Irresistible

Capítulo 6.

No le gustaba lo que estaba haciendo, escondiéndose de Joon Hee en la casa de sus padres, quienes respetaron su decisión de no querer ver al alfa, incluso si éste ahora era su pareja, y tenía todo el derecho de exigir verlo, ellos lo habían cubierto cada una de las veces, diciendo que no se encontraba ahí, pero que sabían que estaba bien.

Si sus padres hubieran seguido sosteniendo la mentira de no saber en dónde estaba, de haber cortado la comunicación con él, Joon Hee se habría dado cuenta que lo único que intentaban era ocultarlo, por eso, cuando una semana después de la primera vez que fue a buscarlo en la casa de sus padres, estos habían inventado la excusa que decidió ir a visitar a una tía que estaba enferma y que no volvería a la ciudad sino hasta unas semanas después, sin embargo, eso no hizo que alfa dejara de buscarlo, sino que cada semana iba a preguntar con él.

Sus padres le habían sugerido que no era necesario que fuera hasta ahí para saber de él, pero eso no funcionó para que Joon Hee dejara de ir una vez cada semana para saber las noticias de él, y Do Hyun comenzaba a sospechar que el alfa sabía que estaba ahí, porque si no fuera de esa manera, cada vez que se iba, no levantaría la mirada hacia su ventana, como si esperaba verlo.

No podía negar que su omega estaba ansioso y desesperado por verlo, y él tuvo que colocar todo su esfuerzo para no obedecerlo y salir al encuentro de Joon Hee, porque había tomado una decisión y era alejarse del alfa, romper su vínculo con la única opción que tenía y era que su marca no fuera renovada, sin embargo para que desapareciera pasarían años.

Sabía que Joon Hee no marcaría a otra y otro omega para romper su vínculo, y él estaba dispuesto a que cualquier alfa lo marcara para hacerlo, para devolverle su libertad, a pesar de saber que era muy difícil de que sucediera, pero si encontraba a alguien dispuesto, le dejaría que lo mordiera, porque muy probablemente, su amigo se quedaría a su lado por siempre sólo para no hacerle daño, pero esa marca no fue algo que quiso hacer.

Conocía a Joon Hee desde años atrás y siempre le fue fácil leerlo, por lo que después de que se mencionara la posibilidad de que estuviera embarazado o de que le confesara sus sentimientos, pudo entender que estaba considerando en permanecer a su lado para siempre, era como si le hubiese quitado la oportunidad de marcar a otra persona en la que pudiera interesarse en el futuro o lo estuviera en ese momento, y no era algo que Do Hyun quería.

Podía sentir a su omega ansioso y enojado con él por su decisión de permanecer en su habitación, viendo como los hombros de Joon Hee se hundían como cada semana que había una negativa a su pregunta sobre si él estaba ahí, pero al final una vez más asintió y comenzó a alejarse, mirando en dirección a su ventana por un momento antes de irse, como había sido su rutina desde la primera vez que fue a buscarlo ahí.

Do Hyun no entendía la razón de que lo buscara con tanta insistencia, si bien, eran amigos, no había nada más a pesar de eso y su marca, pero a su corazón le gustaba creer que existían más razones, como que el alfa se hubiera dado cuenta de que también estaba enamorado de él, pero conociendo a Joon Hee, sentía que lo más probable era porque no podía sólo dejarlo desaparecer sin ninguna explicación.

Escuchó los suaves golpes en la puerta y se alejó de la ventana para sentarse en la cama, fingiendo que leía un libro que nunca podía terminar porque su mente siempre encontraba formas de escabullirse lejos, siendo consciente de eso cuando su omega parecía un niño soñador haciendo planes de reencuentro con su alfa, porque no había mentido al decir que a él le gustaba Joon Hee, siempre queriendo estar cerca de él.

Luego de que diera permiso para entrar, vio a su madre hacerlo, quien tenía esa mirada preocupada en su rostro, la que siempre intentaba ocultarla con una pequeña sonrisa.

—Joon Hee se ha ido —anunció ella.

—Gracias —intentó sonreírle.

—Do Hyun —suspiró —¿por qué no lo ves una vez y le explicas todo?, creo que Joon Hee es un alfa lo suficiente razonable que te va a entender.

—Sé que intentaría tratar de entender, pero…

—Dos semanas más y estoy a nada de decirle que estás aquí…

—¡Mamá, eso es traición!

—Lo sé —la mujer sonrió, acercándose para acariciar el cabello de su hijo —pero él parece perder la paciencia cada vez que lo único que obtiene es que estás bien, estoy segura que en dos semanas puede estar usando su voz de alfa y será difícil para tu padre y para mí mentir.

—Joon Hee no haría eso, él lo odia… además, además estuve pensando en que tal vez no tengan que mentir más, que yo debería de irme de la ciudad.

Las caricias de su madre se detuvieron cuando él dijo esas palabras, y sus labios que habían mantenido una suave sonrisa comprensiva se volvieron una línea recta, dejando claro que ella no estaba de acuerdo con la decisión de su hijo, si bien, lo estaba ayudando cuando no quería ver a su pareja, no significaba que estaba de acuerdo, y más si ante sus ojos el alfa no hizo nada malo, incluso si su marca era producto del celo de Do Hyun.

—¿Y qué pasará con el bebé?, ¿no vas a decirle?

Do Hyun evadió la mirada de su madre ante esa pregunta, porque era algo que estaba preguntándose él mismo, sabía que era injusto que el Joon Hee no se enterara, pero si lo hacía, podía verlo aferrándose a él sólo por el hecho de intentar ser un buen alfa.

—Ta-Tal vez es mejor que Joon Hee nunca se entere del bebé.

—Do Hyun…

Su mirada se detuvo en las puertas que llevaban al balcón de la habitación, una sonrisa irónica apenas fue perceptible en sus labios antes de que ella negara con la cabeza, sabiendo que su hijo no iba a escucharla realmente, pero nada era tan fácil como él lo pensaba, debió de suponerlo.

—Te espero abajo para la cena.

Do Hyun miró con confusión a su madre, ella parecía con intenciones de decir mucho más, pero de un momento a otro se había callado y lo dejó solo, pensó que quizás porque no había forma de que él cambiara de opinión, pero esa idea fue rechazada cuando un aroma conocido llegó a su nariz, girándose de inmediato para ver hacia el balcón de la habitación, en donde poco antes de que su madre llegara, no había nadie pero ahora podía reconocer una sombra detrás de las puertas,

No pudo evitar llenarse de temor y su mano se apretó alrededor de las mantas en su cama, y como una confirmación a sus miedos, pudo escuchar aquella voz tan conocida al otro lado de la puerta.

—¿Por qué es mejor que no me entere del bebé?

Sintió un sudor frío recorrerlo y el temor incrementó, ¿por qué nada parecía salirle bien?,¿cuánto tiempo Joon Hee había estado ahí escuchando su conversación?