1

2331 Words
"No sirves para nada" "¿Por qué no eres cómo tu hermano?" "¿Dos puntos menos? Tu única obligación es mantener tus calificaciones perfectas" "pagamos todas tus academias, eres una pérdida de dinero" "si no quieres estudiar entonces trabaja para conseguir lo que quieres" "¿Realmente crees que ser bailarina es una carrera? Eso no nuestro tipo de gente, deberías seguir los pasos de tu hermano y estudiar negocios, es lo único que te servirá en la vida" "Me avergüenzas frente a todos" "Las discusiones de esta casa son todas por tú culpa, siempre vas en contra de lo que decimos" "Deberías cuidar mejor tu rostro, esas manchas son terribles" "¿no somos buenos padres acaso? Tienes todo lo que quieres siempre, hemos pagado las academias que querías, pero lo tomaste tan enserio" "¿entonces por qué lo hicieron?" pregunté "tienes que ser buena en todo, ser una persona completa pero solo eso, es algo extracurricular, nunca imaginamos que lo tomarías como algo que quieras para tu vida" dijo mi padre "todo es tu culpa, por dejarla seguir incluso si sus notas bajaban, debiste quitárselo" Esas palabras sonaban a gritos en la cabeza de aquella joven mientras las lágrimas rodaban por sus mejillas pasando por encima de sus preciosas pecas las cuales oculta en casa con maquillaje el cual ahora se ha ido luego de estar fregando con su manga Missa no dejaba de correr incluso ahora que no tenía los zapatos puestos, corrió demasiado hasta que llegó a su lugar seguro, un lago el cual siempre ha estado iluminado gracias a la luz de la luna pero ahora estaba todo oscuro, era como si la luna también se hubiera cansado de ella, había encontrado este lago hace algún tiempo atrás y desde entonces cuando quería escapar de casa siempre corría hasta aquí, ese lugar tenía algo que lo hacía especial y único, ese algo ahora no estaba, también se había ido cuando más lo necesitaba Tenía mucha tristeza ahora y no la podía sacar incluso si estuvo llorando horas, sus lágrimas se habían secado, rogó por aquello que quería escuchar, pero no llegó "Lo siento por no ser suficiente" Susurró y caminó poco a poco hasta adentrarse lo suficiente, no sabía realmente la profundidad de este, no estaba asustada, pero temblaba demasiado Su cuerpo ya estaba muy débil y lo único que vio por última vez fueron las estrellas pequeñas que estaban esparcidas en el cielo, eran pocas, pero eso la hacía darse cuenta que el cielo no estaba solo, la única solitaria en el mundo era ella, no pertenecía a ese lugar Tan pronto como el agua cubrió todo su cuerpo cerró los ojos y de repente escuchó aquello que había querido escuchar antes de entrar al agua. Aquella melodía de aquella guitarra que siempre la hacía sentir segura, cada que llegaba aquí y cerraba los ojos escuchaba ese sonido, pero no podía ver quién los provocaba ya que parecía que lo escuchaba en sueños, aunque estuviera despierta era como un hechizo que se rompía si abría los ojos Estando bajo el agua luchó por mantenerlos cerrados ya que si esa era la última vez que lo escuchaba quería hacerlo hasta perder el conocimiento, pero un impulso hizo que sus ojos se abrieran repentinamente, para su sorpresa el sonido nunca se detuvo, pensó en eso como una oportunidad así que salió rápidamente del agua El sonido seguía incluso ahora que estaba bajo el agua, sabía que no estaba sola y eso la hizo sonreír un poco, lo que más le sorprendió es que ahora como por arte de magia la luna estaba presente cerca de ella e iluminaba como nunca antes lo hizo, específicamente la luz parecía un camino que la guiaba a aquel sonido porque mientras más caminaba más de cerca lo escuchaba y tenía razón Bajo un árbol se podía ver una silueta que no podía identificar bien, pero estaba segura de que aquella melodía la provocaba la guitarra que tenía, no tenía nada que perder a estas alturas así que caminó más hasta estar cerca Cuando notó su presencia se detuvo, Missa estaba lista para hablarle, pero fue interrumpida por el sonido de la guitarra Su cuerpo aún seguía frágil así que se sentó a su lado sin mirar a aquella persona directamente al rostro Se detuvo por una segunda vez, pero ahora se había quitado la chaqueta y la colocó sobre ella - ¿por qué demoraste tanto? - susurró Missa -Aún tenemos tiempo ¿Puedes soportarlo un poco más? - Ella no entendía aquella pregunta, pero asintió, se acurrucó un poco más cerca de la otra persona y colocó su cabeza sobre su hombro, estaba débil, sus ojos casi se cerraban, pero se aguantaba, quería seguir escuchando - ¿Cuál es tu nombre? - le preguntó para hacer alguna conversa que la mantenga despierto -No creo que debas saberlo, tal vez no nos veremos por segunda vez así que no es importante ahora- luego de eso se dio cuenta de que se trataba de una chica, su voz era más clara ahora que hace algunos segundos, tenía una voz demasiado cálida y era agradable de escuchar -Vendré... Mañana... Vendré a verte, lo prometo- a estas alturas Missa estaba temblando de frío -No es fácil entrar a este internado y no creo volver aquí- -Por favor... - -Debería seguir tocando, solo mantente así- Missa asintió otra vez, poco a poco sentía que sus ojos se cerraban y aunque trató de mantenerse despierta al final se durmió Volvió a abrir los ojos, pero está vez en lugar de ver el cielo sus ojos visualizaron un techo blanco, aquel olor ya lo conocía así que sabía perfectamente donde estaba El hospital No sabía cómo había llegado ahí, sus recuerdos aún estaban borrosos y le dolía la cabeza como para pensar Trató de moverse un poco pero no tenía aún fuerzas, una enfermera se acercó a ella y le dio una sonrisa cálida -Tu cuerpo aún está débil así que es mejor que no te muevas por ahora, me alegro de que estés despierta, tus padres están afuera conversando con el doctor, ahora les avisaré- - ¿mis padres están aquí? - dudó y ella asintió- no quiero verlos, quiero ver a mi hermano- -Con gusto lo llamo ahora- Conocía los hospitales perfectamente ya que solía desmayarse a veces y su hermano la traía, siempre que despertaba veía a su hermano, pero jamás a sus padres, el solo pensar que sus padres estaban ahí la hacían sentir molesta -Missa... ¿Cómo te sientes? - preguntó su hermano llegando a su lado - ¿Cómo llegué aquí? - -tampoco lo sé, esta mañana llamaron a casa y dijeron que al parecer estuviste mucho tiempo bajo el agua y saliste, pero te desmayaste, alguien te encontró y te trajo- - ¿Estuve bajo el agua por mucho tiempo? - ahora que él lo mencionaba ella recordó que solo estuvo un poco más de un minuto -Me pregunto cómo fue posible si no sabes nadar perfectamente y nunca tuviste resistencia...Missa- el chico tomó su mano y la miró Missa trato de cubrir sus brazos, pero se dio cuenta que había vendas en el lugar de las heridas -lo de la laguna ¿fue un accidente verdad? - -No deberías preocuparte por eso ahora- - ¿Sentías mucho dolor? - dijo pasando su dedo delicadamente sobre la venda- Debió doler tanto... Debiste sufrir mucho en tu cuarto... Nunca te escuché llorar por las noches, creí que amabas mucho el maquillaje así que siempre buscaba los mejores, no sabía que realmente servían para ocultar tu dolor, amaba verte sonreír, pero nunca supe que detrás de eso había una niña que se estaba ahogando en lágrimas, siempre me cuidaste, pero ¿Qué hice a cambio? Solo lo ignoré- -Lixie... - llamó a su hermano por aquel apodo que tanto le gustaba y le sonrió -No merezco que me llames de esa manera, no te cuidé como prometí hacerlo el día en que naciste... ¿Estás molesta conmigo? Debes odiarme... Yo...realmente siempre me odiaba cada que ellos te comparaban conmigo, me odiaba cuando tenía buenas notas, me odiaba cuando hacía algo bien, no quería eso, no quiero eso, pero me prometí que daría lo mejor de mí para que vinieras conmigo, lejos de ellos y fueras feliz haciendo lo que te gusta... - -No estoy molesta contigo, nunca lo estaría, eres un buen hermano y realmente lo lamento, pasaste muchos malos ratos por mi culpa, fuiste tú quien me cuido, lo siento por hacer que te preocuparas tanto cuando sabemos que no soy la única que tiene malos ratos por culpa de ellos. eres el mejor hermano que la vida me pudo dar-...- -Lo siento, lo siento mucho- el chico que había estado conteniendo sus lágrimas sólo las dejó caer -Si ellos te vieran estarían muy molestos- dijo refiriéndose a sus padres -Ellos están preocupados también, cancelaron todas sus reuniones de hoy, cuando el doctor le dijo acerca de tus heridas... Ellos lloraron, nunca los había visto así antes...- -Si hubiera muerto ¿hubieran llorado de la misma manera? Se habrían olvidado de mí en tan solo una semana, hubiera querido verlos en ese momento- -Cuando la enfermera dijo que sólo querías que entre yo ellos me dijeron que te diga que te aman mucho- -saben actuar realmente bien, simplemente no quieren que sepan que ellos son los causantes de todo...no quiero hablar de ellos, me dan dolor de cabeza- -Deberías descansar un poco, estaré aquí para cualquier cosa, no me moveré en ningún momento- -Gracias- Missa movió sus manos para tocar sus propias vendas, realmente no dolía cuando sucedía... Lo que dolía era su corazón, aquel dolor que nunca pudo calmar, aquel dolor no se podía comparar con el de un corte pero que mágicamente desaparecía cuando escuchaba la melodía de aquella guitarra Ahora lo recuerda, la chica de ayer, la guitarra, la chaqueta - ¿dónde está mi ropa? - preguntó a su hermano Su hermano se levantó y le llevó una pequeña mochila -estaba mojada así que la llevaron a lavar, pero dejaron esto- sacó lo que estaba buscando Ella tomó la chaqueta y recordó lo que le había dicho, la promesa que le hizo -Quiero quedarme aquí... - dijo -Pero esto es un internado para personas...- -Lo sé- - ¿entonces por qué quieres entrar? - -Necesito encontrarla- - ¿A quién? - -A la persona que me sacó del agua... Ella me dio esta chaqueta- -No estoy seguro de que debas estar aquí, podemos venir cuando quieras, pero este lugar... - -Realmente es todo lo que pido, por favor ayúdame a quedarme por favor, prometo no volver a lastimarme si me ayudas a entrar aquí- -No creo que sea difícil, la doctora habló de que sería mejor que regresarás o te quedarás, pero mamá dijo que tal vez no sea bueno que te alejes de nosotros- - ¿quieren seguir arruinándome la vida? increíble- -veré que puedo hacer ¿okey? - -Eres el mejor- Missa se aferró a la chaqueta como si su vida dependiera de ello y así era, su vida dependía de aquella persona dueña de la chaqueta, si no fuera por ella no estaría ahora teniendo la oportunidad de ver a su hermano una vez más Aunque no había visto su rostro con claridad, pero recordaba su voz a la perfección, definitivamente la encontraría Su hermano regresó luego de un tiempo a la habitación -Estuvimos hablando con la doctora, dijo que estaría bien si solo vienes a las terapias, papá le dijo que no era tan grave como para internarte, pero insistí en que estaría bien que te quedaras así que vendrán a hacerte algunas preguntas y es mejor que no menciones lo de encontrar a alguien, solo di que te sentirás mejor estando aquí y que necesitas tiempo lejos de nosotros para sanar un poco- - ¿Dónde están ellos? - -Fueron a casa a empacar tu ropa, lo más probable es que si te permitan quedarte ya que la enfermera añadió que no querías verlos así que ellos se resignaron y la doctora comprendió que ellos te lastimaban de alguna manera indirecta- -Lo hacían incluso en mi cara ¿Dónde fue eso indirecto? - -Eso debes decirle a la doctora- -Ya veo... Bien, gracias- -Entonces saldré para que entre ella- El chico salió de la habitación y enseguida entró la doctora - ¿Cómo te sientes ahora? - -Por lo menos puedo moverme un poco más- -tu hermano dijo que querías quedarte, normalmente nuestros pacientes no piden eso por algún tipo de temor, así que quiero entender la razón por la que lo has pedido, cuéntame todo lo que sientas por favor- -Estar en casa es demasiado difícil para mí, quiero alejarme de todo eso, quiero alejarme de ellos, quiero estar bien, quiero dejar de sentir dolor y realmente estoy buscando ayuda pidiendo esto- - cuando dices ellos ¿Te refieres a tus padres? - -Sí, ellos- - ¿Qué hay de tu hermano? ¿También quieres alejarte de él? - -No, pero estando en casa tampoco lo veía seguido, solo siento que no podré más si regreso ahora- -Debes saber que tus padres están dispuestos a tomar terapia también, he conversado con ellos y... - -Dudo que les alcance el tiempo- -Se comprometieron a venir a cada sesión- - ¿vendrán? - -Por ahora tendrán terapia por separado hasta que te sientas lista para verlos- -Bien, gracias- -Iré a preparar tus documentos, tu hermano nos ayudó a llenar tu ficha así que no debes hacer nada más, cuando tengas tus cosas contigo te llevaremos a tu habitación- Dicho eso salió y volvió a entrar su hermano -Te voy a extrañar ¿lo sabes? - dijo él - ¿vendrás con ellos también? - -Lo haré- -Gracias por todo- -No he hecho nada aún, por favor regresa pronto a casa-
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD