sola.

-Entiende que no tienes la culpa, lo tuvo tan reservado, Tany. 

-Me siento poca mujer ¿me entiendes?

-Es claro, además es muy poco el tiempo que ha pasado. 

-Andrea, lo oí en su consultorio, oí cuando le dijo que lo amaba y lo beso, realmente lo ama, y eso me alivia un poco, solo que, ¿no entiendo por qué?

-No es una situación usual, siempre se espera, bueno ya sabes…

Andrea se encoge de hombros y extiende sus manos. 

-Una mujer… bueno, otra mujer. 

-Exactamente Tany, sabes que no me gusta juzgar, al fin que cada quien vive como mejor le plazca.

-Destruyó mi castillo Andrea

-¡Ohhh! princesa, no lo digas así, eres tan hermosa y talentosa, pronto esto quedará en el pasado y por fin tu HVP -imita mis gestos cuando lo menciona- se verá realizado, míralo así, si ese matrimonio se hubiera dado, y años después te enteras, ¿no crees que sería peor?

Lo medito en silencio y realmente tiene razón, Andrea era buena con el vaso medio lleno y ponía siempre en mi vista horizontes más claros, realmente no me detuve a pensar que si no hubiera descubierto todo aún estaría encerrada en un sueño profundo y justo prefiero mas este terrible despertar.

Asentí con la cabeza ante ese mundo de sabiduría.

Al contrario de lo que pensé, el día pasó rápido entre los mil planos que debía revisar, las visitas a las obras y las reuniones con clientes y encargados, avance tanto este día que puedo jurar que esta noche será reconfortante, pero como siempre algo altera mi paz, ya no puedo darme la comodidad de creer que todo va de bien, es como una maldición. 

Con todo esto de ponerlos al día con mi agobio,  olvidaba contarles que mi padre se encargó de cancelar todas las invitaciones en pocas horas, devolver los obsequios y recibir uno que otro reembolso de los proveedores, todo lo hizo tan rápido que ni note su ausencia. Obviamente aun vivo con él, pero eso será por poco tiempo porque decidí tomar un Pent House del edificio que inauguramos en contados meses, al fin que ya padre superó la muerte de mamá y es hora de salir de mi castillo de cristal.

En fin, como les decía, algo siempre altera mi paz.

Llegue a casa luego de mi extenuante día laboral, con la satisfacción de subir un pequeño peldaño en el olvido de todo este escándalo.

Me quede en hielo cuando al entrar al recibidor veo a M.A, mi padre, sus padres y el misterioso hombre del umbral, todos hablando de la manera más civilizada propia de las familias Ariza Griseldi y Gabardini Socras.

- ¿Buenas noches?

De inmediato todos los presentes se pusieron de pie como si de una presencia reconocida se tratara o de tal vez porque justamente era a mi, que estaban esperando en ese momento.

-Hija, ¿quieres tomar asiento un momento?

-¿De qué va todo esto padre? realmente y si me disculpan, no siento ningún deseo de hablar en este momento.

Noté como Marco tomó la iniciativa de caminar hacia mi y de inmediato retrocedí. Mis ojos se posaron en el hombre del umbral y sin pensarlo lo señalé, mirando a mi padre.

- Sabías que este hombre estuvo siguiéndome, haciéndome creer que el stress de la maravillosa "boda" - resalto la palabra con mis dedos como comillas- me tenía paranoica. ¿Tome medicamentos lo sabías?- dije mientras le sostenía la mirada al misterioso incognito

-Antana, realmente me gustaría hablarte, ¿en privado?

Sonreí del descaro con el que mencionaba mi nombre.

- Tu género no hace menos el engaño, ¿lo entiendes? - Creo que eso fue lo mejor que pude mencionar en ese momento, antes de sentir que mi cuerpo se desmoronaba, olvide por completo controlar mi azúcar, solo eso pude recordar antes de caer desmayada