Además de las invitaciones, Lucas presentó el vestido y los accesorios que Elsa había elegido la semana anterior. También les explicó que esa tarde cada uno tendría un viaje con todos los gastos pagados a un spa, salón de uñas y peluquería. Me informaron sobre la una que Elsa y Cindy acababan de llegar al spa. Un grupo de mujeres las esperaba para mimarlas y prepararlas para nuestra salida nocturna. Recibirían un trato digno de la realeza. La limusina las esperaba para llevarlas a casa o a donde quisieran ir. Sheila había sugerido la idea del spa. Pensé que si tenía que humillarme, como lo llamaba Sheila, tenía que hacerlo por encima de cualquier expectativa con la familia de Elsa. Cindy conocía cada detalle de nuestra relación desde dos perspectivas. Elsa se lo había contado todo, y ell

