Asfixia

3242 Words
UN AÑO ATRÁS. Estaba recostada, mirando hacía el cielo, me parecía irreal el cómo las nubes podían tener cientos de formas posibles, me agradaba la idea de creer que había personas que yacían en el cielo, pintando los paisajes que mirábamos, puesto, que nunca habría visto un cielo que no me llenará de vida, quizá, a esa vida pasaron los pintores que fallecieron, nunca dejando de llenarnos la vida con el arte. Me encontraba en el lago, con amigos, Alana estaba bebiendo a unos metros de mí con Jackson, mientras que los demás hacían lo mismo, beber. Me gustaban las fiestas de los lagos, eran tranquilas, pero también perfectas, siempre habría creído que con ellas podría ser capaz de divertirme cómo de encontrar una paz que posiblemente en ese momento no tenía. —¿Harás algo mañana? —, Preguntó Javier, me encogí de hombros—. Estaba pensando, ¿querrías acompañarme a un concierto? —Pierdes tú tiempo. Javier—, mencionó Jackson, a lo que le miré con las cejas fruncidas—. No tardará en llegar Shawn, a celar a Blake. —Jack—, Le dijo en un susurró Alana—, No comiences. —Qué no es comenzar, todos saben en este lugar que Blake necesita pedirle permiso a Shawn para poder salir—, Rodó los ojos Nicole—, Es una pena, seguro te habría encantado el concierto. —Son unos idiotas—, Refunfuñe rodando los ojos ahora yo. Me encontraba de lo más tranquila mirando el cielo cómo para que todos salieran con las tonterías con las cuales venían diciendo, yo no necesitaba pedirle permiso a nadie para poder salir, era mi vida, eran mis decisiones y yo podía ser capaz de tomarlas sin pedirle permiso a Shawn. Sólo éramos mejores amigos. Si bien, nos habríamos acostado un par de veces, pero eso no significaba nada, ambos habíamos acordado que seríamos amigos con derechos, puesto que ninguno de los dos quería fracturar la amistad que teníamos, era bastante buena y sabía a la perfección que nunca podría encontrar una amistad cómo la suya. —¿Concierto de quién? —, pregunté mirando en dirección de Javier, colocándome las jafas de sol—. ¿Cuándo? Además, adoraba los conciertos, teníamos que conducir un poco porque siempre eran fuera del pueblo, adoraba salir del pueblo, en general. A veces, me sentía demasiado asfixiada en este lugar, las personas eran lindas, pero era repetir lo mismo día tras día. —Uy, cuidado Javier, te meterás en problemas con Shawn—, Se mofó Nicole, le levanté el dedo medio, ella rodó los ojos para sumergirse en el lago. —El concierto será de Melanie Martínez, se que te gusta su música… —Iré. *** Podía sentir la mirada furiosa de Shawn encima de mí, mientras me maquillaba, Javier no tardaría mucho en llegar por mí, habría mandado mensaje, y de un de repente, cómo si Shawn lo hubiera sospechado, se habría plantado en mi casa hace diez minutos insistiendo que cancelara mis planes, puesto que tenía boletos para una película fabulosa. —¿Me dejarás colgado? —, preguntó con enfado, negué—. Entonces, llama y cancela. —Lo siento Shawn, no cancelaré—, Expresé cerrando el rímel, dejando este encima de mi tocador—. Sabes lo mucho que me encanta Melanie, no puedes pedirme que cancele mis planes. —¿Pondrás a Javier por encima de mí? Vaya amiga—, Expresó con enojo. Sabía que no era así, tanto él cómo yo, pero, no podía entender cómo es que le molestaba que hiciera planes con otras personas, sabía perfectamente que no era de su propiedad, cómo para que se enfureciera así porque hiciera planes con alguien más. Había intentado comprar yo los boletos para ir a ver a Melanie, pero se habrían agotado casi de inmediato, por lo cuál no habría podido comprarlos yo, de igual modo, de ir al concierto, no iría con él, no le gustaba la música de ella, por lo cuál iría con Alana. Pero los planes cambiaron. —Deberías de estar feliz porque vaya a ver a una de mis cantantes favoritas—, Me giré en su dirección apoyando mis manos en el tocador—, además, ¿Qué te molesta tanto? Solo saldré con un amigo. Su semblante mostraba la molestia que tenía, me parecía bastante irreal el modo en el cual parecía estar furioso, hacía bastante tiempo que no lo miraba de ese modo, molesto por los planes que pudiera tener, no le dije nada, no quería seguir haciendo el problema más grande de lo que era. —¿Si consigo boletos para ir a Melanie? ¿Le cancelarías? —Vamos, Shawn. Si quiera te gusta su música—, expresé rodando los ojos—, Invita a Nicole a mirar esa película, parecías bastante emocionado por salir con ella hace unas semanas, toma tu oportunidad. —El punto es, que no quieres ir conmigo, ¿No es así? —, preguntó con cierto toque de cansancio—. Diviértete—, Menciono con cólera. —No puedes tener celos—, expresé tomándole del brazo, apenas paso por frente de mí, me miró con cierto toque de enojo—. Sabes perfectamente cómo yo, que sólo somos amigos, ¿No es lo que tu querías? El plan habría sido principalmente de Shawn, el no tener más que algo casual, lo acepte, puesto que sí me gustaba, pero el hecho de arruinar una amistad no me agradaba del todo. Estaba consciente, de que tarde o temprano los sentimientos se terminarían por mezclar, lo habría tomado yo bastante bien, habría hecho todo lo posible por no involucrarme lo suficiente en los temas del amor con Shawn, pero no podía decir lo mismo de él, puesto que cada que salía con alguien, aún si fueran solo planes de amigos, podía ver la furia dentro de él y los celos recorrer su cuerpo de manera completamente ruidosa. Sabía que esto tarde o temprano nos terminaría por cobrar factura, pero esperaba con todas las fuerzas de mi interior, que fuera tarde. —Sólo olvídalo Blake. Esa noche disfruté el concierto demasiado, fue de las mejores noches que habría tenido en mi vida, pero las semanas después de ello, si fueron un completo martirió, Shawn me ignoraba, cómo si lo hubiera traicionado del modo más vil que fuera posible, aún si no hubiera sido así. SEIS MESES ANTES Suspire pesadamente, para mirar hacía el espejo, habría ido anoche con Jackson a perforarme la lengua, me habría dolido de manera impresionante y aun tenía la misma demasiado hinchada, me parecía gracioso, pero era más entretenido el hecho de saber que mis padres no lo sabían, venía de una familia bastante conservadora, de la cual estás cosas, les parecían horribles. Baje las escaleras apenas escuché el sonido de la motocicleta de Jackson, para salir de casa, noté cómo es que el pirsin de su lengua también estaba aun hinchado, habríamos bebido un poco y habría parecido una de las mejores ideas que habríamos podido tomar jamás. —¿Tus padres se han enterado ya que te has perforado la lengua? —, preguntó a lo que negué—. Así que eres una chica mala. —Malísima—, Rodé los ojos, para subir detrás de él—, ¿A dónde iremos? —Pensaba en ir a dar la vuelta, un rato. Aunque, no se cuanto tiempo dure nuestro paseo—, mencionó con pesadez—, Así que… —¿Por qué lo dices? Me miró por el espejo retrovisor, a lo que arqueé una de mis cejas esperando que continuará, pero no lo hizo, simplemente aceleró. Mi familia no aprobaba mi lazo con Jackson y la amistad que teníamos, decían que él era mala influencia, haciendo que tomará acciones que podrían marcar mi vida de una manera que podría ser permanente, en realidad, a mi me parecía una completa tontería, puesto que todas las decisiones las tomaba yo, porque con Jackson lo único que hacía era cumplir aquellos sueños que habría tenido alguna vez, que por cobardía de no desobedecer a mis padres no habría hecho. Jackson me llenaba de valor. Contrario a ello, mis padres adoraban a Shawn, decían que debía de casarme con él puesto que parecía que podría darme dicha relación que sería perfecta, las mismas relaciones que en un pasado eran perfectas, Shawn les decía que no me dejaría trabajar, me mantendría con un par de niños, y haría que fuera feliz, cuidando de mis hijos, de mi hogar y un pequeño jardín, sabía cómo ganar a mis padres, pero él cómo hacer que pensará dos veces si en realidad quería quedarme con él. No juzgaba en lo mínimo a las personas que se dedicaban a cuidar de su hogar, en realidad, parecía ser una tarea un poco complicada, el hecho de tener que estar detrás de las responsabilidades de más de una persona, de igual modo no era algo que quisiera hacer yo, supongo que, para mis padres, eso era uno de los primeros actos de rebeldía. Llegamos a un parque, apenas baje note cómo se encontraba tan tranquilo, siempre parecía estar tranquilo por cada una de las cosas que pasaban en su entorno, siempre habría querido ser un poco cómo Jackson. —Así que, ¿Cuándo nos iremos? —, preguntó a lo que fruncí las cejas levemente—. Sabemos los dos, que aquí, no seremos felices. —Sí, pero… —Siempre fue tu sueño salir de aquí, entonces, ¿cuándo lo harás? —, preguntó a lo que arquee una de mis cejas—. Siempre fue tu sueño comerte al mundo. —Ese sueño… Comenzaba a tener mis dudas, por el hecho de que mis padres y Shawn siempre decían que era uno de los actos más egoístas que podía tomar, dejando a cada una de las personas que me querían sin mirar atrás, mis padres decían que no podrían perdonarme abandonar a mi familia, puesto que era lo primero. No querían que estudiará, puesto que decían que debía de encontrarme a alguien cómo Shawn, que quisiera mantenerme en el hogar, cuidando bebés. Suspiré pesadamente, para sentarme en una de las bancas, a veces, estaba demasiado enojada con Shawn, quien terminaba por meterles ideas a mis padres, o, mejor dicho, asegurando los deseos que tenían para mí. De ser por ellos me habrían cambiado por una vaca a la familia de Shawn con las únicas intenciones de que dejará mis sueños. Decían, que, además, de querer estudiar, la carrera que quería estudiar era una completa estupidez. Sin darse cuenta, que vivíamos del arte, eran del tipo de cosas que eran capaces de llenarnos la vida de color cuando esta se encontraba ya demasiado gris. —¿Qué haces con él? —, preguntó Shawn furioso—, Vámonos. —No me iré—, Expresé con las cejas fruncidas, dando un paso hacía atrás—, ¿Qué te pasa Shawn? No eres mi padre para decidir con quien debo de estar. —Te he dicho cientos de veces que te alejes de ella, imbécil—, Le dijo a Jackson pasando de largo mis comentarios, rodé los ojos con cierto toque de cansancio—, ¿Qué diablos tienes en la lengua Blake? —No te metas…. —Vámonos Blake—, Me ordenó Shawn. —No me iré contigo si no te calmas. *** Decir que lo que sucedió después no fue algo que terminó por hacer que el desastre se desatará, que dentro de mi la furia creciera de manera irreal… Sería mentira. —¡Blake! ¡Baja ya! —, La voz furiosa de mi padre resonó por toda la casa, fruncí las cejas levemente, para levantarme—, ¡Blake! Apenas llegué al inicio de las escaleras y noté a Shawn con la mirada de preocupación fingida entendí de lo que se trataría, Shawn llevaba meses intentando que dejará de frecuentar a Jackson, diciendo que no era una buena influencia para mí, pero ya no sabía si deseaba lo mejor para mí, o terminar por apuñalarme por la espalda. —¿Qué sucede papá? —, Pregunté. Apenas terminé a mitad de la escalera, sentí cómo papá me jalaba haciendo que quedará en medio de él y mamá—, Me lastimas. Su mano presionó mis mejillas con una fuerza irracional que logró que saliera un chillido de mis labios, cerré los ojos, hijo de puta. Le habría dicho a mi padre del maldito arete. —Muéstrame tu lengua—, Me ordenó con furia, miré hacía Shawn con cólera, sin embargo, mi padre me hizo mirarlo a él—, Te di una orden. —Basta, me estás lastimando—, Susurré, pero presionó un poco más—, Papá… —¡Quién demonios te dio permiso de parecer una delincuente Blake! —, Me soltó furioso, a lo que le miré—, Quítatela, ahora. —No me la quitaré, ya soy mayor de edad y…—, Sentí cómo mi rostro se giraba bruscamente, generando un dolor en mi rostro. —Te di una orden, así que obedece—, Siseó con furia—, ¡Ahora! Mis ojos no dejaban de ver con rencor a Shawn, quien parecía estar disfrutando el tener una razón por la cuál hacer que dejará de ver a Jackson. Con cólera, terminé sacándome el arete, para sonreírle sin gracia. —¿Feliz? —, expresé para rodar los ojos. —No quiero que vuelvas a ver a Jackson, ¿Lo has entendido? —, Me ordenó papá. —No puedes prohibirme con quien salir y con quien no. Antes de tener una respuesta, papá me llevó a rastras a mi habitación, con los quejidos saliendo de mis labios de manera violenta, apenas llegamos, me aventó a la habitación. —No saldrás, hasta que me asegures, que no volverás a ver a ese delincuente. *** Si fueron días bastante largos, puesto que por mucho que intenté, con huelga, silencios, con todo, no me dejaban salir, sólo dejaban entrar a Shawn, y no sabía que era lo que me enfurecía más, tener que ver a Shawn, o estar encerrada aquí. —No estés molesta. Sólo quiero lo mejor para ti. —Comienzo a creer que no es así Shawn—, Le dije molesta—, ¿Es acaso que todos tienen razón? —¿Qué dices? —Lo único que quieres es controlar mi vida. UNA SEMANA ANTES —¿Hablaste con Shawn? —, Preguntó Alana, a lo que negué—, Vaya… —No me habla, desde que supo que tenía la posibilidad de irme a España—, mencioné tirando mi cabeza hacía atrás. —¿Le has contado a tus padres? Te saliste de su casa hace unos meses, después del tema de Jackson—, preguntó, a lo que suspiré de nuevo—, Qué imbécil. —¿Perdona? —, pregunté a lo que ella me miró con una de sus cejas arqueadas—, ¿Me has dicho imbécil? —No a ti—, mencionó con tranquilidad, sin embargo, podía ver en su rostro cierto toque de enojo—. Sino a él, parece que tu eres la única que no se da cuenta. —¿Darme cuenta de qué? —, pregunté a lo que ella suspiró—, No te estoy entendiendo. —Quizá son cosas mías—, Murmuró pasando el tema, para tomar de su café—, Sólo comienzo a creer que, en realidad, Shawn esta intentando hacer que te sientas culpable. —¿Qué ganaría con ello? —, pregunté con una mueca—. Si acaso, sólo que me sienta mal, pero… —Podría ganar que decidas no ir. Ha sucedido en ocasiones anteriores—, mencionó a lo que miré hacía el techo del lugar—, El suele hacerte sentir cómo si en realidad, fuera tu culpa, se te ha metido tanto al corazón, que pareces ser tu la única que no se da cuenta, Blake. —¿Darme cuenta de qué? —, Rodé los ojos con pesadez—, Se más específica. —Que ésta manipulándote emocionalmente desde hace tanto tiempo, que juega contigo de una manera, que crees que mereces lo que te hace, cuando no podrías estar más equivocada—, Respondió—. Creo que has sido la única que no se percata, que te lastima, y todavía eres tú quien le pide perdón. —Estás exagerando. —Esta vez, yo no detendré mi sueño, Blake. Me iré, contigo o sin ti—, Se levantó de la mesa, haciendo el chillido de la silla al arrastrarse con el piso—. Es hora de que tu también tomes una decisión. Le miré. Sabía a lo que se refería, pero supongo, que no quería aceptarlo, no quería aceptar, que las cosas que me decían tenían sentido, no quería aceptar que en realidad parecía que Shawn estaba usando mi lado sentimental para lograr que me quedará, cómo habría sucedido días anteriores. Veces anteriores, comenzaba a tener más dudas que nunca. ¿Era acaso que no habría sido capaz de notarlo antes? —¿Tomar una decisión? —, le pregunté, ella asintió sacando unos billetes de su cartera, para soltar un suspiro lleno de pesadez—. ¿De qué hablas? —Que es hora que tomes una decisión por ti, porque has pasado los últimos años poniendo a Shawn por encima de ti, de tus sueños, sin que parezca importarte en lo más mínimo si lo que podría venir después, podría lastimarte o no, creo…—pausó por unos segundos para bufar—. Creo que un día será demasiado tarde, no hay manera de regresar al pasado y cambiar los errores que cometiste. —Lo sé, pero… —Su sueño es quedarse aquí, Blake. Su sueño es seguir los pasos de su padre, pero, esos no son tus sueños—, mencionó con un poco de enojo—, No son tus sueños quedarte en medio de la nada, sin nada. Tus sueños siempre han sido comerte al mundo y estás dejando a las personas que en realidad te apoyan por un idiota, que lo único que parece es querer controlar tu vida. Le miré, esperando que dijera algo, que lo que habría dicho por ejemplo no era aquello que pensaba, pero no sucedió, parecía estar tan segura de las cosas que salieron de sus labios, lo extraño, es que en ocasiones lo habría pensado ya… —Te apuesto, que te hará el berrinche toda la semana, y ese día, que le digas que lo harás, terminará por decir, que no son nada ya, terminarás convencida de que debes quedarte… —No sucederá. —Eso lo veremos. Apenas dijo eso salió de mi campo de visión, no pude evitar sentir cómo mi estómago se contraía un poco ante tantas emociones, saqué mi celular, para enviarle un mensaje. Blake: ¿Estas molesto conmigo? ¿Por qué no te has comunicado? Golpee ligeramente la punta del teléfono en mi mentón, esperando una respuesta, sin embargo, sólo me marco el visto. ¿Alana tenía razón? No lo sabía, sólo sabía que me sentía asfixiada y no sabía si por el pueblo… O por él.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD