Larissa Estoy bajando el cerro para ir al trabajo, estoy con Henrique en mi regazo, siento que esta noche ha pasado algo diferente. Mires donde mires hay alguien con una radio en la cintura, armado y con sus ojos vigilantes, acelero mis pasos, los ojos de estos tipos captan cada paso, cada respiración, estoy seguro de que el cerro ha sido tomado. Dejo a Henrique en la escuela y me dirijo a la parada del autobús, subo a él y escucho la conversación de unas mujeres que están sentadas en el asiento trasero. Mujer 1: El cerro fue tomado ayer. Mujer 2: Sí, he oído los rumores. Mujer 1: ¿Quién será esta vez? Mujer 2: Todavía no lo sé. Mujer 1: En unos días se vuelve a armar el lío. Mujer 2: Bailes hasta altas horas de la noche, muchas drogas. Mujer 1: Los bailes no me preocupan pero sí

