Sin luz ni Mafias

1. EL INICIO

ACTUALIDAD (Días antes del encuentro coincidente)

Abro los ojos después de un profundo sueño y lo primero que veo en la mesita de noche al lado de mi cama, es el hermoso cuadro de mi niño, cuadro que hizo con sus propias manos en la escuela sobre nuestra familia. Está hecho de un marco de cartón colorido y lleno de adornos, donde se ve reflejado una foto en la que salimos perfectamente sonrientes Luka, él y yo.

Quedé viéndolo con mis ojos llorosos, cuando de repente:

–“Mamá”– el dueño de esa dulcecita voz, me desatonta y viene removiendo toda mi cama.

–Buenos días amor –le digo en tanto ya se ha lanzado sobre mí, apretando mis cachetes con sus pequeñas manos mientras me dá miles de besitos.–Hoy te levantaste temprano Miquel– exclamo cariñosa mientras lo abrazo fuertemente.

–Sí mamá, estoy muy contento–me besa– porque iré a mi paseo de la escuela–me vuelve a besar–¡Veré a los animalitos mami!…eso será muy bonito –me dice mirándome fijamente con sus ojitos maravillados para al final darme otro fuerte abrazo, mientras yo me levanto de la cama junto con él con mis cabellos revoloteados .

–Vamos hijo, tengo que preparar tu desayuno y alistar el refrigerio que te vas a llevar–Él me asienta con la cabeza y levantándonos complemente de pie, nos vamos juntos de la mano para alistarnos .

Terminando todos los preparativos para la excursión de Miquel, salimos de casa en mi auto. Llegamos a la escuela y todos sus compañeritos se juntan emocionados al tan esperado viaje, por el cuál se irían por dos días .

–Buenos días señora Andrews – escucho la voz de la profesora Ana que me está saludando.

–Buenos días – correspondo y estrechamos las manos.

–¿Todo le fué bien en el trabajo que le recomendé?–me dice educadamente aún removiendo nuestras manos.

– Sí profesora, muchas gracias, me aceptaron.– le comento en voz baja con entusiasmo – comenzaré a trabajar en aquel restaurante a partir de mañana, desde las 9am hasta la 1pm – me muestro agradecida .

– ¡Eso es maravilloso! Señora Andrews, después nos tomamos un refresco por ello.– me responde susurrando, por la cuál yo intuyo inmediatamente sonriendo que no será un refresco sino unas cervezas – debemos celebrar.

–¡Claro que sí! Nos vemos mañana por la tarde en mi casa “Profesora Ana”– sonreímos cómplices disimuladamente para que las otras mamás no se puedan percatar de nuestra rara conversación.

Ana a parte de ser la profesora de mi hijo, es mi amiga, y también la madrina de Miquel, ella es una chica de mi misma edad. Nos conocemos desde hace 6 años. Ella fué una persona indudablemente fundamental en mi vida, que me apoyó en diversos aspectos urgentes que me sucedieron.

Me despido de Miquel con un fuerte abrazo y luego de Ana, para después en tanto ellos iban entrando al autobús, agito mis manos despidiéndoles y les deseo buen viaje.

Doy un enorme suspiro cuando el autobús ya desapareció, las mamás se quedan conversando en grupos pero yo decido ir a casa. Mientras murmuraban y sabiendo perfectamente que quizás el punto de conversación era yo, me despido de ellas a lo lejos y me voy. Llegando a casa ofuscada doy inicio a mis quehaceres toda la mañana .

Luego de unas horas me alisto para ir a mi siguiente trabajo, al cuál siempre voy de 2 a 6 de la tarde, en una repostería que se podría decir que es de lujo.

Al llegar me voy rápidamente a cambiar de uniforme, que consta en un pantalón, boína y una blusa, todos de color n***o. Finalizando añado el mandil de color marrón, amarrándolo firmemente en mi cintura y acompañado de una corbatita del mismo color, comienzo así mi trabajo detrás del mostrador.

Después de haber trabajado por cuatro duras horas como siempre, doy una caminata cerca de la calle de Segovia, observando pacíficamente los enormes edificios antiguos de los extensos caminos de las avenidas.

Caminando entre toda la gente llego y entro al edificio que parece a punto de derrumbarse por fuera, pero que por dentro es mejor de lo que parece. Abro la puerta de mi departamento y lo primero que hago, es tomarme un enorme vaso con agua para saciar la sed.

Decido darme un baño y me relajo largos minutos bajo la ducha, pensando en mi cansado día. Los clientes a veces suelen ser demasiados déspotas hasta el punto de estresarme y por ello extraño el abrazo que siempre me recarga cuando suelo llegar a casa, sin embargo hoy no lo tendré y tengo que conformarme.

Salgo de la ducha me pongo la bata más cómoda que tengo y me siento en mi cama. Me quedo mirando al vacío por unos segundos, para luego dirigirme inevitablemente otra vez, al cuadro donde sale la supuesta familia felíz.

“Ya quisiera que realmente fuera así” digo mientras caen mis lágrimas . “Hubiera querido con todo mi corazón que realmente fuera así”, me vuelvo a destruir con mis palabras y pensamientos rompiéndome en mil pedazos.

Hoy estoy sola y puedo desahogarme a cuanto puedo, por hoy dejaré de fingir una sonrisa. Lloro como niña a pesar de ser ya una adulta, pues mis recuerdos aún siguen presentes de como terminó todo tristemente para mí...

……

7 AÑOS ATRÁS...

Después de la boda de Luiza, ellos decidieron quedarse a vivir por un tiempo en casa de los padres de Sein. Nuestra despedida fué muy emotiva con variedad de sentimientos. Me sentí algo triste y a la vez feliz, yo sinceramente estaba alegre que al fin ella pudiera tener la felicidad en su vida, se lo merecía después de todo lo que tuvo que pasar.

Por otro lado Lyn al día siguiente de la boda se fue a Inglaterra, ella seguiría sus estudios allá con el apoyo de Luka que le ofreció una beca.

Hendrick regreso a Italia junto con nosotros también, pero penosamente era muy notorio la tristeza que reflejaba. Durante todo el tiempo que estuve cerca de Lyn y él, pude percatarme de la tensión entre ellos, era claro que habían sentimientos mutuos, pero obviamente era una situación complicada y no estaba en mis manos poder actuar ante ello, Lyn ya había tomado una decisión.

Por otro lado Luka decidió contratar a Hendrick para estar cerca como su mano derecha y así como a él, acogió a todo mi personal que se quedaron sin trabajo a sus empresas. Luka definitivamente es un hombre maravilloso.

Después de haber pasado un mes del abandono de Ren, debido a mis miles de problemas que tuve que afrontar, no me había percatado de mi salud ni que la menstruación se me había detenido. Definitivamente los dolores de cabeza y mareos me comenzaron a decir algo. Aún seguía viviendo en casa de Luka, sin saber que hacer con mi vida, pero cuándo me di cuenta de éstos indicios, decidí sacarme de la duda de un probable embarazo.

Lo afronté sola, no quería decírselo aún a nadie, entonces fuí a hacerme las pruebas y horas después esperando en el mismo lugar, me dieron el sobre con los resultados. Decidí aún no abrirlos y me fuí a un lugar dónde lo vería completamente sola y relajada…

Ya frente al mar, mientras la brisa recorría mi rostro, abro aquel sobre y a lo que me dirigían mis sospechas resultaron ser ciertas.Yo estaba embarazada.

Se me hizo un nudo en la garganta y mis ojos se inundaron de lágrimas incontrolablemente, y me eché a llorar con voz y alma, sin importar si alguien me escuchara. Tenía miles de pensamientos confusos ¿Y ahora que haré?¿Cómo lo afrontaré?, después de pensarlo tanto dije que debía asumir la responsabilidad y decírselo a Ren de todos modos, así sea que ya no quiera que estemos juntos , debía hacerlo.

Me levanté del lugar, utilicé mis contactos y traté de ubicarlo, sin embargo las únicas respuestas que recibía era que “Ren no quería saber de mí”, que “Nunca contestaría mis llamadas”, y que “Tenía cosas importantes que atender”. Todo un mes entero me dediqué a contactarlo sin éxito alguno. Mis síntomas eran cada vez más notorios, incluso Luka se dió cuenta de ello y simplemente diciéndole que estaba mal del estómago, lo apacigüe.

Me hice la fuerte. Luka era paciente conmigo y muy dedicado a mí, al menos lo era en las pocas horas que podía verlo durante el día. El caos que había causado mi tío, los dejó con diversos problemas que él tenía que solucionar, es por eso que se la pasaba viajando sin poder ver tanto su rostro.

Después de tantos intentos con lo de Ren, me dije a mí misma que lo haría yo sola. Saqué mi valentía y coraje por mí hijo y me dije que ¡SÍ podría hacerlo!, pero primero debía alejarlo de ésta vida peligrosa y comenzar de nuevo otra vez. Mis pasos en Italia por el momento no eran seguros, entonces armé un plan.

Junté todo mi dinero ahorrado que tenía en un cofre y envolví todas mis joyas. Decidí realizar cartas para todos, agradeciéndoles por todo el apoyo que me habían brindado en esos años, y lo que les comenté fué que lo hacía para comenzar una nueva vida. Les dije también que no se preocuparan por mí, pues estaría en contacto con ellos cuando comprara un nuevo celular, así era la única manera que no me buscarían, porque al menos estarían al tanto que estoy bien.

Les mandé las cartas en físico por correo a cada uno de ellos y el de Luka lo dejé al lado de su cama. A él le hice un pedido especial, le imploré mediante escrito que no me buscara, que si me apreciaba que me dejara ir para poder tener un nuevo inicio por un largo tiempo y obviamente que no se preocupara porque estaría en contacto siempre.

Y es así que con lágrimas cayendo exageradamente de mi rostro, salí de la “MANSIÓN BERLUS”, dejando mi pasado atrás y con ello comenzando un nuevo futuro.

Al primer país en dónde pensé irme, fué España, pero antes que me vaya, si era esto un nuevo comienzo decidí cambiarme el apellido y mi nombre por “Amy Andrews Hensell” renaciendo así una nueva mujer.

Después de aquello renté un departamento mas ó menos acomodado y viví ahí por 5 meses más. Mi embarazo fué de hecho un poco complicado estando sola, pero al menos tenía dinero para cumplir mis enormes antojos.

Mantenía mis controles al día y trataba de aprender todo lo que más podía. Era hermoso sentir otra vez esa sensación en mi vientre, la diferencia era que ahora estaba mucho más grande y sentía claramente como se movía sobresaliendo en mi barriguita de vez en cuando, sus manitos, piececitos ó cabecita.

El ser madre definitivamente es algo glorioso, esa personita se convierte parte de tí. Moría de ansias por tenerlo pronto en mis manos y ya faltaba sólo unos meses.

Sin embargo comencé a darme cuenta que tenía problemas económicamente, pues al vivir en un departamento mas ó menos acomodado, estaba haciendo que mis ahorros se vayan muy rápido. Entonces ya con mis siete meses de embarazo y con mi barriguita enorme, decidí dar un paseo por los lugares más cercanos si en caso encontraba algún aviso.

Mientras realizaba mi trayecto por la ciudad, pasé por una escuela preescolar y me quedé admirada fijando a todos los niños mientras jugaban en el jardín de la escuela, pues mi curiosidad era grande, me imaginaba que algún día mi bebé, crecería de igual manera.

Una mujer que se encontraba con ellos, que intuía que era la profesora se percató de mi presencia y sin dudarlo se acercó a mí.

– ¡Hola! ¿Eres nueva mamá y vienes a ver a tu hijo?– me pregunta entusiasmada con una sonrisa enorme.

– Eh... eh no. Disculpe debo irme– Respondo tímida y avergonzada.

– ¡Espera!– me dice y se me acerca avanzando los paso que yo ya había recorrido. –¡Qué hermosa pancita!– toca mi vientre dejándome helada– ¿Cuántos meses ya tienes?

– Si-siete meses– respondo sorprendida a su actitud.

– ¡Ow! ¡Qué lindo!– me dice maravillada acariciando a mi barriguita–¿Tú no eres de aquí verdad? Lo reconozco por tu acento.

– Eh... sí.

– ¿De dónde eres?

– De Italia– contesto tímida.

– ¡Lo supuse!– me deja de dar caricias y me toca del hombro.– Entonces querida ¿Qué haces por aquí? Está haciendo mucho calor. Conozco éste lugar como la palma de mi mano, ¿Te puedo ayudar en algo?.

– Bueno, estoy buscando una habitación cómoda con la cuál no deba pagar mucho.

– Mmm, entiendo. ¡Perfecto! ¡Qué casualidad! mis padres están rentando un lugar cerca de aquí, ellos regresaron a Cantabria, entonces el lugar quedó vacío. ¿Te parece bien? Solo pagarías 250 euros mensuales.

– ¡Wow! ¿Hasta habitaciones de ese precio se pueden encontrar? Yo estoy pagando por una pequeña habitación 1000 euros mensual.

– ¿¡Qué!? ¿Eres rica o qué?– se le escapó y me habló informal para de pronto avergonzarse– Lo siento, suelo ser a veces dramática y algo entrometida “jeje”.

– No te preocupes– digo frotando mi barriguita que comenzaba a sentir hambre– es una larga historia.

– ¡Bueno, bueno! no importa dime qué te parece ¿Te interesa? Yo acabaré en media hora mi trabajo y podemos ir a verlo.

– Sí, te lo agradecería muchas gracias.

Es así que conocí a Ana, me mudé al apartamento donde ella me llevó e incluso se ofreció a ayudarme, pues se había percatado que era una madre soltera. Poco a poco así nos fuimos acercando cada día más, ella comenzó a venir más seguido a visitarme, descubrimos que teníamos una buena química y así nos volvimos buenas amigas e inseparables.

Con el tiempo mientras entrabamos en confianza, llegué a contarle toda la verdad y ella me aceptó como era sin juzgarme a cada decisión que tomé, incluso me ayudó enseñándome a como se tenía que vivir teniendo bajos recursos, que realmente fué algo difícil y demasiado nuevo para mí.

El día que iba a dar a luz, ella salió despavorida de su trabajo para alcanzarme en casa porque no podía moverme sola, se me había roto la fuente y tenía mucho miedo.

Ella llegó tan veloz y me llevó al hospital, recuerdo que en todo el camino me decía “inhala y exhala, inhala y exhala, nuestro hijo nacerá bien” viendo al chófer del taxi algo confundido de nuestra angustiada conversación. Ana es así tan cálida y amable, siempre en cuanto puede está molestando con su buen ánimo.

Convertirme en madre fue algo hermoso, verlo por primera vez en mis brazos, fue los más glorioso que una mujer puede sentir en la vida, ¡Era un niño! ¡Un hermoso niño!. Aún no podía diferenciar a quién se parecía más respecto a sus rasgos, si a Ren o a mí, pero de algo estaba segura, tenía los ojos cafés exactamente como los de su padre.

Con el tiempo mi bebé fue creciendo y Ana pudo presenciar que realmente estaba perdida de como cuidar un niño, entonces ella con los conocimientos de años trabajando con ellos, hizo que se vuelva una experta en la rama de la maternidad. Me ayudó demasiado en cosas fundamentales que una madre debía saber, fuí muy agradecida por ello.

Ella lamentablemente es aún soltera y es una lástima porque es una maravillosa mujer, claramente estoy segura que cuando ella se convierta en mamá, será de hecho la mejor.

.......

3 AÑOS DESPUÉS...

Y así paso el tiempo, tuve que acoplarme a mi realidad, mi dinero y ahorros se acabaron. Debido a eso ya hace un año, comencé a trabajar. Claro está que con la ayuda de mi querida amiga Ana lo pude lograr, me iba a trabajar en las tardes cuando ella llegaba de la escuela para quedarse con Miquel.

Sí, mi adorado “Miquel” lo llamé así como el hermano de Ren, creo que él lo habría querido de ese modo. Sé que aún lo odio al punto de no querer que nunca se cruce en mi camino, pero al menos por ser el padre de mi hijo, debía llevar algo respecto con él, pensé.

Mi relación con Luka, Lyn y Luiza eran mediantes llamadas una vez al mes, siempre ponía excusas que no podía viajar y que me mantenía ocupada con el trabajo. Aún no me atrevía a contarles la verdad, pues sabía que me buscarían de inmediato si se enterasen de mi situación.

Era algo que por ahora no lo podía permitir, sin embargo al menos manteniéndome en contacto con ellos todo éste tiempo, les hizo sentir tranquilos.

Luka intentó insistentemente por encontrarnos varias veces pero siempre cambiaba de tema o me ponía firme para negarme. Es así que al final terminamos discutiendo fuertemente, por ello es un año que ya no hablamos, pero lo que no sabe es que yo sé que siempre le pregunta a Lyn sobre mí.

Ésta vez me sorprendió el orgullo que mantiene pero prefiero que sea así, aún no me siento preparada para afrontarlos.

Hoy es mi cumpleaños y fuera de ello también se festeja una gran fiesta que celebran por varios días en la capital y éste día sería“ La fiesta de la virgen de la paloma” , Ana vino a sacarme de mi encierro pues sólo pensaba pasarla en casa, pero ella muy animosa me hizo alistar junto al bebé.

Ya siendo las 5 de la tarde, cuando el sol había bajado bastante, salimos juntas de la casa rumbo a la “ Plaza de la Paja” .

Todas las calles eran hermosas llenos de farolillos y adornos de variedad de colores, la gente era muy alegre bailando entre sí, habían también hombres con vestimentas típicas que animaban al lugar y con ello muchas impresionantes cosas más. Miquel era el más felíz observando todo por primera vez completamente maravillado. Es de hecho una fiesta que te hace sentir muy confortable y a gusto.

Ana quiso llevar todo el tiempo al bebé en su coche, pues ella insistía que era mi cumpleaños y que no me debía esforzar ni un dedo. Aún así me gustó pues podía ver a Miquel todo el tiempo por delante y ya no por detrás como siempre suelo hacerlo.

Nos pusimos a ver cómo bailaban un grupo de ancianos. Tuve mucha sed, entonces diciéndole a Ana que regresaba, me fuí a comprar tres bebidas para los tres. Cuándo venía de regreso Miquel lloraba, pues habían reventado bombardas en la celebración y fueron muy estruendosos, por ello Ana lo trataba de calmar del susto entre sus brazos sin tener éxito.

Entonces yo dándole a ella las bebidas y ella dándome al bebé, intento calmarlo con pequeñas palmaditas y moviéndolo al compás de mi cuerpo lo abrazo firmemente en mi pecho, mientras le decía:“Ya hijito ya pasó, ya pasó”, cuando de pronto alzo la vista hacia adelante y me quedo estupefacta de lo que veían mis ojos.

Estaba Luka en frente de mí, a unos tres metros con un ramo de rosas, encontrándose en un estado de shock y con la mirada anonadada completamente al igual que yo.