CAPÍTULO XXVIEl deseo de William de ver bailar a su hermana, produjo en su tío una impresión más que momentánea. Al expresar sir Thomas la esperanza de que acaso se presentara una oportunidad, no lo hizo para no acordarse más de ello. Por el contrario, quería complacer a quien fuese que pudiera desear ver bailar a Fanny, y dar gusto a la gente joven en general; y habiendo meditado el asunto y tomado su resolución tranquilamente, con toda libertad, dio a conocer el resultado a la mañana siguiente, durante el desayuno, cuando, después de recordar y alabar lo que su sobrino había dicho, añadió: ––No quisiera, William, que abandonaras Northamptonshire sin esta satisfacción. Para mí sería un placer veros bailar a los dos. Hablaste de los bailes que puedan darse en Northampton. Tus primas había

