La nerd

4998 Words
Ma, ya me tengo que ir, se hace tarde y nunca he llegado tarde a ninguna clase, no lo pienso esperar más — me queje mientras mi madre seguía impidiéndome que me vaya a la universidad, por esperar a mi hermano mayor. El se llama Hugo, tiene 24 años, es el popular de la uni, está en su último año, el es todo lo contrario a mi, ya que a él no le agrada mucho estudiar, en cambio a mi si, me dicen rata de biblioteca, nerd, ñoña, cosas así, la verdad a mí no me afecta, ¿porque?. ¿Por qué me tendría que afectar unas palabras que vienen a ser adjetivos calificativos?  Yo vivo mi vida cómo a mi se me de la regalada gana, no pienso, ni miró, ni criticó a los demás, cada quien vive su vida a su manera. Haya ellos que se fijan en mi vida solo porque no tienen lo necesario o suficiente en la suya, encima la falta de autoestima, que gracias a eso nos quieren hacer sentir mal a 'mi tipo de personas' Me burló de esa clase de gente ignorantes. Estoy comenzando a impacientarse la uni me queda a dos cuadras y si mi hermano no sale en un minuto, prefiero irme caminando a seguir esperándolo, después de todo igual el nunca me espera porque se avergüenza de mí. Ma, me voy, no me importa esperar más, llegaré tarde si me quedo— le digo para que me deje pasar, pero antes de hacerlo me agarra de la muñeca. Si te vas le dejas el coche a tu hermano — dice ella intentando que no me vaya, pero se me hace tarde.  Da igual, pensaba en irme caminando — al decir eso me suelta y por fin me pongo en marcha a la uni. Pero parece que el destino está en mi contra, ¿Porque lo digo?  Fácil, resulta que a pocos metros veo a uno de los populares al igual que mi hermano, el chico, Juan, tiene 22 es un año mayor que yo, es simpático no lo niego, pero hay algo que no me gusta y es su forma de verme, pareciera como si me quisiera comer, siempre intento alejarme de el, pero parece imposible. Nuestro primer encuentro fue por su culpa, me había puesto el pie y me caí de bruces, yo uso lentes, mis ojos son verdes, tengo un problema de visión desde niña, que podría también usar lentes de contacto, pero como siempre he sido antisocial, me decidí por llevar lentes normales. Ese día caí y mis lentes cayeron a sus pies, había sentido como alguien agarraba mi mano y en el momento del tacto sentí una corriente eléctrica pasarme por mis pies hasta la cabeza, nunca me había pasado eso, esa persona extendió mis manos y sentí mis lentes, cuando me los pongo lo veo a él delante de mi. Me sorprendí por la cercanía, pero igual me mostraba indiferente y me aleje unos pasos para no tener cercanía de ningún tipo con el. Despues pase por su lado dándole las gracias cuando más allá escucho como algunas chicas dicen me dio risa como la hacia caer y encima ella le agradece. Me sentí como una idiota ante tal situación, pero igual no le di importancia. Ahora lo tenía a unos escasos pasos, decidí cruzar la calle para evitarlo, me fijé en ambas direcciones antes de cruzar pero apenas y di dos pasos cuando alguien me jalo hacia atrás y me sostuvo del brazo, volteo para ver quién es ... Resulta ser nada más ni nada menos que el. — ¿Crees que no se que me estás evitando? Lo que no entiendo es el porqué — dice Juan en aparente estado de confusión. Yo solo lo miro sin decir nada, me quedo quieta, no le pienso responder para nada, y cuando se percata de esto frunce el ceño y se me acerca, mucho más de lo que quisiera. — Así que no me piensas hablar, ¿Osea me piensas hacer la ley del hielo? — dice y se ríe a carcajadas al terminar de hablar. Yo alzó una ceja en respuesta y deja de reír, me mira fijamente y puedo llegar a ver por un momento dolor, tristeza, pero no le doy importancia, ya que no entendía el porqué de eso, además que siguió hablando — muy bien, sino piensas decir nada, vete, no tengo nada más que decirte, te quería invitar a la fiesta que celebraré mañana, pero ya veo que no irás — termina de hablar y retrocede unos pasos para darme mi espacio personal. Me señaló a mi misma en respuesta y alzando los hombros como preguntándole ¿A mi? ¿Porque?  — Entiendotu confusion aunque no lo creas, sabes, yo sé que dentro de — señala todo mi cuerpo en si — ti, me refiero a tu vestimenta y forma de actuar, hay alguien a quien en algún momento habrá un hombre dispuesto a amar, querer, proteger e incluso prometer y hacer cualquier cosa que tu digas sin dudar ni un segundo, — me río de lo que dice, siento que solo se burla de mí. — Vamos a fingir que te creo, estoy más que segura que esa persona no serás tú — lo señaló al finalizar y veo como hace una mueca de dolor. Si claro, como si mis palabras le afectaran, me doy la vuelta para irme no quiero seguir escuchandolo. — No importa, igual estás invitada a mi fiesta, será en mi casa, a las 10:00 pm — dice alzando un poco la vez ya que me había comenzado a alejar de el. — Si voy a tu fiesta no me reconocerás —  — ¿Y qué pasa si te reconozco? — — Me podrás pedir lo que tú quieras, pero no creo que tenga algo que te interese, creo que no tengo nada que hacer si quiera por ti —  — ¿Quien dice que no? — — Bueno eso ya lo veremos mañana, nos vemos —  Maldición, veo el reloj y ya falta muy poco para que dé el primer timbre para el inicio de clases, me voy a paso apresurado ya que me toca finanzas. Después de todo el día de clases me voy a la casa igual caminando ya que el bruto de mi hermano se quedó en el cole y me mandó un mensaje diciendo que iba a demorar, que era mejor que me vaya yendo, que no lo esperara. Así que me voy a la casa, termino de hacer unos trabajos que dejaron en clases, miró la hora y ya es tarde no he comido nada, estoy cansada así que me acuesto a dormir. ( ... ) Me levanto de la cama son las 11 de la mañana, si muy cerebro y todo, pero cuando no hay clases, no madrugo, así que no se quejen de mí. A las 8 salgo de la casa. — Mama voy a salir no se a que hora vuelva —  — Está bien hija, ya es hora de que salieras, toma — me extiende una tarjeta — es para que puedas comprarte algo bonito — asiento con la cabeza. Hugo me mira y no dice nada ... Bueno a mí no me dice nada solo mira a mamá. — Mama yo tengo una fiesta después así que también saldré de la casa —  — Está bien hijo, se cuidan ambos, no quiero que peleen ni lleguen muy tarde a casa —  Le hago una seña con la mano como despedida y me voy al centro comercial para irme a comprar unos jean celestes rasgados en las piernas, un top n***o unas zapatillas blancas, he decidido también ponerme los lentes de contacto para que así no me reconozca, claro que aún mantengo el color de ojos, también me hice olas en las puntas de mi cabello y las tiñe del mismo color verde de mis ojos. Una ves lista me fui a la fiesta de Juan, ni bien entre llame la atención de muchos de los chicos, abrieron sus ojos y en varios se posó una mirada lasciva que me hacía sentir incómoda. No veo a Juan por ningún lado, mi único propósito aquí es ver si el me llega a reconocer o no, pero no lo veo. Comienzo a caminar entre la gente pasando entre los pasillos de la casa hasta que entró a la cocina y veo a Juan mirando por la ventana mientras mira fijamente en dirección a la puerta como si estuviese esperando a alguien. Le tocó suavemente el hombro, sus ojos se abren de par en par, me mira de arriba a abajo y de vuelta, me sujeta la mano y me hace dar vueltas en mi propio lugar. — Ven — no me da tiempo a responder cuando me jala por la muñeca hacia el segundo piso, lo sigo sin decir nada, aún no sé si me reconoció o no. Llegamos a lo que parece ser su cuarto cierra la puerta y echa llave me siento en su cama. El voltea y me vuelve a mirar fijamente, pero esa mirada es más intensa. — ¿Que dijiste que iba a obtener si te reconocía? — con es apregunta me di cuenta de que si sabía quién era. — ¿Que no me harías ni dirías nada de mi aspecto en otra faceta ? —  — jajaja, buen intento, pero no es lo que yo recuerdo — lo interrumpí — Entonces si lo recuerdas no me vengas con tus pendejadas y dime que me vas a pedir —  — Está noche —  — ¿Que? No te entiendo, ¿Que tiene esta noche? — — Nunca vas a entenderme — — Bueno si me explicarás si entendería, pero cada vez que veo que quieres decirme algo parece que te arrepientes ya que al final no dices nada —  — Tienes razon, por eso creo que mejor es hacer que decir —  — ¿Que quieres decir ... — y antes de que pueda terminar de hablar el se acercó rápidamente y junto sus labios a los míos, abrí mis ojos por la sorpresa era mi primer beso, me quede en shock en un inicio, luego intente alejarlo pero no podía, sentí que me quedaba sin aire y ahí me soltó, recupere fuerzas y lo primero en lo que pensé fue en abofetearla, cosa que hice, pero no con el efecto deseado. — Acabas de despertar a la bestia, bella — me dijo el mientras intentaba soltarme ya que me había retenido mis piernas con las suyas y una de sus manos sujetaba las mías por encima de la cabeza. Volvió a besarme, pero está vez, no fue tosco ni demandante como el anterior, este fue más suave, apasionado, diría que es así como se besan las parejas, lo cual me pareció raro ya que nosotros no lo éramos.  — No tienes idea de cuántas veces quise hacer esto — dice en un susurro, que logró escuchar y siento como mi respiración está agitada, mi corazón parece caballo desbocado mientras late rápidamente. —¿ Que? — — Me gustas Deb, me haz gustado desde que te conocí cuando entraste a la uni, siempre te alejabas de todos, yo no tenía forma de como acercarme a ti, la única que vez que me dirigiste la palabra fue por qué caíste literalmente hablando a mis pies. Pero siempre he estado enamorado de ti, por eso se que eras tú, mi cuerpo reacciona solo contigo — no entendí a qué se refería y el parece notar mi duda ya que suelta mis manos se sienta a mi lado mientras agarra una de mis manos y la guía a su entrepierna. — Tu eres la única que logra esto, ninguna otra, jamás ha habido otra, solo eres tú, no habrá nadie más que no seas tú — Waoo, eso fue .... Impactante, sorprendente, es una declaración de amor de parte de uno los chicos más guapos de la uni, no lo puedo creer. — Yo ... Mmmm — quería decirle muchas cosas entre ellas que siempre me pareció alguien simpático pero no me dejó ni hablar, me beso nuevamente, me deje llevar. — No,  espera .. —  dije poniendo una distancia entre nosotros —  No, bueno si tu quieres esperar, yo no me voy a negar, no te pienso obligar a nada, asi que tranquila, no te pongas nerviosa —  me dijo y yo ni siquiera me habia dado cuenta de que estoy temblando, pero sinceramente no se si es de frio o de los nervios que me producieron sus besos. Estoy confundida, el solo se quedo ahi mirandome, no se si creerle lo que me dijo, es uno de los populares y ... mi hermano ... Oh por Dios, si mi hermano se entera de esto,  no, no, lo mejor es que me vaya, como puedo lo empujo y salgo corriendo de la habitacion, siento que el viene atras mio pero no me importa, no pienso parar. Ahora ya entendi todo, es un plan de mi hermano para burlarse de mi, no pense que fuera capaz de esto, es mi hermano, aunque no nos llevemos bien, no podria hacerme esto, o bueno yo era demasiado ignorante al pensar que el no seria capaz de algo semejante, y el, el que dice amarme ...  Siento que alguien me llama, pero por la distancia no logro reconocer la voz, veo unos callejones oscuros mas adelante, no me importa el riesgo que pueda haber ahi ,asi que me meto, me escondo entrelas sombras y se escuchan pasos de mas de una persona, es cuando escucho mas claramente las voces. — ¡ DEB! —  esa voz la reconozco, es de mi hermano, me esta buscando y su voz se escucha preocupado —  ¿ Que mierda paso con  mi hermana, idiota? —  —  Yo no lo se ... —  —  Como que no lo sabes, estabas con ella, saliste detras de ella, asi que dime de una buena vez, ¿ Que mierda paso, para que ella saliera asi de tu casa? —  —  Nada malo, te lo juro, yo solo le dije sobre .. —  —  Dime que no le confesaste tus sentimientos por ella —  pregunto mientras se pasaba una mano por detras de la cabeza hasta por todo su rostro , el asintio —  Ok, entonces ya se que paso, estoy seguro de que ella ha de pensar en estos momentos de que todo se trata de algun truco por parte mia, maldicion, puede ser nerd, pero tambien tiene sentimientos, por sobre todo es mi hermanita menor, carajo, esto debiste decirle desde hace 2 años, no ahora —  lo agarro del cuello de su polo — ¿ Por que se lo dijiste hoy, porque ahora? ¡CARAJO! —  lo solto de manera brusca, pero me quede mas impactada al oirle decir 'hace dos años' 'hermanita menor'. Tengo que aclarar esto de una vez por todas. — ¿ Que dijiste? —  pregunte mientras salia de las sombras, los dos voltearon a verme uno con la cara palida mientras el otro con alivio. —  Por suerte estas bien hermana, vamonos a casa mejor de una vez, ya es tarde —  —  ¡No! —  me solte de su agarre — Ahora mismo ustedes dos me van a responder que es lo que estaban hablando hace unos instantes —   —  Mira hermanita, estoy mas que seguro que por salir de ese lugar, creo que escuchaste bien lo que estabamos hablando, ahora que si quieres profundizar en el tema, pues en ese caso dimelo y te dejo a solas con el mongol aca —  dijo mientras señalaba con la cabeza en direccion a Juan. Yo tambien voltee a verlo a el y se puso mas palido de lo que ya estaba, hasta ahora no habia hablado, sentia desde antes sus nervios al notar mi presencia. —  Yo ... —  mi hermano no dejo que terminara de hablar. —  Piensa bien lo qque vas a decir, porque dudo mucho que despues de esta noche haya otra oportunidad como esta, ademas —  dijo mientras me señalaba —  aprovecha la curiosidad que tiene, es mi hermana menor, la quiero, se que tu no le haras daño, pero —   dijo acercandose a el —  te juro que si te da la oportunidad de estar juntos y tu lastimas de alguna u otra manera, no viviras para contarselo a nadie —   Juan asintio —  tranquilo —  parecia que ya se habia recuperado del shock en el que se encontraba —  tu mas que nadie sabe que no podria jamas lastimarla, primero me lastimo yo antes de que algo o alguien llegue a hacerle daño —  le palmeo el hombro a mi hermano y se fue sin siquiera decirme nada, volvio mi hermano el engreido. —  Vamos a mi casa, no podemos seguir hablando en la calle a estas horas, vamonos, te juro que alla te respondere todo lo que tu quieras —  me extendio su mano para irnos juntos, se lo di, el aprovecho eso para atraerme a su lado y abrazarme. Ibamos dando unos pasos hasta que llegamos a un cruce que nos señalaba que no podiamos pasar, estaba mirando nuestras sombras cuando siento su mano en mi barbilla, obligandome a mirarlo, y cuando lo hago nuestros ojos hacen contacto, siento que me pierdo en ellos, veo como poco a poco su rostro se va acercando al mio, no pienso en nada mas, mi mente se quedo en blanco, cierro los ojos, segundos despues siento sus labios por encima de los mios rozandolos suavemente. —  Si no quieres que te bese solo dimelo, porque estoy haciendo acopio de toda mi fuerza de voluntad para no hacerlo en estos momentos — suspire al sentir su calido aliento en mi rostro. Negue con la cabeza, pero no me referia a lo que el habia dicho sino que no queria que se deetuviera, siendo sincera queria sentir sus labios sobre los mios, el me malentendio ya que se separo de mi y fruncio el ceño, pero no me solto mi mano. No dije nada, seguimos caminando al cambio de luz, en direccion a su casa, cuando llegamos la gran mayoria estaba fuera de ella, asi que los pocos que quedaban dentro el los fue botando literal.  Nos quedamos en su sala, el fue por unas gaseosas o cervezas, caundo regreso no me miro, solo dejo las bebidas ahi, para que pueda escoger a mi gusto. Se quedo en silencio, supongo que sin saber que decir, pero yo si sabia que tenia que decir y eso era preguntar y el darme respuestas. —  Muy bien ... entonces ahora explicame, ¿que fue lo que quiso decir mi hermano con lo anterior? —  —  Yo ... bueno, la verdad es que tu hermano ya conocia mis sentimientos por ti —   —  Eso aun no responde mi pregunta —   —  Si, ya lo se, pero tampoco es como si me lo pusieras tan facil, para poder expresarme como cuando se lo dije a el, es distinto, sabes, en si, nunca me crei capaz de decirte esto, en realidad es desde unos años atras, desde que tenias 14 años, yo .. siempre te miraba, me atrajo tu forma de ser, si dices o hacen ver que no eres buena, pero yo se que eso no es verdad, todos tenemos un corazon que esta dispuesto a querer a quienes quieren a su portador, donde incluso si pones un hielo, el corazon con su calor podra derretirlo, se que tu eres asi, solo que no te dan esa oportunidad de querer, amar, te juzgan por como te ves, pero aun asi no les haces caso y es lo que mas les enfada, yo te quiero, te amo —   —  ¿ como estas seguro de que es amor lo que sientes por mi? —  sonrio al escuchar mis palabras, tal parece que ya se esperaba eso. — Espera aqui —  se levanto y fue hacia una habitacion donde se perdio unos minutos hasta que salio de ahi con algo parecido a un cuaderno que cuando se acerco a mi lado me lo entrego, no sabia lo que habia asi que no sabia si aceptarlo — Tranquila, no es nada malo, pero te juro —  me sujeto mi mano para colocarlo en su pecho, donde se encontraba su corazon, sentia sus latidos —  eso es lo que provocas con solo mirarte, desde que eras niña, simpre era lo mismo, al principio no lo entendia, hasta que se lo comente a mi papa, me describio ciertos escenarios, al imaginarmelos yo, en absolutamente todos aparecias tu, no habia nadie mas ahi, solo tu y yo, entonces me dio la respuesta .... Estaba perdida e irrevocablemente enamorado de ti desde ese entonces, mi padre lo sabe, la verdad es que desde que se entero estuvo apresurandome para confesarte mis sentimientos hasta que le dije que no me atrevia, entonces el me hizo darme cuenta, de que si seguia perdiendo el tiempo, capaz, te podria perder para siempre, por eso ayer recien me atrevi a hablarte —  iba a decir algo pero no me dejo — No, yo no te hice caer, te ayude a levantarte, tambien las escuche, pero no hice nada hasta que tu desapareciste, eso es otro asunto, en fin, gracias a mi padre me atrevo ahora a decirte que te amo —  Me quede en silencio, no sabia que decir despues de todo, Juan es un chico simple, popular, amable, humilde, no alardea nunca, si, ya se, no niego que el tambien estoy enamorada de el. —  ¿ Poque no me besaste en el cruce? —  me atrevi a preguntar, el se quedo unos momentos en silencio. —  Porque, tu te negaste —  comence a negar con la cabeza mientras sonreia —  ¿Por que te ries ahora?—   —  Porque lo que yo queria era que lo hicieras, negue porque no estaba de acuerdo con tus palabras, eso es todo —  me quedo mirando sorprendido, despues de unos instntes parecio despertar y se empezo a reir suavemente, me miro y se mordio el labio inferior, volvio a sujetar mi mano y me llevo a rastras a su habitacion, donde todo estaba oscuro, solo estabamos el y yo . Se paro en la puerta para que yo pase primero, y el cerro la puerta despues de mi, me acorralo entre la puerta y el, dejandome sin aire por la impresion, donde tambien aprovecho para besarme, no me opuse en esta ocasion, le segui el beso, suave, lento con amor, nos movio en direccion a la cama. Me acosto suavemente en ella, nunca rompimos el beso, su mano que reposaba en mi cintura comenzo a moverse hasta arriba a la altura de mis pechos, comezo a frotarlos por encima de la tela, gemi sin poder evitarlo, deslice mis manos por su cuello atrayendolo mas a mi. —  No te imaginas cuanto te amo, pero debemos detenernos, no quiero que esto pase asi, no de esta manera —   — ¿ Y si yo te digo que si quiero? —  me mordi el labio inferior, vi como su mirada se posaba en mis labios, y volvio a besarme pero esta vez con mas intensidad. —  ¿ estas segura? No creo poder contenerme despues de iniciar —  asenti mientras ahora era yo quien lo jalaba mas cerca de mi para poder besarlo. Comenzo a descender sus beso por mi cuello, mientras su mano iba sacandome la ropa por mi cabeza y el pantalon. Yo le consegui sacar su ropa y desabotonar sus pantalones mientras el comenzaba a hacer lo mismo conmigo, hasta que quedamos completamente desnudos, sus ojos daban a los mios, mientras sus besos habian descendido desde mi cuello hasta dejar un rastro hasta mi vientre bajo, y al mirarme es como si me pidiera permiso para seguir su camino hasta llegar a mi sexo. Empezo dando leves besos en mis muslos, las caricias que hacia en mis piernas, me mandaban corrientes electricas, senti su lengua pasar por encima de mis labios vaginales, sus dedos comenzaron a frotar mi c******s, arquee mi espalda dandole mas acceso a mi intimidad, arrancandome gemidos de placer, pero tambien estaba nerviosa a parte de excitada, mi primera vez, iba a ser con Juan, no queria parar a pesar de mis nervios, sus dedos bajaron de mi vlitoris hasta mi entrada, donde suavemente los froto para embarrarse con mis fluidos y poco a poco meterlos con delicadeza. —  ¡Ah ! —  gemi al sentir como aumentaba la velocidad de los movimientos de sus dedos. — Deb, no sabes ... cuantas veces soñe con esto, contigo en mi cama, esta noche vas a gemir y llamar mi nombre —  Dejo de meter sus dedos y al sacarlos se lo metio a su boca, succiono cada uno de ellos, luego sostuvo su m*****o en la entrada de mi sexo, lo froto de arriba abajo, yo movia mis caderas esperando el contacto. Juan al parecer tampoco podia aguantar mas con este bello juego de placer, fue introduciendo poco a poco su m*****o, cerre mis ojos al sentir una pequeña incomodidad, el aun no lo notaba, hasta que introdujo un poco mas, fue cuando a pesar de todo mis intentos termine haciendo un quejido de dolor, donde el se detuvo mirandome, esperando a que le explicara tal vez que habia pasado. —  yo .... Soy virgen —  el abrio sus ojos como platos, la lujuria se fue en un instante, ese deseo y excitacion que sentia se habia ido. —  No, Deb,  asi no, es ... —  — Quiero hacerlo contigo ahora o nunca —  demande, me miro sorprendido y asintio con la cabeza. —  Esta bien ire despacio, avisame si te duele —  Me beso, bajo a mi cuello, beso mi lobulo de la oreja, mordiendolo ligeramente antes de soltarlo para bajar a mis pechos, arquee mi espalda al sentir como comenzaba a succionar mis pezones erectos por la excitacion, los mordia ligeramente antes de soltarlos, esta vez sin juegos, su pene erecto fue hasta mi entrada, con una mano sujetando su m*****o erecto, y comenzaba a adentrarse nuevamente poco a poco. Por cada avance se detenia para observarme, pero yo estaba llena de deseo, comence a mover mis caderas para acercar mi entrada a el. para hacerlo que se fundiera conmigo en uno mismo, parecia que ya se habia dado cuenta de que ya nada nos detendria, entro una vez mas y esta vez si senti el verdadero dolor, sin querer solte unas lagrimas, gire mi rostro a un lado. El me sujeto de la barbilla para verlo, beso cada uno de mis lagrimas, me miro a los ojos  —  TE AMO DEB —  grito a pesar de estar en su casa, cuando de pronto se escucho un ruido fuera de esta. —  ¡ ya era hora hermana! —   —  ¡Asi se hace hijo! —   Yo estaba que me moria de la pena, mientrs el se reia suavemente al ver mi cara sonrojada, lo golpee suavemente y dejo de reirse para verme con deseo de antes, como ya no sentia dolor, comenzo a moverse suavemente, sus embestidas eran suaves, calmadas, pausadas, demostrandome que no era solo sexo, estabamos haciendo el amor. —  Estas .... Oh por .... Deb ... Dios .... —  no entendia mucho lo que el estaba tratando de decir pero si podia decir que lo estaba disfrutando tanto como yo, esas palabras que soltaba lo hacia como gemidos. —  Juan , esto es, siento ... ahhhhh —  no se que me paso, pero senti un liquido entre mis piernas. — Shhh tranquila Deb, no es lo que piensas, pero me alegra ser yo el causante, Ahhh ....  despues te explico —  asenti aun sin saber muy bien a que se referia. Sus movimientos comenzaron a ser mas rapidos, pero con suavidad, me trataba con fragilidad como si temiese que me fuese a romper. — Nena, volteate y ponte en boca abajo levantando tu culo — Oh diablos, estabamos cambiando de posicion, esa voz tan dominante con la que me hablo, no dude en obedecer, asi que me voltee y quede asi como el me lo pidio, sujeto mis caderas, y luego de una estacoda me penetro, haciendo que soltara otro gemido. —  Ahhh ..... mmmmm .... Juan .... yo no se .... si .... ahhhhh .... vaya a aguantar mas ... —  lo decia porque mis rodillas ya no daban mas. Pero tambien tenia una extraña sensacion en mi vientra y un calor comenzaba a crecer en mi interior, no sabia lo que era, pero no creia poder retenerlo durante mas tiempo. —  Dejalo salir Deb, no lo retengas mas, quiero que te corras para mi —  senti como iba aumentando aun mas ese calor en mi vientre, unas embestidas mas por parte de Juan y aparte una palmada en mis nalgas, hicieron que ya no pudiera retenerlo mas, me corri como dijo Juan, el siguio embistiendome. —  Ahhhhh .... Mi turno, voy a correrme Deb, despues te comprare la pastilla —  y senti como el se iba perdiendo el ritmo de sus embestidas entonces cai en cuenta de que el tambien habia terminado. Se acomodo a mi lado, y me dio un beso en la frente, me acurruque entre sus brazos, pegue mi cabeza a su pecho. —  Yo tambien te quiero Juan, de hecho tambien me gustabas, solo que no me atrevia a decirtelo, pense que no me harias caso nunca por ser la nerd —  dije apenada bajando la cabeza. —  Te amor tanto Deb, no me importa lo que digan los demas, solo me importa lo que tu me digas a partir de ahora, te amo, ahora y para siempre, no te dejare nunca sola —  me beso tiernamente, antes de quedarnos dormidos juntos.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD