Estaba muy cansada, desde los asuntos de la oficina hasta la llegada de las dos mujeres, me dolía la cabeza.
Después de cerrar mi habitación, me apresuré a buscar alguna medicina, parece que hoy voy a tener que descansar completamente. Pero ¿es eso posible?
Mi teléfono móvil no dejaba de sonar, después de haber tragado con éxito la medicina para el dolor de cabeza, mi mano alcanzó el bolso que estaba en la cama, buscando la fuente del sonido.
Resultó ser una llamada de Heru, sin pensarlo, apagué el teléfono. Necesito descansar, al menos hasta que se me pase el dolor de cabeza.
***
Sonaba como si alguien me llamara por mi nombre, parpadeo los ojos y trato de agudizar el oído, están golpeando la puerta, con pasos pesados, me dirigí hacia la puerta.
—Hola... —Bostecé ampliamente al abri
