Me despierto con el cuerpo de Madison encajado contra el mío, suave en su sueño. No me
muevo porque no quiero despertarla. Anoche, mientras ella dormía, le compré una licencia,
pasaporte, tarjetas de crédito, todo, bajo un nuevo nombre.
Si las cosas se tuercen, necesito saber que estará a salvo.
Con cuidado, le doy un beso en la sien, manteniendo mi cuerpo relajado. Sé que hoy será el
día que nos empuje en una dirección u otra.
Un futuro juntos aquí en Chicago, o un futuro para ella sin mí. Solo quiero retrasar el
comienzo, empaparme de la sensación de su piel, de su olor.
Siento mi corazón latiendo en el pecho. Estoy seguro de que siempre ha estado allí,
bombeando vida por mis venas, pero el sonido es nuevo para mis oídos. Su mano está en mi
estómago y la cubro con la mía, desli
